Fuck you, I won't do what you tell me!
¿Puede un movimiento surgido espontáneamente en Internet vencer a la maquinaria más poderosa del marketing musical? Si utilizas a gente tan buena como Rage Against the Machine, sin duda sí. Los Rage han alcanzado incluso el status de trend topic en Twitter, algo sólo al alcance de los fenómenos informativos mundiales.
Helen Pidd
En años recientes, ha acabado siendo tan predecible como el resultado de unas elecciones en Corea del Norte. Cantante que gana el concurso Factor X, cantante cuyo single debut alcanza el número 1. Así que cuando Joe McElderry ganó el concurso televisivo de talentos, nadie dudaba que celebraría las Navidades en lo más alto de las listas.
Por desgracia para el chico de South Shields, una canción casi tan vieja como él le ha negado el acceso a la cumbre tras una exitosa campaña online.
Killing In The Name, el clásico lanzado en 1992 por la banda de rock californiana Rage Against The Machine, ha ganado la batalla por la primera posición en las descargas, vendiendo casi 500.000 copias la pasada semana, sobre 50.000 más que The Climb, la tierna balada de McElderry.
Puedes ver la victoria de los Rage bien como el delicioso desmantelamiento de la maquinaria comercial de Factor X para el número 1 navideño, o como un cínico asalto a las listas festivas. Hay sin embargo algo de indignación dado que ambas grabaciones enlazan con Simon Conwell, el chico malo favorito de la industria del entretenimiento. La pista de Rage fue lanzada por Sony, y la de McElderry por la Syco de Cowell, una subsidiaria de Sony. Así que hay quien sospecha que haya ganado quien haya ganado es el jurado de Factor X el que surge victorioso en la batalla por las listas.
Pero el auténtico ganador es el fan de Essex que comenzó un grupo en Facebook hace un mes con la aparentemente absurda idea de usurpar el número 1 al ganador de Factor X.
Es Jon Morter, de 35 años, DJ a tiempo parcial y experto en logística de la South Woodham Ferrers, cerca de Chelmsford. Decidió que sería divertido iniciar una campaña para animar a la gente a comprar un disco que fuese exactamente lo contrario de la balada ganadora en Factor X. Mientras que McElderry anima a sus escuchas a «mantener la fe» la pista de Rage es famosa por ese famoso refrán que ahora resulta irónico: «Fuck you, I won't do what you tell me!»
Ya intentó algo similar el año pasado. Subir el Never Gonna Give You Up a la cumbre de las listas navideñas. Pero Alexandra Burke, la ganadora del Factor X de 2008, ganó la batalla.
Rage Against the Machine se han comprometido a donar estos inesperados beneficios a la ONG Shelter, y darán una victoriosa gira gratuita en el Reino Unido para agradecer a todos la compra de su single.
Visto en The Guardian. Foto de Chiaki Nozu para FilmMagic.com.