Si realmente les admiras, compra sus CDs
Grant Robertson
El rey del comic rock, Weird Al Yankovic dice que lo digital todavía no es un buen negocio para los artistas como él. Cuando un fan le pregunta si comprándole un CD convencional o un fichero digital vía iTunes, Yankovic gana más o menos dinero, el artista responde esto en su sitio web.
«Te agradezco mucho el apoyo, y realmente no me importa qué formato eliges para obtener mi música siempre que lo hagas legalmente, así que hazlo de la forma que tenga más sentido para ti personalmente. Pero DADO QUE HAS PREGUNTADO... Gano bastante más dinero con las ventas de CD que con las descargas. Es uno de los detalles sobre mi contrato discográfico renegociado que nunca tuvo demasiado sentido para mí. A mi discográfica no le cuesta NADA que alguien se baje mi disco, no hay costes de fabricación, envío, ningún sobrecoste de ningún tipo. Y aún así el artista apenas gana nada con ello. Figúrate.»
A mí también me confunde, Weird Al. Creo que mereces una compensación equivalente por cada descarga vendida a la que conseguirías por la misma pista en un CD.
Como dice Al, «figúrate». Soy un gran fan, y me has dado mucha música divertida durante muchos años. Así que he hecho lo que me has dicho, me he currado los cálculos. Esto es lo que he averiguado.
Según DownhillBattle, Apple reporta a las discográficas 0,65$ —hay quien dice que hasta 0,80$— de los 0,99$ que has pagado por tu canción.
Así que, para un disco con una media de 12 canciones, como tu reciente Poddle Hat que tiene exactamente ese número, Apple ingresa 11,88$, de los cuales envía a la discográfica 7,80$. Eso son 4,08$ para los chicos de Cupertino. Incluso si como parece razonable tú recibieras los 7,80$, Apple se estaría llevando el 35% de tu trabajo en concepto de desarrollar la infraestructura que te permite vender a millones de clientes mientras te echas una siesta, en lugar de vendérselo a cinco despistados en una furgoneta en el parking de Stuckey's. Es lo que llamamos crear valor. Apple hace su trabajo y se le paga por ello. Tú haces también una buena cantidad de trabajo, creando algo que la gente quiere comprar. Apple se lleva un pellizco y tú todo lo demás.
Desgraciadamente no es así como este universo paralelo funciona. Así pues, Apple le envía el cheque a la discográfica.
La discográfica se lleva los 7,80$ y, reconozcámoslo, algo tienen que ver con que hayas grabado un disco. En algunos casos, puedes haber estado forzado por contrato a grabarlo, te guste o no. Así que se podría decir que sin la discográfica de por medio el disco no habría sido creado. Han pagado por la producción, por un poco de marketing, y ahora tienen que recibir algo además del artista. Tú has creado la música, ellos la han grabado, la han empaquetado, la han promicionado y la han distribuido. ¿No?
No exactamente. Primero, muchos artistas graban música fantástica de muy alta calidad en sus estudios domésticos. Así que para muchos artistas ya la discográfica es más una firma de marketing que una pandilla de técnicos —ni siquiera pagan ya por ellos—. Pero si la discográfica hubiera pagado por la grabación, se quedarían con el 100% de la venta hasta que el coste de la misma hubiese sido recuperado. Y también hasta que lo invertido en promoción, empaquetado, diseño, etc. hubiese también sido recuperado.
Si pasas ese límite, debe empezar a entrarte el dinero, ¿no? La etiqueta recupera la inversión —de 7,80$ en 7,80$ que le va dando Apple— así que en ese momento empiezan a mandarte los 7,80$ de cada disco que se va vendiendo.
No tan deprisa. De acuerdo con datos muy difundidos a partir del pleito de The Allman Brothers contra Sony BMG, podrías esperar que 45$ de cada mil canciones vendidas te sean pagados en royalties. Eso es un 4% de lo que le pagan a Apple por tus canciones, y sobre un 5,7% de lo que la discográfica se lleva. Para los Allman, eso son 24.000$ según los datos de Nielsen SoundScan de 538.000 canciones descargadas desde mediados de 2002. No tengo los datos de SoundScan para Weird Al pero él seguro que sí. Así que la discográfica y Apple se llevan el 96% y tú el 4%. Y sin empaquetado, sin distribución y sin almacenamiento, porque se ha vendido por iTunes.
Visité Amazon.com y encontré el disco ahí por 14,98$. Son 3,10$ más que en iTunes, pero tienes un CD de verdad, con su libreto y una funda bastante chula. Y el CD te pertenece. Ahora puedes hacer el macarra y pasar las canciones a tu iTunes, pero eso lo dejamos para otro día. Digamos que 14,98$ es un precio razonable.
Si el trato con tu discográfica se parece al de Allman Brothers, te vas a llevar unos 315$ por esas mismas 1.000 canciones —equivalentes a 83,3 CDs—. Eso son 0,31$ por canción, en lugar de los 0,045$ por descarga.
¡Mierda! Así que si eres lo suficientemente amable con tus fans como para decirles que compren el formato que prefieran, puedes estar perdiendo 0,265$ por canción. Si todos tus fans compran en iTunes en vez de comprar CDs en la tienda de discos, estarás ganando un 85% menos al año.
¡Ochenta y cinco por ciento! Si recortasen el 85% de mi nómina, tendría que empezar a hacerme sopas con zapatos viejos debajo de un puente.
Así que mi consejo es probablemente el que te daría el director de tu sucursal bancaria. Anda y dile a tus fans que compren el CD, o no te alcanzará la pensión cuando te jubiles.
Visto en The Digital Music Weblog.