Behringer amenaza con demandar a una web china que les tildó de plagiadores
Behringer ha amenazado con una demanda penal a una web china por haberles tildado de “imitadores” y “desvergonzados” en diversos artículos publicados desde el año 2017, que hablaban sobre las recientes máquinas de la marca alemana que emulan todo tipo de dispositivos clásicos —como algunas de las presentadas durante la Superbooth, que imitaban productos de Roland o Sequential Circuits, entre otras—. Según la advertencia, las palabras “han causado serios daños” a cuatro miembros del grupo empresarial en cuestión, incluyendo al mismísimo Uli Behringer. Por su parte, Midifan, la web demandada por la compañía, ha decidido cambiar las palabras por otras más neutrales, como “tributo” y “clon”.
La noticia se ha difundido en el blog CDM de Peter Kirn, que pone el dedo en la llaga señalando lo contradictorio del proceder de Behringer. Y es que resulta innegable el parecido de ciertos productos de esta empresa con otros precedentes, y no sólo en el terreno de los sintetizadores. Es algo que ha provocado, de hecho, varias demandas contra Behringer por parte de otras compañías.
En la carta de aviso se dice que Midifan afirma, "sin base fáctica alguna", que Behringer ha plagiado los productos de otras compañías. Pues bien; a la izquierda, el prototipo RD-808 que pudimos fotografiar en la Superbooth; a la derecha, la Roland TR-808 original:
Una imagen vale más que mil palabras, y como todos sabéis, es sólo una entre otras posibles. Con mayor o menor énfasis, los medios especializados hemos hablado de imitaciones, copias o clones, haciendo honor a la verdad. Unos han entrado a juzgar y opinar sobre esta práctica, y otros se han limitado a informar. Entonces, ¿por qué se advierte a esta web en concreto? Peter Kirn especula con una posible reacción ante un artículo publicado en Midifan a finales de 2017, hablando de la huelga de trabajadores en una fábrica china propiedad de Behringer.
Actualizado el 15/06: Midifan ha publicado una nota de disculpa en la que se reconoce el uso de algún otro insulto, como "perros plagiadores". También se disculpan por referirse a sus productos como "plagiados", reconociendo que el uso "políticamente correcto" es "referencia" o "tributo".