Roland VT-4, nuevo transformador de voz
La continuación del anterior 'Voice Transformer' VT-3 de Roland, del que os habíamos ofrecido una demo en su presentación en 2014, llega con el nuevo modelo VT-4.
Como ya sucediera con el VT-3 de la serie Aira, es un equipo que favorece el uso sencillo. Eso se traduce en un equipo sin display y con controles dedicados para la mayor parte de sus funciones aunque sea a costa de no permitir tan profunda edición como otras gamas. Pero es algo que para muchos entornos y en situaciones de directo puede ser una muy acertada orientación. El que se busque un uso sencillo no está reñido con aportar efectos avanzados y combinados de armonización, vocoder, o corrección/cambio de tono, entre otros. Y en el uso combinado con teclado o control vía MIDI se obtiene la total flexibilidad de poder exigir detalladamente qué notas queremos que se interpreten. Cuenta también con otros efectos más clásicos como retardo o reverberación para completar un sonido vocal finalizado, en un formato portable que incluso puede usarse con pilas.
En concreto son 5 las secciones de efecto.
- Robot (normal, -1oct, +1oct, feedback)
- Megáfono (sonido tipo megáfono, radio, chorus 'BBD', y strobo)
- Vocoder (con funciones 'spell toy', 'talk box', y vocoder clásico tipo 'VP' o bien 'advanced')
- Armonizador (con 4 opciones según los intervalos que aportan: +5; +3; +3,-4; +3,+5)
- Reverb (seleccionable entre reverberación, eco, eco múltiple a tempo y 'dub echo')
Hay controles suficientes en el panel para realizar intervenciones según estemos cantando, tanto para alterar el tono como los 'formantes' que dan lugar al cambio del carácter de la voz, ya sea para una mutación entre masculina y femenina o llevándola a extremos exagerados con uso únicamente como efecto llamativo.
El control de corrección automática de tono, llamado aquí 'auto-pitch', cuenta también con un gran control giratorio para poder graduarlo sin complicaciones desde una acción ligera hasta llegar al clásico efecto de corrección estrictísima que desnaturaliza el fraseo (eso que ya damos por llamar todos efecto 'autotune').
Como decíamos, es posible realizar armonizaciones a varias voces tanto automáticas como siguiendo las notas que introduzcamos desde un teclado MIDI. El control MIDI también puede realizarse sobre las funciones de auto-pitch y de vocoder. La armonización automática es de tipo interválico pero corregida a la tonalidad que decidamos.
Cuenta con entrada de micrófono tanto frontal como trasera, algo poco habitual. La entrada trasera está pensada para uso con micrófonos de calidad (clásico conector 'combo' XLR/jack), mientras la frontal está pensada para micros simples de ordenador en el caso de que quiera usarse para actividad de tipo podcasts básicos, juegos por internet, etc.
El control MIDI puede hacerse tanto por USB como por vía de MIDI In en DIN de 5 puntas que permite conectar un teclado y olvidarse totalmente de ordenadores y similares.
El precio queda por debajo de los 250€, y por tanto en el mismo rango que tuvo en el momento de su aparición su antecesor VT-3.
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