Ableton Move, una groovebox portable hermanada con Live
Pros
- Fácil, muy fácil de usar
- Sólido y portable al extremo
- Gestiona muy bien el overdub y la automatización
- Amplio juego de dispositivos por su precio
- Doble uso: groovebox para generar ideas, controlador para Live
- Como controlador Live hace también de interfaz audio
- Licencia Live Intro incluida.
- Seguirá creciendo en posibilidades
Contras
- Sólo 4 pistas/8 clips por pista y ausencia de modo canción
- Como controlador Live, podría incluir alguna función más
- Integración MIDI escasa
- Sensibilidad de los pads no personalizable
Si conoces bien los productos de Ableton, podríamos decir que Push es a Live lo que Move es a Note. Ni Note (una app para iOS) ni Move (que vendría a ser su equivalente hardware en 4 pistas) recrean la experiencia de Live al 100%. Su fuerte es la total agilidad y simplicidad para el uso en portabilidad. Move facilita enormemente la creación de esbozos de temas o pequeñas bases, que más adelante se podrían seguir desarrollando exportándolos hacia Live para gozar de una mayor libertad.
La construcción es tan sólida como la de Push, y también como aquel es un dispositivo 100% autónomo, incluso con altavoz y micrófono incorporados y buena autonomía. Hemos estado más de 4 horas en uso continuado, confirmando así lo que indican las especificaciones.
Ofrece 4 pistas, cada una de ellas con hasta 8 clips, a su vez cada uno de hasta 16 compases. Cada pista puede usar un drum kit de 16 sonidos o bien una instancia de alguno de los instrumentos Drift (sintetizador tipo VA), Wavetable (sintetizador basado en tablas de ondas), o Melodic Sampler (para reproducir una muestra audio a distintas alturas). Para los drum kit usa el 'drum sampler' que ha llegado en la version 12.1 de Live, y que ofrece una versión de consumo de CPU reducido del clásico Simpler de Live, sacrificando algunas características no esenciales y centrándose en un uso orientado a la reproducción de muestras de percusión.
La vocación hacia el momento 'creativo' se aprecia en que no existe nada equiparable a un modo 'canción' que permita encadenar los patrones grabados y dejar preestablecido el desarrollo de un 'tema' que nos pueda acompañar de forma desatendida. Dar paso a unos u otros clips de los grabados en Move será a través de los 32 pads que mostrarán los clips presentes en cada pista, y que pueden ser usados en caliente de forma manual para ir dando entrada y salida a unos y otros.
No busquéis pistas audio, cuya gestión y edición sería difícil en un equipo de este tipo, pero sí encontraréis la posibilidad de grabar con el micro integrado o a través de la entrada audio estéreo (en jack 3,5") para disponer de pequeñas grabaciones audio que integraremos a mod 'one shot' en un DrumKit o bien usaremos a través de Melodic Sampler para poder interpretar desde un teclado con polifonía. Pequeñas o no tanto, dado que el límite de tamaño de cada grabación es extenso: 100MB. Distribuid varias muestras en un drum kit y en el fondo tendréis un buen juego de frases audio con las que completar el proyecto en el que estéis trabajando.
También es posible cargar ficheros desde un ordenador o dispositivo móvil: el propio Move presenta al navegador una 'web' para realizar intercambios de datos (pudiendo usar conexión USB o incluso Wifi). El espacio interno total de memoria en Move (incluyendo los ficheros audio y los propios de los sonidos, clips, y 'sets') es de 64 GB que parece suficientemente amplio para estos objetivos. Contando con las funciones de Ableton Cloud, se pueden también intercambiar/guardar datos y proyectos vía nube.
La interpretación es a través de la matriz de 32 pads (4x8), con velocidad y aftertouch polifónico (pero no con las funciones MPE que sí aporta Push 3). Puede usarse en disposición 4x4 para los drum kit, acompañada de una bien interesante posibilidad: usar los otros 16 pads para disparar diferentes 'afinaciones' del sonido de batería que tengamos elegido en cada momento. Y también esos mismos pads pueden usarse para tocar sonidos de sintetizador mostrando un 'teclado', que puede ser cromático o si lo preferimos ajustado a alguna escala y tonalidad adecuadas al tema para evitar la introducción de notas 'ajenas' en cualquier improvisación.
Para mayor comodidad al interpretar/grabar notas por parte de quienes sean teclistas, se puede conectar directamente un teclado o controlador externo. Igualmente podría conectarse un sintetizador externo y lanzar una pista hacia él, aunque claramente no es la idea principal la de controlar instrumentos externos, sino más bien esa 'contención' de acomodar desde el propio Note todo el desarrollo de las ideas. Así, no hay, al menos de momento, una integración profunda MIDI (no hay sincronización MIDI clock/SPP, y hay que elegir si la conexión USB MIDI actuará en 'In' o en 'Out' y siempre hacia una sola pista), pero no faltan la función 'Link' que asegura la sincronización con Live y otros equipos que soportan este protocolo de Ableton.
La grabación puede realizarse con la práctica función 'capture' conocida en Live que permite que tras una improvisación cualquiera fuera del modo de grabación, convirtamos lo que acabamos de tocar en un clip. Es también posible una grabación más tradicional vía botón 'rec', existiendo la posibilidad de grabar en tiempo real, hacer 'overdub' para añadir más notas, o también la posibilidad de grabar por pasos gracias a la hilera inferior de 16 botones, que pueden ir mostrando según necesitemos los distintos compases o fragmentos de los clips de mayor extensión. Por supuesto no faltan funciones de tipo ajuste de la duración del clip, cuantización, duplicado de clips, ajustes de groove, 'note repeat' en los pads para disparar baterías en ráfaga, y otras. Os remito al vídeo o al manual para entrar en mayor detalle.
Hay desde luego efectos. Dos por cada una de las cuatro pistas y dos más globales. A elegir entre varios bien conocidos de Live. Se dispone de EQ, dinámica (compresión), eco, reverberación, chorus/ensemble, flanger/phaser, saturación (para distorsión 'analógica') y un 'redux' para degradación digital.
Tanto los efectos como los sonidos (con numerosos presets listos tanto de batería/percusión como de sonidos instrumentales organizados en familias) son editables, gracias a 8 encoders sensibles al tacto. Los parámetros que se afectan con ellos son específicos de cada sonido/efecto. Esas modificaciones pueden grabarse de nuevo en tiempo real o bien paso a paso, para contar con la ya imprescindible.
Junto con Move se entrega licencia de Live Intro, una versión que, aunque recortada respecto a otras, es más amplia en dispositivos y características que Move, y puede perfectamente construir así un entorno completo, añadiendo más pistas y grabando audio en Live Intro para completar lo iniciado en Move. Si bien, en este escenario, cabe recordar que el sintetizador 'wavetable' no forma parte de Intro, y por tanto puede ser más que conveniente acudir a una 'Standard' o 'Suite'. Cualquiera de ellas deberá ser 12.1 o superior para poder usar Move. Por las diferencias entre lo que ofrece Move y lo que ofrece Live, aunque es posible el traspaso de una sesión creada en Note para abrirla en Live y tener ya la estructura de dispositivos y clips, no hay previsión de un camino a la inversa que pueda llevar una sesión Live hacia Move. Para eso, hay que acudir a Push Standalone. Por cierto, quien quiera integrar lo realizado en Move en otros entornos DAW encontrará especialmente útil la posibilidad de salvar un set como audio (wav) pero nonhaybuna exportación MIDI ni posibilidad de usar Move como un módulo MIDI (más allá de controlar la pista activa desde un teclado externo).
Eso sí, hemos podido probar alguna función que está actualmente en 'beta'. Y en concreto, mostramos en el vídeo que el amplio juego de sonidos de fábrica se podrá extender al gusto del usuario creando en Live los sonidos, sus efectos y la selección de parámetros que queremos controlables y exportándolos para traspasarlos a un banco 'User' en Move. Desde luego usando aquellas capacidades que sí existen en Move en cuanto a dispositivos. Es algo que nos parece imprescindible, puesto que para muchos usuarios nunca hay presets suficientes y es deseable poder personalizar los sonidos. Por el avanzado estado en que hemos encontrado esa función, no creemos que tarde en hacerse oficial. Por ahora la hemos visto aplicable para creación de drum kits y de sonidos basados en Drift, con lo que en breve será factible crear tanto baterías como sonidos 100% propios.
En cuanto al funcionamiento como controlador de Live, al activar ese modo se abandona cualquier funcionalidad 'standalone' y pasa a ser una mera superficie de control de lo que suceda en Live. El control es amplio, semejante en cuanto a su alcance a lo que el propio Move permite en su funcionamiento autónomo: lanzamiento de escenas y de clips, volúmenes y mutes de pistas, grabación, recorrer los dispositivos que forman parte de cada pista y editar sus 8 parámetros visibles sobre los encoders... Con todo, hay alguna cuestión que se hecha de menos y que posiblemente Ableton puede implementar sin dificultad, en relación al control de la parte de mezclador (ajustar panorámicas y envíos). En todo caso, y dado que muchos de los potenciales usuarios lo serán también de Live, muy bienvenida esa capacidad de ser usado en movilidad para generar ideas, y más adelante como controlador de una sesión más completa en Live. Por cierto, en ese uso es factible que Move sea usado también como dispositivo audio de entrada y de salida en Live, haciendo innecesario trasladar al escenario un interfaz audio.
Precio y disponibilidad
El precio es de 449 €.
Más información | ableton.com