Sintetizadores

Review de Polyend Seq, un titán entre los secuenciadores por pasos

10/07/2019 por Pablo Fernández-Cid
6
Veredicto
¿Pocos extras en este Polyend Seq? Quizá. ¿Importantes? Sin duda. ¿Reemplazables vía software? Claro, pero muchos queremos hardware amigable, veloz, atractivo de aspecto y divertido en uso y por algo será. Su precio puede ser un freno para comprarlo, pero no para apreciarlo.

Pros

  • Interfaz con botones dedicados para un buen número de funciones hacen cómodo su uso
  • Las funciones de cambio de escala y 'root note', o las de rotación de patrones, ofrecen ideas nuevas sobre lo ya grabado
  • Facilidades para crear y probar poliritmias
  • El acabado es llamativo

Contras

  • El desembolso es alto para un secuenciador, solo justificado si encaja muy bien con tus necesidades
  • Muy focalizado en las notas, poco interesado por el control (CCs, etc.)
  • Hay varias mejoras evidentes de su comportamiento, para evitar 'sorpresas' desagradables en un vivo, aunque puedan ser útiles durante la composición y búsqueda de ideas
  • Podrá evolucionar a mejor con facilidad, si hay voluntad por el fabricante

El tamaño, el acabado en madera y metal, el alto número de pistas simultáneas (ocho) y también ciertamente el precio, hablan de un secuenciador a lo grande. Probamos Polyend Seq con ocasión de la actualización 2.1, fácilmente instalable por el usuario final con apoyo de un ordenador, y que corrige una ausencia de cualquier forma de 'backup' que parecía inconcebible en esta gama. Con ese tan bienvenido añadido, os mostramos a fondo las habilidades de Seq para crear y transformar patrones.

Resumen

[Índice]

En la competencia entre los secuenciadores por patrones hard y soft, como en tantas otras cosas, el software puede vencer en complejidad y abanico de funciones, pero el hardware defiende su presencia a través de las formas de interacción. Y en esa búsqueda del balance entre complejidad y usabilidad es donde Seq se sitúa y debe valorarse. Una valoración imprescindible, porque a un precio de casi 1000€ no se trata de una compra impulsiva.

Otros controladores basados en una gran matriz pueden llevarnos a pensar erróneamente en cosas que Seq no hace. Y no actúa por ejemplo como dispositivo MPE pensado para reemplazar a un teclado, ni tampoco como controlador colorista para interactuar con los clips de Ableton. Lo que Seq es lo dice su nombre: un secuenciador. Ni más ni menos. Pero de nuevo hay que acotar dónde encaja dentro del mundo de los secuenciadores por pasos.

Seq no es un secuenciador plagado de funciones esotéricas, por ejemplo no aparecen sesudas funciones propias de un secuenciador generativo. Pero pese a ello consigue apoyar muy bien la creación de ideas y patrones. A pesar de que registre junto a las notas información de un MIDI CC por pista, tampoco es un secuenciador intensivamente orientado hacia el control. Se sitúa en la estela del concepto más tradicional y fácilmente asimilable de los secuenciadores de patrones clásicos, que es también el más demandado. Ese mundo más interesado por la música y sus notas que por un puro abstracto de sonido y timbres.

Pero es una vuelta a la esencia resuelta con elegancia, con las dosis justas de modernidad (como disparo múltiple por paso, poliritmia, acordes por paso,…), y con elementos útiles para poder ayudar en varias maneras a generar ideas: destacaría rotación de patrones (voluntaria y otras veces resultado sorpresivo de la interacción), el hecho de que ocho pistas ofrecen completar patrones muy bien armados con un arreglo extenso, o el ajuste de las notas a escala no sólo durante la grabación sino también a posteriori permitiendo transformar sobre la marcha lo ya grabado para buscar nuevas posibilidades y variaciones.

Y redondeando eso, sobre todo, ofrece una forma de uso bien amigable, posible gracias a sus generosas dimensiones y lo concentrado, casi minimalista, de su interfaz. Un interfaz que desde luego hipnotiza con su sobrio juego de luces blancas en movimiento.

En su precio hay variada oferta de controladores, secuenciadores, e incluso ‘grooveboxes’ bien potentes. Así que hay que conocer bien qué es lo que hace posible y si eso encaja con la forma de trabajo y objetivos de cada cual. Os cuento en detalle.

256 patrones, 8 pistas, 32 pasos

[Índice]

Ser grande no, lo siguiente, es aquí una obligación. En vertical parecería un rascacielos con sus ventanitas y en horizontal nos recuerda a un trasatlántico, pero su matriz de 256 pulsadores en 8 filas de 32 e iluminados en blanco (nada de colores RGB) es la forma de dar acceso inmediato a los 32 pasos en cada una de las 8 pistas con las que se define un patrón. Es también la manera de reclamar sin menús ni dobles pulsaciones los 256 patrones que almacena internamente, de hecho los patrones no tienen nombre y se identifican siempre por su combinación de fila y columna. Desde hace poco (firmware 2.1) es posible salvar el contenido de Seq para hacer copias de seguridad (backup/restore) no con memorias USB para las que no hay conexión ni tampoco con volcados sysex MIDI. Se trata de una aplicación escrita en Java que funciona por tanto en múltiples sistemas operativos y que envía y recibe los datos de Seq por su conexión USB. Es muy sencilla de usar aunque para exige contar con el JDK de Java, gratuito y fácil de descargar e instalar.

Para un secuenciador de estas características, los 32 pasos se me hacían un límite un tanto corto, acostumbrado ya a una amplia oferta en sistemas con 64 pasos como el merecidamente popular Arturia Beat Step Pro. Pero como cabía esperar se puede ir más allá. Existe encadenamiento de patrones que permite crear incluso secuencias por encima de esa nueva cifra mágica de los 64 pasos, llegando incluso al extremo si queremos de encadenar entre sí los 256 patrones. El encadenamiento puede ser tanto al 'siguiente' como a cualquier número de patrón deseado, no necesariamente en su orden natural.

Más allá del encadenamiento no hay nada que recuerde a un modo 'song', ni tampoco formas de pasar de un patrón a otro bajo control MIDI. Pero esos usos de tipo 'canción' corresponden a una mentalidad de llevar estructuras predefinidas, y para llevar largas secuencias pregrabadas ya están los DAW y los secuenciadores lineales o los MIDI files, en los que podríamos grabar cualquier 'sesión' que realicemos sobre Seq. En realidad los secuenciadores de patrones, más que por esa vocación canción/lineal se definen por sus habilidades para crear y combinar/transformar sus patrones. Deben ser herramientas para la generación de ideas, no para su simple registro/reproducción.

Grabación en tiempo real y el uso como 'looper' MIDI

[Índice]

La grabación puede hacerse en tiempo real vía MIDI, o bien editando por pasos. La grabación vía MIDI In (ya sea por DIN o por USB) se activa seleccionando una (o varias) pistas y Stop+Play (que accionadas a la vez actúan como Rec). No hay claqueta/metrónomo, así que hay que para no ir a ciegas es útil preparar primero una pista guía marcando los tiempos. El resultado puede ser cuantizado en tiempo si lo deseamos aunque por defecto graba tal como se ha interpretado registrando el desplazamiento respecto a la rejilla de tiempo en un parámetro 'nudge' de cada paso, que puede editarse tanto a mano como con la cuantización que lo anula.

Buscando quizá una sencillez extrema, no hay un botón para indicar qué pista/s se usarán para grabar. Al activar la grabación en tiempo real siempre es la pista 'superior' entre las activas la que primero registra las notas que lleguen. No es lo más intuitivo y cómodo, pero es fácil acostumbrarse. Por ejemplo cambiar la tendencia natural de grabar primero la pista 1 (superior) por la contraria, grabar primero la pista 8 y proceder 'hacia arriba'. Es sólo cuestión de establecer alguna planificación o rutina a la hora de usarlo. Muchos intentos iniciales de grabar en tiempo real me dejaban desconcertado por esta forma de trabajo de Seq, porque a veces al interpretar desde un teclado acaba dejando presencia de notas en pistas donde no las deseábamos. Mi consejo: hay que aprovechar que las pistas pueden recibir MIDI en modo 'omni' (de cualquier canal) o dejarse dispuestas para escuchar sólo un canal. Esa escucha selectiva será la que nos permita dirigir las notas entrantes a una pista concreta sin necesidad de desactivar (dejando por tanto de oírlas) las superiores a ella.

Es bien interesante el que se permite una cierta forma de grabación polifónica: las notas que lleguen van ocupando primero las pistas más altas entre las activas, y en caso de interpretar intervalos y acordes las segundas, terceras, etc. notas irán a las siguientes pistas activas y que estén atentas a ese canal o en modo omni. En definitiva: separa automáticamente la interpretación polifónica en pistas individuales. Es una excelente opción esta de poder registrar polifonía en un secuenciador por pasos, la verdad. Se puede pensar por ejemplo en usar 3 o 4 pistas para dibujar una sección armónica para el patrón, que convendría grabar en primer lugar para luego ir pudiendo registrar hacia otras pistas el resto de líneas / instrumentos.

En todo caso, siento a Seq más como apoyo para la fase de 'composición' y creación de patrones fuera del escenario que para la interacción intensiva en vivo. Pero he encontrado una herramienta divertida y con la que generar variaciones de patrones con facilidad, y eso es muy agradecido, la verdad. Para modificar las notas grabadas, para la edición, se debe seleccionar un paso de una pista en la matriz y manteniéndolo pulsado editar con los seis encoders, algo que es correcto para corregir una nota discordante pero que no facilita una edición en vivo más intensa. No es tan ágil como tener una hilera de potenciómetros. Pero realmente esa edición intensa no es algo que se haga tan frecuentemente y en todo caso suele conducir a resultados un tanto 'random', algo que aquí se logra mejor por vía de la aleatorización total de cada pista en una operación bien fácil y rápida con un botón dedicado.

Siguiendo con el uso 'en vivo' sí lo veo acertado como una especie de 'looper MIDI', que personalmente encuentro más interesante que la edición 'a lo loco'. Las operaciones esenciales de cada pista (borrar, silenciar, longitud...) cuentan con botones dedicados, y a la hora de grabar, respetando la prevención comentada sobre canales MIDI y pistas activas, es factible ir grabando 'por pistas' y crear patrones sobre la marcha, no sólo tirando de patrones preparados con anterioridad. Cosas que hubieran sido más cómodas con un botón o función para activar/desactivar la grabación en cada pista, pero que se solventan con esa planificación.

El posible uso como un híbrido entre arpegiador y secuenciador resultó menos prometedor en su estado actual que lo que creí entender en una primera lectura del manual (texto muy breve y directo por cierto). Ojalá un futuro firmware pueda avanzar más en ese terreno, con lo que Seq ganaría una funcionalidad mucho mayor. Es cierto que podemos intervenir desde un teclado externo para transponer las pistas. Y es cierto que cada pista puede transponerse una cantidad diferente. Así pues, las notas que sonarán dependerán de lo ejecutado en el teclado y los momentos en que sonarán de lo definido en el patrón. Una especie de creación de patrones de ritmo e intervalos para notas que en el fondo habla de arpegiado. Pero esa transposición en Seq exige actualmente pulsar el botón de la/s pista/s que deseamos transponer mientras hacemos llegar la nueva nota 'raíz'. Además para transponer cada pista a una nota diferente tendríamos que repetir esa acción en cada pista. Lejos por tanto de poder sencillamente tocar un acorde y que automáticamente cada nota controle la transposición de una pista diferente. Así que queda como una opción útil a la hora de preparar variaciones de los patrones permitiendo guardarlos ya listos con diferentes correspondencias de notas, pero no tanto para tocar sobre la marcha, que es lo que más distingue a un arpegiador. Pediría a Polyend que busque la forma implementar algo de este tipo. Está tan cerca de lograrse (ya tienen implementada la separación hacia pistas de acordes recibidos en tiempo real vía MIDI) y daría tanta versatilidad que el esfuerzo bien valdría la pena.

Grabación y edición paso a paso: ¿undo?, no gracias

[Índice]

La edición paso a paso es sencilla. Una pulsación corta activa/desactiva el paso, que por defecto recibe los valores de nota establecidos como referencia en la pista. Manteniendo pulsando cualquiera de esos pulsadores y usando los encoders podemos ver y alterar, incluso durante la reproducción, los parámetros del paso (detallados más adelante) entre los que no faltan nota, velocidad, desplazamiento (anticipación o retraso) del paso respecto a su posición nominal (‘nudge’), y el popular disparo múltiple que permitirá el lanzamiento repetido de un paso durante su duración con diferentes perfiles de evolución del nivel y con número de divisiones ajustable, entre otros detalles ajustables que veréis más adelante en un cuadro que he preparado. También es posible y muy útil pulsar un paso y tocar una nota MIDI en un teclado externo para que esa nota, con su velocidad correspondiente, quede registrada.

Eso sí, con cualquier edición hay que andarse con cierto cuidado: pese a ser un secuenciador digital no hay ‘undo’, así que estamos en una situación parecida a la de los sistemas analógicos: lo que se cambia queda alterado. A cambio tampoco es necesario ‘salvar’ cambios en los patrones, todo se conserva automáticamente. Un alivio para los que en el fragor de la edición cambian a otro patrón sin recordar guardar previamente los cambios. Al no haber ‘undo’ recomendaría usar con frecuencia la función ‘duplicate’ para por ejemplo en el último patrón (8-32) tener nuestra copia de recuperación ante algún desaguisado. En definitiva, nada grave pero sí algo algo a tener en cuenta para definir nuestra forma de trabajo y dar entrada en ella a 'duplicate'. No pocas veces nos dejaremos llevar por la pasión y alteraremos patrones de tantas formas que será inabordable recuperar su estado anterior. Mejor por tanto acostumbrarse a generar copias cuando tengamos algo ya interesante antes de modificarlo mucho más. No es descabellado reservar la hilera de los patrones 8-1 a 8-32 para guardar varias 'fotografías' de un patrón según lo estamos editando y transformando.

Otra opción sería, si nos gusta realizar sesiones largar jugando con Seq, ir registrando en una pista MIDI de un DAW lo que producimos para poder recuperar los mejores fragmentos.

Secuenciamiento de controladores (CCs)

[Índice]

Podemos alterar en cada paso el valor de un único número de controlador (MIDI CC) por pista con el que poder generar una secuencia de control junto al propio registro de notas. Cada pista puede usar un número de controlador diferente y que sea el más apropiado para el sintetizador o sonido que usemos (p.ej. rueda de modulación -CC1-, filtro -típicamente CC74-, volumen -CC7-, panorámica -CC10-, o el que resulte más interesante en cada momento y con cada sinte). No hay en los pasos un parámetro ‘slide’ como tal, así que se dependería de la programación del sinte y el posible uso de un mensaje de control ‘portamento on/off’ u otras alternativas parecidas.

Hablando de este precio, hubiera deseado alguna opción más generosa en cuanto a la captura de mensajes de control, con varios en cada paso, y es algo que deberán tener en cuenta los interesados en Seq. No hay aquí la abundancia de 'parameter locks' de Elektron sino algo más estándar y también más sencillo de gestionar. Pensando en ampliar ese apartado una opción es aprovechar otras pistas para registrar datos de control, sin guardar notas. Con 8 pistas y la posibilidad de que en ellas haya acordes (aunque de una forma peculiar) no es descabellado.

Pistas monofónicas pero ¿con acordes?

[Índice]

¿He dicho acordes? Sí, pero no porque sea un secuenciador de pistas polifónicas ‘libres’. Se trata de que, además de lo ya mencionado de grabar un acorde distribuyendo (incluso automáticamente) una nota en cada pista, existe también la opción de en cada paso registrar una única nota y pedir a Seq que la reemplace con alguno de entre 29 tipos de acorde predefinidos, no un acorde especificado nota a nota por nosotros. Algo que podrá irritar en parte a quienes tengan mayores conocimientos de teoría musical, pero que a la inversa supone un excelente apoyo para quienes no los tengan y que también puede aportar una forma de salirse de nuestras propias costumbres, aunque sea a costa de adoptar las que Polyend expresa en esa colección de acordes.

En la práctica, se ofrece un abanico amplio, aunque son siempre versiones no invertidas y cerradas. No faltan varios mayores, menores, disminuidos, aumentados, sus2, sus4, acordes con sexta añadida, y acordes con séptima tanto Maj7 como dominantes o semidisminuidos y otros esquemas, con lo que no suele dejarnos sin poder expresar la idea que deseemos. Para inversiones y disposiciones más abiertas tendremos que usar varias pistas, añadiendo a mano las notas para la voz bajo por ejemplo, incorporando tensiones superiores en pistas complementarias, o incluso combinando dos acordes que se complementen para formar alguno extendido.

En todo caso es un sistema que hace muy fácil generar y editar/alterar contenido polifónico desde las pistas sin necesidad de tener un teclado a mano ni de programar nota a nota la estructura de los acordes. Incluso sin conocer dicha estructura, guiándonos sólo por el oído y usando los acordes como un efecto/adorno.

Nada impide usar estos acordes para crear una pista de armonía con una progresión registrada en los sucesivos pasos, que reproducida a una velocidad muy lenta generaría un fondo armónico de largo recorrido que nos aleje del carácter tan estático armónicamente al que llevan otros secuenciadores por pasos. No siempre ‘patrones’ tiene que significar nueve minutos sin salir de Bb7sus4, al menos no con Seq.

Pero aún mucho más interesante estos acordes son una alternativa fácil para salpimentar una secuencia monofónica en algunos de sus pasos. Como forma de añadir algo de polifonía 'casual' en temas muy bailables sin más que ir guiados por el oído es muy eficaz. Algo que resulta inmediato con este tipo de solución y que puede enseguida animar nuestra creatividad, las sensaciones sincopadas si las queremos, y otros usos. En el fondo esa agradable combinación entre lo pretendido y lo simplemente encontrado al jugar con un instrumento (qué lástima que nosotros digamos ‘tocar’ y no ‘jugar’ al hablar de interpretar un instrumento). Y es que tan enemigo soy de depender de las máquinas para que suplan nuestra propia imaginación y conocimiento, como de renegar de usar las máquinas para excitar nuestra propia creatividad. Desde luego se encuentran momentos felices en el juego con Seq y su peculiar orientación a la polifonía. Para quien crea música desde la soledad de su propio estudio, estas ‘personalidades’ innatas en algunas máquinas suponen siempre una posibilidad de abrir un diálogo con alguien (en este caso algo) que no seamos nosotros mismos. Y como el diálogo que aparece en cualquier banda, ocasionalmente es refrescante.

Más funciones

[Índice]

Sigamos describiendo funciones. En el extremo izquierdo de Seq, hay 8 botones para funciones generales:

  • Pattern para pasar al uso de la matriz de 8x32 como selector de patrones.
  • Duplicate permite copiar un patrón, quizá como primer paso para generar una variación del mismo. También se usa para dentro de un patrón duplicar una pista o para replicar un determinado paso hacia otro/s.
  • Quantize corrige a rejilla la pista elegida, por ejemplo grabada en tiempo real.
  • Random aleatoriza el contenido de una pista pero manteniéndola siempre en el contexto de la escala y nota raíz elegidas para esa pista y dando lugar a que se cambien tanto las notas como sus velocidades/modulación/desplazamiento/disparo múltiple.
  • On/Off actúa a modo de ‘mute’ para activar y desactivar la reproducción de pistas.
  • Clear para borrar patrones enteros o pistas concretas.
  • Stop y Play, que pulsados a la vez permiten activar el modo ‘Rec’ para grabación.

Parámetros en pistas y pasos

[Índice]

Junto a los 256 botones de pasos / patrones mencionados, una primera columna ofrece 8 botones numerados 1-8 como selectores de pista. Otro elemento del interfaz son seis ‘encoders’ giratorios y que permiten pulsación además de giro. Cada uno de ellos desempeña diferente función según se usen por sí mismos (tienen entonces alguna función global o relativa al patrón) o al pulsar uno o más botones de pista 1-8 (permiten entoces ajustes comunes a la pista/s elegidas) o bien uno o más de los 8x32 pasos (actuarán sobre el/los pasos elegidos).

En cada tipo de uso (patrón, pista, paso) cada uno de los encoders puede llegar a ajustar hasta 4 parámetros que se muestran con 4 líneas en la pantalla y por los que nos movemos pulsando repetidamente el encoder al no existir botones dedicados para elegir cada uno de los 4 parámetros/líneas mostrados.

Parámetros editables en Polyend Seq
Tabla realizada por hispasonic

Muchos de esos parámetros hablan por sí mismos. Aclaro alguno de ellos menos evidente.

‘Transpose’ en cada paso puede parecer absurdo sabiendo que ya hay ajuste ‘note’, pero es una forma alternativa de poder editar: podemos elegir la nota deseada ya sea por su nombre o por 'desplazamiento' respecto a la registrada. El resultado final en todo caso es que la nota presente en el paso se altera, pero la especificamos de forma absoluta o relativa respecto a la que ya estuviera registrada.

‘Link to’ es la forma de encadenar patrones. La presencia de un paso con ‘link to’ en un patrón hará que saltemos a cualquier otro patrón deseado. Pero si la pista está silenciada no se saltará, así que tiene más enjundia de la que parece: puede ser útil por ejemplo para en una pista normalmente silenciada tener colocado un 'link' que vuelva al inicio del propio patrón y haga así la típica repetición obstinada de los muy primeros pasos generando una sensación de break/fill sólo cuando activemos esa pista.

Los cambios de ‘root note’ y ‘scale’ afectan a lo ya grabado, incluso en tiempo real a lo que ya está sonando. Posibilidades que suman interés sin duda. Gracias a eso los patrones inicialmente concebidos y grabados en una tonalidad y modo concretos pueden no sólo transponerse, sino transfigurarse sobre otras escalas y modos adquiriendo una espresión totalmente diferente. O un patrón grabado pensando en el acorde de tónica será corregido sin abandonar la escala cuando exijamos su transposición desde un teclado externo. Podéis ver en acción este tipo de cambios en este videotutorial sobre modos, realizado con Novation Circuit, y veréis que es un recurso que ofrece un terreno muy interesante para generar secciones y sensaciones diferentes y contrastantes en un tema. Porque hacer un patrón es fácil, lo complicado es hacer varios coherentes pero variados. Y estas funciones son muy útiles a ese respecto.

La velocidad y el parámetro de control ‘CC’ son valores editables paso a paso, cuentan además con la posibilidad de que al usar la función 'random' sobre una pista decidamos si queremos que se afecte a ellos o no.

‘Move’ es uno de mis recursos preferidos y algo que hecho en falta en otros secuenciadores. Permite rotar circularmente los pasos de un patrón. Eso introduce un desplazamiento de una de las pistas respecto a las demás que no pocas veces multiplica el aire sincopado dando nuevas alas al patrón inicial, a veces de forma muy eficaz y renovadora. Hubiera preferido que la posición original no se perdiera y sencillamente 'move' fuera un valor con el que poder alterarla y recuperarla cuando desearamos volviéndolo a cero. Pero 'Move' actúa literamente rotando el patrón. Lo modifica de inmediato. Ojo por tanto y llevad la cuenta para dar marcha atrás si lo necesitáis (o salvad de vez en cuando, como ya os he recomendado).

‘Nudge’ es como aquí se llama a la posibilidad de realizar deslizamientos de alguno de los pasos o de la pista entera en fracciones de la duración de un paso y es como se pueden quedar registrados los detalles de ‘groove’ en una interpretación real, o como se pueden añadir a una interpretación programada paso a paso. Y de nuevo hay un elemento de aleatorización ('humanize') que establecerá si al crear patrones aleatorios queremos que estén 'a rejilla' o que tengan pequeños desplazamientos respecto a ella.

‘Length’ para las pistas permite definir el número de pasos y abre la vía a la poliritmia, porque cada pista admite su propio valor. En la edición de pasos ‘Length’ actúa para crear notas de varios pasos de duración, extendiéndolas. Es posible con ‘gate mode’ acortar en bloque todos los pasos de una pista para que en lugar de llenarlos al 100% sólo estén activos el 50%, 25% o 5%, (preferiríamos un recorrido más fino para un próximo firmware porque es un parámetro muy expresivo y muy vinculado a cómo sean las propias envolventes en el sonido sintetizado). LLama la atención el que no está previsto el ajuste de 'gate length' de forma individual en cada paso que también sería interesante.

'Play mode' es el clásico ajuste del modo de reproducción adelante/atras/zigzag/aleatorio, pero que al ser individualmente ajustable por pista abre la vía a interesantes variaciones sobre los patrones y también a la posibilidad de aleatorizar sólo alguna línea del patron de forma que sus pasos se reinterpreten en un orden cambiante. Algo que es útil para crear patrones que resulten menos repetitivos. Por ejemplo en una pista dedicada a un sonido de caja, generará la sensación de tener una intervención animada e improvisada.

‘Roll’ tiene efecto emparentado pero diferente según se aplique en pista o en paso. Sobre una pista lo que permite es introducir rápidamente un patrón de activaciones de pasos a intervalos regulares: todos los pasos, uno de cada dos, uno de cada tres, etc. Una forma de rellenar rápidamente un pista con esa regularidad. Sin embargo ‘Roll’ en un paso se refiere al efecto de disparo múltiple por el que en la duración de un paso se oirá varias veces su nota, pudiendo elegir un contorno de velocidad e incluso un recorrido de notas entre varias opciones (creciente, decreciente, arriba-abajo, abajo-arriba, y random).

Algunas cosas que no están… o sí

[Índice]

Los amigos de los sistemas analógicos y modulares podrán extrañarse por la ausencia de salidas CV. Han quedado fuera de Seq en forma de otro producto. El interfaz MIDI-CV polifónico de 8 voces Polyend Poly es el que enlazaría de forma cómoda con sistemas analógicos y modulares.

Pese a que el manual habla de que no hay MIDI Dump y por tanto parecería que no hay posibilidad de conservar un ‘backup’, ya hemos mencionado que el reciente instalador del firmware 2.1 (de diciembre de 2018) incluye funciones de backup/restore. No es un MIDI Dump y no podrá por tanto registrarse en un DAW o un gestor de SysEx. Es una utilidad que conecta vía USB directamente con Seq y guarda en ficheros propios la información, pero es una gran tranquilidad frente a la situación anterior a esta versión. La aplicación está realizada en Java y por tanto puede ejecutarse en variedad de sistemas operativos con el único requisito de instalar el JRE (Java Runtime Environment) que es gratuito.

Atención con el hecho de que los patrones entran a botepronto tan pronto se pulsa su botón, sin esperar a final de patrón que está sonando o a final de tiempo o ninguna otra frontera. La alternativa para unos cambios más controlados pasa por el uso de ‘link’ o bien por la posibilidad de restablecer al primer paso la reproducción con el botón play, incluso cuando está sonando un patrón. Pero parece algo candidato a incorporarse como opción en algún firmware futuro, como ya anticipa el propio manual de Seq, porque es complicado hacerlo con precisión suficiente de forma manual.

En el caso de usar poliritmias en un patrón, cada pista tiene su 'puntero' en un lugar diferente. Cuando a continuación damos paso a otro patrón más convencional, este último suena dislocado porque los punteros de las pistas no están alineados. No pocas veces resultado de ese encuentro fortuito surge un reto musicalmente atractivo, pero si no nos convence es otra ocasión más para recurrir al botón 'play' y forzar la vuelta a casa (al primer paso) de todas las pistas.

Conclusiones

[Índice]

Cuando uno ve desde fuera un transatlántico de lujo la imaginación se le dispara y ya se imagina que en su interior no falta de nada. Sin embargo Seq tiene sus propias fronteras, su terreno acotado. No es corto ni malo, pero sí ofrece algunas sorpresas a ambos lados de la balanza. Hay cosas bien útiles que no esperaríamos encontrar por inusuales y otras que quizá alegremente daríamos por seguras y no forman parte de sus atributos. Pero eso habla de un secuenciador que tiene una personalidad definida. Y en estas gamas de precio ya algo elevadas, eso es lo que suele buscarse. Una personalidad con la que uno se identifique. Lo que hace queda claro en sus botones y en su manual, no hay opciones escondidas ni enrevesadas. Ese es su pro y ese puede ser para otros su contra: la premisa de tener un interfaz simple, sin navegación ni opciones ocultas, conlleva que hace las cosas a su modo, al modo que tiene predefinido y que os hemos detallado, mientras otros secuenciadores ofrecen infinidad de opciones configurables pero alargan la curva de aprendizaje y complican el uso. Así que conviene estudiar bien lo que ofrece, algo que parece consustancial a una compra que ya se acerca a los 1000€. Si quedan dudas y las planteáis en los comentarios intentaré aclararlas en la medida que pueda.

Personalmente, además de la usabilidad, destacaría que siempre he tenido un cariño grande por los sistemas que son capaces simplificar no sólo la creación de patrones sino sobre todo de de hacer amigable la creación de variaciones a partir de un patrón, tarea siempre mucho más difícil. Y con Seq hay mucho de eso, comodidad para realizar variaciones (eso sí, tras haber aprendido a salvar de cuando en cuando...). Porque para patrones fijos ya hay otras muchas herramientas, y el plus de precio tiene su contrapartida en estos extras.

¿Pocos extras? Quizá. ¿Importantes? Sin duda. ¿Reemplazables vía software? Claro, pero muchos queremos hardware amigable, veloz, atractivo de aspecto y divertido en uso y por algo será. Su precio puede ser un freno para comprarlo, pero no para apreciarlo, y si miramos la competencia dentro de este tipo de producto tan especializado (sin ampliarla hacia otras gamas como grooveboxes y semejantes que hacen cosas parecidas pero no son lo mismo), no es descabellado para todo un 8 pistas.

Más información | polyend.com

Te puede interesar