ALTANERA
indefensos nuestros cuerpos frente a tí
altanera de actitud que no se acobarda
frente a las mareas que a débiles nos azotan,
y que crujiendo nuestros huesos pedimos clemencia.
te muestras como eres,
sorda al susurro tedioso de un sinfín de misterios
ausente en tu mente se encuentra la extrañeza
de los días que te pasan.
las cabezas de los prudentes
sosteniéndose sobre tus hombros
agobiados de pensamientos
y tú, que respondes aventurándote a cada momento.
las bocas de mil hombres desconcertados
porque no encuentran respuestas
son llenadas con palabras que expresan
la sorpresa por tu magnificencia.
cómo comprenderán aquellos que ocupan su tiempo
empleando fórmulas para llegar a la respuesta
cuidando cada palabra
como si fuera cuestión de vida o muerte.
cómo explicarle a la masa de gente
que no hay nada de malo en no ser prudente
que la vida se muestra más al disfrute
cuando se la toma en las manos y se juega
con ella a la rayuela.