Quise decirte (diario poético 3)
Quise decirte
preguntarte
por qué tu armadura
brillaba tanto.
Erguida estatua
de marfil cálido.
Se-
paradas nuestras
manos:
NUNCA VOLVERÍAN A JUNTARSE
Detrás de ti, un rótulo:
"JE T' AIME"
Patético apuntador
para el chico que hablaba poco.
Quise decirte que eran haikus
sobre l'enfant de Vangelis
lo que escuchaste.
Cinco,
Siete,
Cinco,
mientras yo hablaba de ti,
manchada de ciruela.
Te lo dije en el idioma de los cuerpos.
En el idioma de los ojos.
En el idioma que sabemos.
¡Mírame!
Tú me escuchabas, yo
te escuchaba,
me escuchaba
a ti.
Tú,
yo,
Tú,
yo:
Segundos en el reloj.
Finales de versos
antes del mundo.
Pronombres,
pre-nombres,
(éramos)
(niños, ojos)
mirándose.
Eso
era todo
en aquel momento.
(-"¿Ves? Cinco,
Siete,
Cinco,
es un poema meditativo,
¿Sabes?
como un jardín zen
silencioso en tu espalda": NUNCA
podré
decirte eso)