REQUIEM DE MUERTE
cuéntame de tus noches,
cuéntame de los sueños
que han decolorido tus sábanas,
que han puesto turbias las aguas
de los manantiales de tu infancia.
cuéntame si tus lágrimas
se tornan rojas
- como las flores que a tu madre le dabas,
sosteniéndolas con las dos manos,
escondiéndolas tras tu espalda -
desbordándose por tus ojos de niña
y precipitando sobre tu almohada,
trayendo a tu mente los recuerdos
de aquel muñeco peluche,
de aquella canción que nació
cuando tu naciste.
recuerda que la nada hoy yace inconciente,
que los besos se van borrando de tu mejilla,
que la lágrima se desvanece
quedando en el olvido, como los vestigios
de tu pasado florecido.
y se proyecta todo en un cuadro,
uno que tú misma has pintado,
ese que ya nadie quiere,
ese, que es el reflejo
en el roto espejo que te vio crecer.
y pinta lo que tú quieras ser,
y reza porque a tu mundo no lo veas caer,
sonríe si estás despierta,
escucha el dulce requiem de muerte
que los ángeles tocan para tí.
no temas si tienes que vivir
y muere si es necesario
para que seas feliz,
pero dime si te tengo que seguir,
pues mis maletas ya están hechas
y estoy solo esperando por tí.