Fútbol: Temp. 2013/14

Origami escribió:

Y Ramsey tambiés es bueno el cabronazo.

Origami escribió:

Sí, eso es verdad. Pero es que 7 millones...está claro que el Villarreal necesitaba vender...pero 7 millones...yo no digo que Valero sea mejor que Modric o que Cesc...no lo es...

Alguien escribió:

Si uno no sabe por dónde empezar, en cuestión de obras de arte, mejor comenzar por el final. Partido áspero, condiciones desfavorables, rival serio y crédito a la intemperie. Guión de manual para un Barça que coquetea con despeñarse y flirtea en el alambre. Tras una primera digna de la cámara de los horrores, el equipo culé pasó de víctima a depredador en cuanto tomó su mejor decisión de la noche: agruparse y ordenarse en torno al balón. Ahí, en ese ecosistema, fue reconocible. Al fin, encontró a Iniesta. Y al mejor jugador del mundo, su centro de gravedad, Messi. Suficiente para liquidar a un buen contrario, para voltear un partido incómodo y para recuperar el liderato ante sus dos rivales y aspirantes.
Antes de que Iniesta encontrase su hábitat natural y Messi reescribiera el signo de lo que parecía una derrota merecida, el Barça deambulaba. Su zaga no tenía defensa, su centro del campo naufragaba y su delantera era inocua. El primer acto fue una oda a la sospecha culé: campo encharcado, viento en contra y un Sevilla ávido de gloria. Penitencia para los de Martino. Al filo de la navaja, el Barça se limitó a mostrar una abulia preocupante durante media hora larga. Le sobrevino un mazazo de Alberto Moreno (gol), un remate letal de Bacca (palo) y de propina, el recital descomunal de Rakitic (imperial). Todo hacía presagiar que el Sevilla montaría una carnicería en el área azulgrana. Craso error.
El cielo de Sevilla descargaba una llantina inconsolable cuando apareció Teixeira – empeñado en superar a su hermano en su particular carrera de despropósitos-, para dar aire al Barcelona, tras conceder un tanto ilegal a los visitantes. [Capítulo 3.767 de la Enciclopedia del Buen Aficionado: Pasan los años y los partidos, pero los aficionados a los que les gusta el fútbol siguen teniendo memoria para recordar lo ridículos que se ponen Madrid y Barça cuando lloran diciendo que les perjudican los árbitros]. Sin solución de continuidad, al rescate se sumó Messi, en su penúltima recreación plástica de lo imposible, fiel a su particular antología de jugadas de Play Station. Sin plan, pero con gol. Sin fútbol, pero con fortuna. Futbol, inexplicable e impredecible. Una ciencia sin ciencia, donde quien merece ganar está a un paso de perder y quien firma derrota acaba gobernando una victoria.
En el segundo acto, viento de cara y coreografía activada, el Barça, espoleado por Iniesta – que no juega, sino levita-, regresó a su paraíso: pelota para administrar espacio y profundidad. Al de Fuentealbilla se le asoció Messi, el diez de dieces. Y ante ese alud de talento, lo que quedaba del Sevilla enseñó bandera blanca. Messi vacunó el tercero (quinto goleador de toda la historia tras Zarra 251, Hugo 234, Raúl 228 y Di Stefano 227). Menos mal que está triste. El cierre lo puso Fàbregas, para tapar bocas y sellar un marcador tan abultado como embustero. El liderato del Madrid había durado aún menos que el del Atlético. El Barça volvía a recuperarlo después de 59 semanas de hegemonía. Para no volver a extraviarlo, tendrá que tener presente una lección inolvidable: seguir ganando títulos depende de generar las mejores condiciones para Iniesta y Messi. Balón y espacio.
Rubén Uría / Eurosport

Milanozero escribió:

pero si valero lo peor de todo es que era canterano!!!...pues no he faltado el respeto a florentino con valero y negredo..mata y soldado..nunca me gustaron..cosas mias..mis taras ya sabeis..