Hubo un tiempo en que los hombre vivian en las montañas. Refugiados en sus cuevas se sentían seguros de las amenazas del bosque y resguardados de las inclemencias del clima.
Su capacidad intelectual estaba en pleno desarrollo, estaban aprendiendo a dominar el medio y su capacidad para elaborar herramientas les hacia la vida cada vez más fácil.
El fuego les permitía mantener a las fieras alejadas y comer calentito. Pero no fueron capaces de calcular las consecuencias de su bienestar. El humo de las hogueras fue su perdición. Sus pulmones no tardaron en intoxicarse y fueron víctimas de su propia invención. La esperanza de vida descendió drásticamente, lo que les causo una gran conmoción. Renovarse o morir fue su única opción.
Salud!
>>>Y lo entiendo, ¿eh?
>El que entiendes o no deberias entender?
Me refiero a que entiendo el impulso de dar a conocer tu música, de compartirla, de subirse a un escenario. Lo decía exclusivamente porque no quiero que parezca que todo lo anterior me parece mal, ni nada por el estilo.
Dejando al margen las ansias categóricas de explicar una ley universal sobre el acto y momento de creación artística, creo que es más ilustrativo y humilde exponeros la experiencia personal, que es la que conozco un poco mejor.
En mi caso el momento creativo tiene una etiología estrictamente personal, introspectiva y casi onanística. *Yo* tengo el impulso de crear un nuevo mundo, un personaje o dibujar una emoción. *Yo* tengo la melodía dentro de mí. Y es *yo* mismo quien incorpora los elementos de composición uno a uno, allí no hay nadie más.
Esto es así por el método de composición, en mi estudio, con las herramientas alrededor. Pero creo que si incluso dirigiese un equipo de instrumentistas el origen creativo tendría la misma naturaleza.
Otra cosa sea cuál es el motivo, el motor emocional que me empuja a componer. Casi siempre es un movimiento emocional, de amor, de sorpresa, de rabia. Este origen emocional implica incorporar en el proceso creativo un montón de horas pensando y viviendo las personas, paisajes, historias que han motivado el momento creativo. En realidad estoy entregándome a ese origen.
Como veis, en mi caso, es una especie de "fantasía egogénica" que tiene su fundamento y se despliega hacia los demás.
Después, y también ciñéndome a mi experiencia, el reconocimiento de los demás de la obra, en particular aquellos que han provocado el movimiento, es la aprobación de esa conexión, el haber encontrado un igual que entiende y se emociona igual que tú. Es más un sentimiento de conformidad con tu grupo afiliativo que la mera alimentación del ego.
Así pues es una divertida mezcla de egocentrismo extremo y entrega sin condiciones, un ejemplo más de la atípica e impredecible naturaleza del ser humano (recordad que hay *millones* de especies de terráqueos que no son humanos)
Salud
The Druid
Baneado
Joder, esto no hace ni un año, y me doy cuenta que me he vuelto un poco gilipollas, o quizás no, yo que sé.
El caso es que algo ha cambiado aquí y no se lo que es....
Yo echo de menos estos debates...
q vida esta
Ya volverán....