Arturia V Collection 9 añade Korg MS-20 V, SQ-80 V, Augmented Strings y Voices

El aterrizaje de la V Collection 9 y sus ¡33! instrumentos es también el descubrimiento del poder de la gama 'augmented' de Arturia a través de Strings y Voices, lo que por sí solo ya hace llamativo y relevante el lanzamiento. Un MS-20 con el beneplácito de Korg es la tercera, pero no la última, de las novedades que encierra.

El MS-20 V de Arturia llega con el aval que supone contar con licencia de la propia Korg, una inesperada sorpresa si tenemos en cuenta que Korg aún tiene en catálogo su propio plugin de MS-20. Se trata de uno de los sintetizadores más populares en España en su época: finales de los 70s y principios de los 80s del siglo XX. Para todos los que soñábamos con sintetizadores en esos años, los MS de Korg eran uno de los modelos con precio más asequible, aunque todavía lejos del alcance del común de los mortales.

Una versión a la japonesa de los sintes monofónicos compactos con teclado que ya se hacían hueco en infinidad de bandas. Su orientación semimodular permitía creerse el rey de la síntesis tirando cables de un lado para otro de su panel derecho. Sonido algo brusco y cortante, fácilmente agresivo, especialmente es sus primeras ediciones con un filtro más inestable que rápidamente se reemplazó con otro más lineal, más al gusto de los más teclistas, aunque los amantes de la música industrial pudieran preferir el primero.

De todo eso encontramos en esta versión de Arturia, que tiene ya experiencia sobrada en la virtualización de sintetizadores como para enfrentar este reto del MS-20. Las dos familias de filtros con los que se comercializó por Korg el MS-20 original están disponibles en esta versión 'arturiana'. Y es toda una gozada. En seguida se manifiestan las peculiaridades de cada uno. Entre ellas, la resonancia pulcra, estable y afilada de la versión II se pierde a favor de un sonido más inestable, móvil, burbujeante, si optamos por la I.

Puede sonar, en buenas manos, todo lo bruto que se necesite, aprovechando los trucos que el MS-20 permitía para forzar saturaciones y distorsiones en diferentes maneras. Pero gracias a las virtudes del soft, puede también convertirse en un instrumento polifónico con sonidos más convencionales y ligeros. Y se extiende más alla del MS-20 hardware, con algunos extras muy útiles.

Llega acompañado de una recreación del SQ-10, el secuenciador hermano de los MS-10 y MS-20. Superando con ello al propio plugin de MS-20 de Korg. Y por supuesto, en eso Arturia siempre acierta, añade tanto al sinte como al secuenciador funciones que no estaban en los originales. Interesantísimo contar con sync entre osciladores y con salidas audio de cada uno de los osciladores en el 'patch panel' que hacen posibles modulaciones en banda audio real para incursiones en FM / fcM / AM y semejantes. O algo que veo imprescindible en este caso: la envolvente original ('clásica') del MS-20 tenía evidentes limitaciones y se puede reemplazar en este MS-20 V con otra ('modern') que la complementa magnificamente evitando bloquearnos lo que daba de sí la original. Tremendamente útil también la posibilidad de ligar los dos filtros (HPF y LPF) para que sus frecuencias de corte se muevan en paralelo o a la contra si lo deseamos. Lo veréis y escucharéis en el vídeo, si vais a la sección, amplia, de ejemplos de sonido de este sinte.

No renuncia este Korg MS-20 V a la entrada de audio externo y su procesamiento que presentaba el instrumento original, ni tampoco a un arsenal de efectos que siempre incluyen los sintes de Arturia y que tan bienvenidos son para contar con sonidos rematados sin depender de otros plugins o efectos de terceros.

No es que estuviera parca de oferta en cuanto a analógicos la V Collection. Pero nadie puede hacer ascos a un MS-20, en especial uno bien concebido y biensonante, como este que nos ocupa.

Más información | arturia.com

Si sorprendente por inesperada ha sido para mí la llegada de ese 'Korg' al mundo Arturia, debo reconocer que mi corazoncito entre las novedades está con la llegada de los 'Augmented'. Y no creo que sea por el calentón y el efecto 'novedad' en la rápida prueba que hemos podido hacer pocos días antes del lanzamiento oficial. Creo que el buen gusto que me han dejado llega para quedarse. Como veréis en el vídeo, Augmented Strings es lo que más he probado. Y es que había tanto que probar que he tenido que dejar algo relegadas las Augmented Voices. En todo caso ambas comparten mucho.

Los dos 'Augmented' son los primeros (si obviamos el gancho de Aumented Strings Intro, aparecido hace pocos días como breve anticipo) de lo que promete ser toda una nueva familia de instrumentos en Arturia. Y qué queréis que os diga: Arturia acierta cada vez que decide ir por su cuenta, sin clonar a nadie ni reconstruir glorias pasadas. Lo mismo me da en hardware (esos excelentísimos Matrix Brute y PolyBrute) que en software con esa joyita llamada 'Pigments' que no está (ni se la espera) dentro de la V Collection.

Los Augmented expresan la forma que tiene Arturia de concebir qué puede ofrecer una 'librería' muestreada. Para muchos, como todos los que las usan en creación de bandas sonoras orquestales sin orquesta, se trata de apegarse al máximo de realismo. Para Arturia no. Augmented ofrece una propuesta en la que lo real se usa y se abusa para construir propuestas sonoras diferentes. Evocadoras y teñidas de lo real, sí. Pero ambicionando y logrando despegarse de ello para ofrecer otras sonorides ampliadas... sí: aumentadas, definitivamente.

Por debajo de la primera vista simplificada y sus 8 controles 'macro', que permiten enormes variaciones del sonido, si pulsamos 'advanced' llegamos a las tripas del mundo Augmented. Y encontramos lo que vendría a ser un hermano 'Pigments', en cuanto a las capacidades de diseño sonoro. Estoy por decir que un hermano gemelo incluso.

Cada sonido en la gama Augmented puede hacer uso de dos capas. En cada capa dos fuentes y filtro (con diferentes opciones, y dotado de envolvente). Cada una de las dos fuentes de cada capa tiene su propia envolvente de nivel, que actúa antes del correspondiente filtrado. Y cada una de las dos fuentes puede basarse en un sistema de muestreo (sampler) o de síntesis (synth). En total 4 fuentes, de las que 2 serán siempre 'sampler' y dos 'synth', pero que podemos asignar en el reparto que deseemos sobre esas capas.

Si en Pigments tenemos la posibilidad de cargar nuestras propias muestras, en los instrumentos Augmented ese trabajo ya viene realizado. Augmented Strings (y también Voices) aporta una amplia colección de multimuestreos, no con la densidad y detalle extremo de las librerías orquestales al uso, pero sí con muy diferentes instrumentos en variedad de articulaciones tanto convencionales como no tanto. Entre las muestras asoman las propias del terreno cuerdas, pero también otras pensadas para ofrecer contraste y capacidades de construcción de texturas, como son ruidos muestreados, o pequeñas presencias de otras familias de instrumentos.

Por la parte de la síntesis, al igual que con Pigments, cada una de las fuentes puede usar modo de tipo 'VA' (tres osciladores virtuales), wavetable (con numerosas tablas de ondas para elegir), aditivo ('harmonic', magnífico en contraste acompañando a otras técnicas), y granular. Sí, granular. Partiendo de un amplio surtido de muestras precargadas específicas para Strings o para Voices, y de nuevo contando entre ellas lo que cabe esperar en esas gamas pero también otros sonidos con los que contrastar y texturizar.

Las capacidades de modulación van mucho más allá de los LFOs y envolventes, y permiten diseñar con gran detalle las curvas de respuesta a la velocidad, el aftertouch, la posición en el teclado (keytrack), ... y también contar en el diseño de sonidos con contornos complejos multipaso ('functions'), o con funciones aleatorias de tipos Turing o Sample&Hold, entre otros importantes recursos. De nuevo conocidos para los que hayáis trasteado con Pigments.

Entre esas pocibilidades de modulación asoma la capacidad de personalizar el comportamiento de los 8 controles macro que presenta el interfaz simplificado. Cada uno de ellos puede atacar a varios destinos simultáneamente, que es la razón por la que llegan a causar tantas y tan profundas transformaciones en los numerosos presets que incluyen tanto Augmentes Strings como Augmented Voices.

No faltan tampoco efectos, dos por cada capa seleccionables de un amplio repertorio, más dos comunes (delay y reverberación). O un arpegiador que va más allá de los clásicos, sin llegar a constituirse propiamente en un arpegiador programable, pero aún así potente.

Todo lo anterior vale como descripción, sucinta, de lo que ofrecen tanto Augmented Strings como Augmentes Voices. Pero hay que oírlos. Podéis acudir a la sección de ejemplos con Augmented Strings en nuestro vídeo. Y al hacerlo veréis que destacan los sonidos de alta complejidad y actividad interna. Casi siempre multicapa y haciendo dialogar el sonido real y la intervención electrónica ya sea procesando lo real o por combinación con síntesis. Consiguiendo con mucha facilidad empastarlos y construir un todo coherente.

Cierto que por esas características tiende a lucirse más en los sonidos muy ambientales y efectistas, pero destaca la facilidad con la que permite moverse por ese terreno tan denso. Quien quiera usarlo como puro sintetizador también encontrará muy buenos ratos, siendo la ausenica de poder cargar muestras de usuario lo que más separa a los Augmented del excelente Pigments.

Más información | augmented strings y augmented voices en la web de Arturia

Conocido ya, dado que apareció como instrumento individual hace meses, SQ80 V es la versión Arturia del Ensoniq SQ80. En la versión que llega a la V Collection hay algunos cambios estéticos respecto a la primera edición. Pero en esencia se trata del mismo instrumento que ya os describimos en una noticia de septiembre de 2021.

Más información | arturia.com

Varios de los instrumentos de la colección V de Arturia elevan su versión coincidiendo con el lanzamiento de la edición 9 de la V Collection. Entre ellos el CS-80, o el Piano V. Más llamativo el cambio que sufre el que hasta ahora era un único instrumento 'Prophet' que reunía dos personalidades: Prophet-5 y Prophet-VS. Desde ahora esos dos sintetizadores tienen cada uno su propio instrumento y viven separados.

Estas elevaciones de versión implican en muchos casos mejoras en el aspecto de interfaz, adición de pequeñas funciones, mejora de los efectos y posibilidades de modulación, integración de nuevos presets, mejora y estandarización en toda la colección de las funciones de búsqueda y catalogación de sonidos, amén de optimizaciones y correcciones del código con adaptación a los nuevos procesadores, sistemas operativos, etc.

Para quienes lo necesiten, enumeramos más abajo los instrumentos que forman la V Collection 9.

Recordad que tenéis disponibles versiones demo. Sobre precios: está disponible a precio de 'colección' (en general y salvo ofertas, mejor en tiendas que en la propia web de Arturia), pero también se pueden adquirir los instrumentos individuales, existiendo una política en Arturia que beneficia con ofertas a quienes ya tienen otros productos, de forma que en el paso a la colección se reconozca la inversión ya realizada previamente y en esencia se abone la diferencia restante.

Más información | arturia.com

• Augmented Strings
• Augmented Voices

Sin olvidar sistemas modulares tanto 'west coast' como 'east coast', monofonicos y polifónicos

• Korg MS-20 V
• OB-Xa V
• JUN-6 V
• Vocoder V
• Buchla Easel V
• Modular V
• Synthi V
• Mini V
• ARP 2600 V
• SEM V
• Solina V
• CS-80 V
• Prophet 5 V
• Prophet VS V
• Jup-8 V
• Matrix-12 V

Desde los DX de Yamaha y la modulación de fase de los Casio CZ, a los mastodónticos Fairlight o Synclavier.

• SQ80 V
• Emulator II
• CZ V
• DX7 V
• Synclavier V
• CMI V

Con variados órganos, pianos eléctricos y acústicos, o el Mellotron

• Farfisa V
• B-3 V
• VOX Continental V
• Clavinet V
• Wurli V
• Stage-73 V
• Piano V
• Mellotron V

• Clásico ya en Arturia, se trata de un interfaz único para acceder desde él a una gran colección de presets de los instrumentos soft de Arturia, que se pueden editar en sus parámetros principales desde el propio Analog Lab y que enlaza cuando se requiere edición más profunda con los instrumentos completos.