DynaMount, posicionamiento de micros motorizado y con control remoto
Hace un par de meses ensayábamos con nuevo equipamiento de vídeo en Hispasonic; concretamente, con un slider motorizado —un artilugio capaz de desplazar la cámara suavemente en los ejes vertical y horizontal, dando la clásica sensación de movimiento lateral a la escena—. En aquel momento, alguien comentó que sería curioso ver algo similar aplicado a los micrófonos, quizá para hacer seguimiento automatizado de la voz de los actores.
Por eso ha sido una sorpresa descubrir DynaMount, un soporte motorizado para micrófono con control remoto —por WiFi o USB— que nos permite ajustar el posicionamiento del micro, algo crítico cuando grabamos amplificadores o baterías, por ejemplo.
Uno podría decir que ya tenemos un par de manos para esa tarea, pero el enfoque de DynaMount añade un punto de precisión y, sobre todo, permite operar desde el puesto de control, escuchando inmediatamente el resultado, sin siquiera mirar al micrófono. Esto puede ser muy interesante si estás solo, o simplemente quieres concentrarte en el sonido: te sientas a escuchar, ajustas la posición hasta que suena como quieres, y listo.
Hay cuatro modelos, dependiendo de los ejes y rotación que puedes realizar:
- V1: un solo eje
- V1-R: un eje + 360º de rotación
- X1: dos ejes
- X1-R: dos ejes + 360 º de rotación
Podemos guardar nuestra posición favorita como un preset, para luego recuperarla cuando sea necesario —tiene 6 memorias—. Además, DynaMount puede montarse en cualquier soporte convencional de micrófono —aunque tendrá que ser uno decente; el conjunto es pesado y puede hacer inestable un pie de micro endeble—. Y con un pack de accesorios opcional, puede montarse en horizontal, vertical o incluso invertido.
Las apps de control remoto para smartphone y tablet son gratuitas; desde ellas podremos ajustar la posición en incrementos de hasta 1.4mm y 1 grado de rotación.
Eso sí, el precio puede picar un poco: la versión más completa, la X1-R, sube a 849 euros. El V1-R anda por 570 euros. Pero el aparato es lo que es.
