Limitador y maximizador Kratos 2 de Kuassa

Kuassa tiene un catálogo con presencia destacada de modelos de amplificador en plug-in. Eso ya habla de una vocación por los terrenos difíciles de las no linealidades. Su producto Kratos Maximizer (69 USD) es uno de tantos destinados a ayudar a la hora de obtener una mayor presencia y sonoridad en las mezclas finales, y llega a hora a su versión 2, con la que se hace presente en entornos AAX y Reason RE, además de los AU y VST/VST3 en los que ya estaba desde su anterior versión. Kratos v2 aporta también las facilidades propias del control adaptativo (automatizado) de los tiempos de ataque y liberación.

Se trata de una aplicación para aumentar la intensidad sonora, con la estrategia clásica de aplicar un primero un limitador que permita a continuación elevar el nivel. Es el cuidado en el sentido técnico y la sensibilidad en el sentido perceptual al realizar la limitación lo que acaba por diferenciar a unos maximizadores frente a otros. Típicamente se trata de realizar ajustes sensibles al contexto del audio que está siendo tratado. Por ejemplo, reduciendo la ganancia ya previamente a la llegada del pico, con lo que la forma íntegra del transitorio puede preservarse sin distorsión con un resultado perceptualmente más natural y fiel al sentido original del audio.

Entre las características de Kratos se encuentran:

• Acepta audio grabado hasta 96KHz, y puede extender la frecuencia de muestreo original con oversampling interno hasta x4 a la hora de realizar los cálculos (sería muy recomendable, al menos cuando queremos forzar limitaciones fuertes / veloces, ante las que la distorsión y su acompañante el aliasing se ven incrementados).
• Realiza una estimación de los picos intermedios entre muestras, para trabajar con una definición más rigurosa del contenido audio
• Cuenta con la posibilidad (soportada por la mayoría de los DAW) de realizar compensación de latencia
• Soporta Dither (lineal clásico, lineal filtrado HPF, o basado en las curvas de audición humana) y puede incorporarlo a niveles propios para finalización a 24bit (DVD, pre-mastering, copias de referencia), 16 bit (CD) o incluso 8.

Entre sus controles veréis, además del 'maximize' principal (con recorrido 0 a 20 dB de ganancia), los de ataque (0-300ms) y liberación (0-1000 ms), y un control 'texture' (calibrado en ms) que permite regular entre una acción más o menos agresiva. 'Texture' extiende el tiempo de observación/reacción que aplica el limitador a costa de introducir latencia, pero a cambio mejorando la respuesta ante bajas frecuencias. Sería equiparable al ajuste 'look-ahead' de otros limitadores, y es clave para buscar una adecuada correspondencia entre el tipo de material dominante en el programa audio y la actuación desarrollada por el limitador.
No falta el clásico control 'Knee' que regula la forma del codo del limitador.

Llega como novedad en la v2 la posibilidad del control adaptativo de los tiempos de reacción. En función del tipo de audio que está entrando y también del ajuste texture, Kratos regula por sí mismo los valores attack y release, tomando siempre como valores máximos los que tengamos ajustados en los correspondientes controles. En definitiva, la adaptación será siempre hacia más veloz respecto a lo indicado en los controles, y nos deja por tanto intervenir fijando esas cotas y no confiando ciegamente al 100% en la inteligencia interna.

El control 'Ceiling' actúa como limitador (0 a -20 dbFS) de la señal de salida, permitiendo garantizarnos un pequeño márgen que asegure no forzar el 'full scale' (siempre sería recomendable darnos un poco de holgura, aunque sean unas décimas de dB).

El proceso de ajuste pasaría normalmente por ajustar Maximize hasta lograr que la aguja del visualizador del grado de limitación se vea actuando en los instantes de transitorios, pero no en el resto del audio. Contaríamos entonces con la posibilidad de usar Texture hasta reducir el impacto que la limitación causa sobre la calidad percibida de los transitorios. Realizado un ajuste globalmente correcto de Texture, pasaríamos a jugar con ataque/liberación para terminar de matizar y en último lugar corregiríamos el codo suavizándolo lo mínimo imprescindible.

Como apoyo en el proceso de creación de ajustes, además del clásico on/off podemos tener dos configuraciones (A y B) y conmutar rápidamente de una a otra, así como copiar entre ellas, lo que permite 'congelar' una versión tentativa de los ajustes mientras seguimos indagando otros posibles retoques, con la tranquilidad de la posible una vuelta atrás veloz sin la complicación de acudir a la gestión de presets (que por otra parte también existe).

Más información | Web de Kuassa