Roland TR-06 hardware y TR-606 software, Drumatix por partida doble
De un carácter muy diferente a la 'moderna' TR-6S también presentada hoy, Roland lanza además una TR-06 en hardware y una 'TR-606 software', ambas para recuperar aquella clásica TR-606 Drumatix que en los primeros ochenta hermanaba desde su característico color plateado con el bassline TR-303 formando una pareja de hecho muy frecuente.
TR-06
Se trata de una reedición basada en el formato ya conocido en los instrumentos de la serie Boutique de Roland, de la que la TR-06 hardware no deja de ser continuación. El panel superior metálico, tan propio de la gama Boutique, refuerza un acabado atractivo que es otro de los argumentos de esta serie. Una vez más es modelado en versión digital lo que aplica Roland para facilitar la recuperación de los sonidos y las reacciones de los circuitos analógicos, llevando al tamaño estándar de su gama Boutique la estética y controles de la original.
Eso sí, ampliada con controles inexistentes en la Drumatix para poder varias la afinación o la duración de la cola en cada sonido, así como para poder ubicar en panorama estéreo los sonidos. Efectos como compresor, eco y una distorsión también son incorporaciones de nuevo cuño que mejoran los resultados sin depender de equipamiento externo.
Ampliadas funciones también en el secuenciador por pasos, entre ellas la aleatorización probabilística de los pasos, y nada menos que cinco salidas de 'trigger' para poder usarla en combinación son sistemas analógicos y modulares disparando sonidos y eventos externos.
Como otras cajas de ritmo previas en la serie Boutique, puede actuar como interfaz audio, es posible la alimentación por pilas y USB, y admite tres posiciones con diferente ángulo, además de contar con funda (DK-01) a juego con el color plateado.
Se espera su llegada a finales de octubre con un precio oficial alrededor de los 400 dólares USA.
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TR-606 software
En esencia la misma recreación modelada de la Drumatix, pero en versión software y con algunas funciones ampliadas gracias a la mayor flexibilidad que siempre existe al abandonar los rigores del hardware.
Así, por ejemplo, podéis ver en la imagen como la representación desde el software permite mostrar simultáneamente las líneas de pasos de todas las pistas/instrumentos, y editarlas con comodidad. Ese tipo de vista ofrece siempre más información sobre la interacción de los diferentes instrumentos y resulta bien útil. Interesante por tanto que se haya pensado en una profunda integración de esta versión soft con el hard, de forma que pueda simulanearse su uso relizando la edición en cada momento allí donde nos resulte más cómodo y eficaz.
Hay funciones de tipo arrastrar y soltar para transferir los patrones hacia pistas en un DAW, que pueden ser audio (patrones convertidos a sonido) o pistas MIDI (para poderlos quizá reproducir con otros instrumentos complementarios o alternativos). Son posibles usos polirítmicos a través de una longitud diferente para el bucle en cada instrumento, o aplicación de swing/shuffle en diferente grado sobre cada pista, entre otros recursos.
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Pablo no puede callar cuando se habla de tecnologías audio/música. Doctor en teleco. Ha creado diversos dispositivos hard y soft y realizado programaciones para músicos y audiovisuales. Toca ocasionalmente en grupo por Madrid (teclados, claro).
