Formación para DJs (I): La opción pública

El 23 de Marzo de 2012, el gobierno de España aprobó la creación del título de Técnico en Vídeo Discjockey y Sonido, unos estudios de Formación Profesional de Grado Medio que han levantado muchas expectativas y controversia desde su creación. Expectativas porque muchos jóvenes ven en estos estudios una forma de introducirse en una profesión moderna y con mucho encanto gracias a que actualmente entre las estrellas del negocio musical se incluyen también muchos discjockeys que han sabido rentabilizar su posición e imagen y se han convertido en productores de éxito. Controversia porque algunos medios de comunicación recibieron con escepticismo la noticia de la creación de este título, aludiendo a los típicos sambenitos de los profesionales del ocio nocturno para dar a entender que profesores y alumnos no estarían a la altura de unos estudios oficiales, y calificaron a estos estudios como “la FP del DJ” con un cierto regusto a vulgaridad.

Como cualquier otro Grado Medio de Formación Profesional, el título se obtiene superando con éxito dos cursos, durante el primero se estudian seis asignaturas, divididas en tres evaluaciones de tres meses cada una. En el segundo curso se estudian cinco asignaturas más, pero únicamente durante dos trimestres, quedando el último trimestre reservado para realizar prácticas en centros de trabajo. A estos estudios pueden matricularse personas que como mínimo tengan el título de ESO, 2º de BUP o un título de Técnico Auxiliar de la antigua Formación Profesional. En caso de no cumplir estos requisitos académicos, se puede acceder mediante una prueba de acceso siempre y cuando se tengan cumplidos 17 años, en esta prueba se evalúan conocimientos en 5 materias distintas. Las asignaturas que se cursan a lo largo de los dos cursos tienen relación con el propio trabajo del discjockey, pero también con muchas otras tareas relacionadas con el trabajo en el sector profesional audiovisual, así que a pesar del llamativo nombre del título, en estos ciclo se forma a gente con capacidad de trabajar como técnico de sonido en determinadas circunstancias profesionales. Aunque de las asignaturas hablaré de manera más concreta más adelante.

Apenas seis meses después de su aprobación por el gobierno, estos estudios se pusieron en marcha en unos pocos institutos españoles públicos. El IES La Marxadella de Torrent, en la provincia de Valencia, es un centro de Formación Profesional en el que desde hace muchísimos años se han impartido estudios de la familia profesional de Imagen y Sonido, y ha sido uno de esos pocos institutos españoles en los que se ha implantado el título hasta el momento. Como no hay mejor manera de conocer unos estudios que hablar con quienes los imparten y con quienes lo aprenden, decidí contactar con este centro para poder hablar con alumnos y profesores y saber la realidad de una titulación de la que mucha gente habla en base a suposiciones, conjeturas o prejuicios, pero pocos conocen de manera directa. Víctor Pineda, profesor de la asignatura de Instalación y Montaje de Equipos de Sonido y jefe de departamento fue muy amable organizando un encuentro con los alumnos durante las horas lectivas, algo muy de agradecer teniendo en cuenta que estamos en la recta final del curso y desaprovechar tiempo de clase no es algo que todo el mundo esté dispuesto a hacer. Después de este encuentro pude sentarme a charlar con Víctor y también con Javi, que imparte la misma asignatura, así como con Óscar, que se encarga de la asignatura de Toma y Edición de Imagen Digital.

Me reuní con los alumnos en su aula, en la que cada alumno contaba con un PC y una interfaz Focusrite de la gama Scarlett. Tras presentarme, y saber que había algunos visitantes de Hispasonic en el aula, me informaron de que eran 25 las plazas disponibles en este primer curso, aunque reconocieron que “cada vez somos menos”, ya que normalmente asistían a clase unos 19 o 20 alumnos. Una lástima desaprovechar plazas, ya que fueron nada menos que 300 los que presentaron solicitud solamente para este centro. El baremo principal de admisión en formación profesional es la nota, los 25 con mejor nota son los elegidos, aunque también se tiene en cuenta la situación familiar y económica. Algunas de las plazas están reservadas para los que acceden por prueba de acceso. Lo primero que quise saber fue lo que les motivó para matricularse en estos estudios, y tuve respuestas muy sinceras: “antes no había nada de sonido en los grados medios, es lo único que hay para pasar directamente de la ESO a estudiar sonido”, contestó uno de los alumnos, mientras que otro afirmó tajantemente “para pasar después a estudiar después el Grado Superior de Técnico de Sonido”. Fueron ciertamente pragmáticos y realistas en sus respuestas, efectivamente desde la creación de la nueva formación profesional en España (la antigua eran 5 años en los que se combinaban materias comunes con materias específicas profesionales) no se había introducido ningún grado medio en la familia de Imagen y Sonido en el que se pudiera estudiar algo relacionado con sonido, una carencia que estos estudios venían a resolver. La otra respuesta hacía alusión a una realidad, los grados medios son usados por muchos alumnos como cursos puente a los grados superiores, ya que aunque no tengan bachillerato y necesiten realizar la prueba de acceso para entrar, al tener un grado medio solo realizan una parte de la prueba. Después les quise preguntar acerca de si veían injusto el punto de vista que habían expresado algunos medios de comunicación infravalorando estos estudios y usando la vulgar definición de “la FP del DJ”: “Es injusto, solo están colgando un cartel”, comentaba uno de ellos, ”aquí se da de todo, no es específico de DJ, estamos dando también imagen”, me respondió una alumna, y luego otro alumno me dió una explicación bastante interesante al afirmar que “de hecho DJ es lo último que damos, aún no lo hemos tocado, se ha centrado hasta ahora mucho más en sonido, microfonía, estamos dando mesas de mezclas... en temas de imagen hemos tocado Premiere y ahora estamos tocando Photoshop”. Y es cierto, hasta el segundo curso no tienen la asignatura de Animación Musical en Vivo, que se centra en las tareas de propias del DJ en directo, aunque esto me lo aclararon los profesores más tarde. Esto desembocó en si creían que el nombre que se había impuesto a estos estudios había sido elegido como reclamo para atraer alumnos: “Sí, totalmente” respondieron casi al unísono casi todos los alumnos.

Lo siguiente de lo que quise hablar con ellos, era si ahora que estaban terminando el primer año, el curso cumplía o no con las expectativas que se habían formado ellos mismos antes de empezar: “Tenía muy bajas expectativas al ser un grado medio, pero estoy agusto, lo que quería aprender lo estoy aprendiendo”, contestó un alumno. “Yo en mi caso esperaba este primer año ver más cosas sobre el mundo del DJ y la producción musical, no las he visto, pero hemos visto otras muchas cosas que van a valer para ello”, explicaba otro. Otras opiniones estaban relacionadas con el hecho de que no esperaban tener que estudiar todo un mundo de conceptos relacionados con el sonido, pero que luego han visto que todo eso era necesario. Uno de ellos comentó la típica broma que le hicieron los amigos cuando les dijo lo que iba a estudiar “¿Y quien te va a dar clase? ¿Paquirrín?”. Nuestra conversación siguió por el tema de los trabajos y exámenes a lo largo del curso, ¿había sido difícil?: “Sí, ha sido difícil”, apuntaba alguno, mientras que otro comentaba “Depende mucho de la asignatura... Instalación y Montaje de Equipos de Sonido es de las más difíciles”, no se cortaron en decirlo aunque estaba el profesor delante. Ciertamente esa asignatura es de las que más carga lectiva tienen, 224 horas a lo largo de todo el año. Luego todos comentaron que en general no se regalaba ninguna asignatura, y en mayor o menor medida había que poner los codos.

Aunque algunos habían expresado su intención de seguir estudiando después de conseguir esta titulación, quise saber si otros pretendían entrar al mercado laboral y qué clase de trabajo pretendían encontrar.”Sí es posible sí que me gustaría trabajar”, explicaba un alumno, aunque luego continuaba “aunque aquí en España creo que no es posible encontrar nada... bueno si es por enchufe, sí”. “Este ciclo te da oportunidad de trabajar en múltiples cosas, es lo bueno que tiene”, comentaba una de las chicas. Ciertamente repasando el currículo de esta titulación, los alumnos salen capacitados para trabajar además de como discjockeys, como ayudantes de sonido en televisión, microfonistas de cine y espectáculos, ayudantes de montaje de sonido... Continuamos hablando de los salarios que esperaban tener en este tipo de trabajos: “600 euros y sonrío”, dijo uno de los chicos provocando las risas de todos sus compañeros, “que te den las gracias” apuntaba otro. Centrándonos en el trabajo de discjockey, les pedí que se mojaran y que dieran una cifra concreta y sincera de que lo que ellos creen que debería cobrar un DJ mensualmente por ir a trabajar a un club de tamaño medio 3 días a la semana: “Unos 800..”, “No, eso es mucho con la situación actual, pero es que es mucho curro... unos 600”, “También se están aprovechando mucho los locales, te dicen que está todo muy mal, y tanto para pinchar como para tocar con una banda únicamente te dan de beber”, fueron las respuestas que tuve. Eso desembocó en una conversación con los estudiantes acerca de la necesidad de una mayor regulación laboral del sector, tanto a nivel salarial como a nivel de titulaciones. Veían justo que se pudieran llegar a exigir titulaciones para trabajos en el campo audiovisual, pero también necesario que se faciliten en mayor medida los medios para poder estudiar, aunque también alguno comentaba que desde su punto de vista algunas personas con muchos estudios nunca llegaban a tener la misma capacidad profesional que otros que han aprendido por su cuenta. “Habría que exigir conocer unos mínimos”, apuntaba un alumno. Todo esto nos hizo retornar a temas salariales, comentando que desde su punto de vista, una persona con el título que ellos iban a obtener debería cobrar por cualquier trabajo audiovisual a jornada completa “mil, mil cien...”. Ahondando en las cuestiones laborales, volvió a salir el tema de las pocas salidas profesionales, especialmente en las vertientes más artísticas (producción musical, pinchar...) donde algunos alumnos opinaban que sin una gran cantidad de contactos no había nada que hacer, lo cual generaba un panorama de gran injusticia en el sector, mientras que otros defendían que sin talento los contactos no sirven de absolutamente nada. Era bastante interesante ver como a pesar de la juventud de los alumnos, eran tremendamente realistas en las cuestiones laborales y ya iban teniendo opiniones bastante formadas, algo poco habitual entre estudiantes de unos años hasta ahora. Seguramente la situación económica que atravesamos les haya hecho ser más observadores y reflexivos en estos asuntos.

Después continuamos hablando del futuro, pero esta vez del futuro de los que querían seguir estudiando. “Ya que estamos en imagen y sonido, seguir con imagen, con sonido... o con producción, algo relacionado con alguna de las cosas del ciclo”, explicaba una de las chicas. “A mi me gustaría hacer algo relacionado con la composición musical, aprender todo tipo de géneros musicales, los patrones por los que se rigen... cómo crear esa música, aunque no se si hay algo con lo que puedas estudiar eso”, decía otro alumno. Esto desembocó posteriormente en opiniones de algunos alumnos sobre los contenidos del curso: “Está mal hecho, los que se querían meter en imagen, al no estar ya el ciclo de imagen tienen que comerse sonido, y los que quieren sonido y la imagen no les importa deben comerse imagen”, relataba una alumna. Esto surgió porque el ciclo de Grado Medio de Técnico de Laboratorio de Imagen está en vías de desaparecer del sistema educativo debido a que algunos de sus contenidos estaban quedando obsoletos por los avances tecnológicos. “Debería dejarse el de imagen, y especializar este solo en sonido”. Pero esa no era la única opinión, “yo pensaba que quería únicamente hacer sonido, pero ahora veo que el mundo de la imagen y el sonido están muy ligados, esto te enfoca para luego poder hacer un superior especializado en imagen o en sonido”, opinaba un alumno mientras otros le secundaban. Otro tema sobre los contenidos fue el inglés, una de las asignaturas, Captación y Edición de Sonido se imparte en esta lengua. El contenido de la asignatura en inglés según me comentaban los alumnos había ido aumentando gradualmente, a algunos de los alumnos esto les parecía genial, aunque a otros no ya que venían con un nivel previo de inglés bastante bajo que achacaban un inglés pobre en la ESO. Algún alumno comentaba que a fin de cuentas en el campo audiovisual era importante manejar bien el inglés, ya que mucho software y hardware únicamente viene documentado en inglés.

Otro de los temas que tratamos fue el del material. Me estuvieron explicando los alumnos que no habían gastado ni un euro en libros, pero porque sencillamente no existían ya que a las editoriales no les convenía editar libros para tan pocos alumnos como había actualmente, así que los profesores se encargan de recopilar y crear los contenidos, para después pasarlos a los alumnos en formato digital. Los profesores les pidieron que para ello se compraran un disco duro externo, que también les serviría para almacenar y transportar los trabajos que realizan en clase. Otro requerimiento fue que compraran sus propios auriculares por motivos de higiene. Hubo quejas en cuestiones de equipamiento del centro de estudios, las cosas habían llegado a mitad de curso, especialmente surgieron algunas quejas al respecto de la poca disponibilidad de una serie de cámaras necesarias para asignaturas de imagen, y que algún alumno había optado por comprarse su propia cámara. Los ordenadores del aula también eran objeto de queja, no eran los que habían pedido, y con algunos de los programas que empleaban sufrían cuelgues de manera constante, según algunos alumnos.

Tras charlar con los alumnos en su aula, me enseñaron el aula-taller anexa (las fotos del artículo están realizadas ahí), donde tenían casi todo el equipamiento que se emplearía en segundo curso para las asignaturas relacionadas con pinchar música y video en directo. Lo cierto es que el equipamiento no estaba nada mal, pude observar unos cuantos kits de Pioneer formados por dos CDJ-350 más mixer DJM-250 (básico pero actual y efectivo), varios controladores DDJ-Ergo, un controlador DDJ-T1, un par de F1 e incluso un Maschine MK2 y varios portátiles equipados con procesadores Core i7, también había platos Stanton T-92, para no dejar de lado aprender a pinchar al estilo oldskool (aunque en el fondo lamenté para mis adentros que los alumnos no pudieran probar unos Technics). En definitiva, creo que contaban con material más que suficiente para aprender a pinchar muy decentemente, con equipamiento bastante variado y actual. Los alumnos reconocían que el equipamiento estaba bien, pero se quejaban de que todavía no lo habían empleado en absoluto. “Pasad de curso y el año que viene podréis usarlo”, les animaba uno de los profesores.

Tras hablar con los alumnos me senté a charlar con los profesores Víctor, Javi y Óscar. Una de las primeras cosas de las que hablamos fue acerca de la cantidad de plazas que había para estos estudios (en la Comunidad Valenciana), había 100 plazas presenciales entre 3 institutos, uno en cada provincia, y 120 plazas semipresenciales (para estudiar a distancia) repartidas entre dos institutos. Según me explicaban, el problema no estaba en la demanda de plazas por parte de alumnos (que había sido elevadísima), el problema real era la demanda de la industria: “Vamos a estar formando una media de 100 técnicos al año en esta comunidad y se van a tropezar con una realidad, y es que sus perspectivas de trabajo no se van a poder cumplir, la industria de esta zona no es capaz de absorber lo que generamos”. Había habido según me explicaban una mala previsión del crecimiento de la industria audiovisual y de sus necesidades.

Lo siguiente que les pedí fue que me hicieran un pequeño resumen de los contenidos que se ven en las diferentes asignaturas. Esto es lo que me explicaron los profesores con sus palabras:

Instalación y Montaje de Equipos de Sonido (224 horas): tiene una parte de fundamentos eléctricos, sobre todo para formar al alumno a nivel de seguridad eléctrica. Tiene que ser capaz de validar si la instalación le sirve, no le sirve, es segura o no. No nos vamos a engañar, en la mayoría de los bolos de este país el técnico de sonido o de iluminación, o el DJ acaba haciendo la conexión del equipo cuando realmente la debería hacer el electricista que firma el boletín. Aparte se ven todos los fundamentos de conexionado de equipos, construcción de cables, tipos de señales, tipo de configuraciones dependiendo de si es una sala de animación musical, una radio... Se hace un poco arduo para los alumnos porque les cuesta ver que muchos contenidos que se ven en esta asignatura sean útiles para su trabajo. En esta asignatura al principio había mucha carga de tema eléctrico en la primera evaluación, así que metimos algo de señal de audio para hacerlo más ameno... Llegan y se creen que se van a poner a mezclar, pero tienen que tener una buena base.

Captación y grabación de sonido (154 horas): es introducción a la microfonía y a los sistemas de grabación, se ve microfonía básica para cine y televisión, que es lo más sencillo. No se llega a entrar en técnica microfónica musical, que es algo reservado a los grados superiores. Hemos metido también algo de software y algo de mezcladores, que está pensado para segundo, no para primero, para hacerles el primer curso un poco más chulo.

Preparación de Sesiones de Video-Discjockey (160 horas): es una asignatura bastante extensa en cuanto al tipo de contenidos, se ve una introducción al lenguaje musical y los géneros musicales, se ve un poco de composición de imagen y del valor expresivo de la imagen y también se ve algo de catalogación de archivo sonoro.

Toma y Edición Digital de Imagen (224 horas): estamos viendo como reforzar la parte más teórica de composición de imagen fija, y luego también vemos video, como componer imagen, como manejar software. También como utilizar Photoshop y Premiere sobre proyecciones que luego vayas a emplear en una discoteca como apoyo visual a lo que estés pinchando. Se ha facilitado y prestado material (cámaras) a los alumnos para que pudieran trabajar por grupos y procurando que todos pudieran usar el material (esto lo comentaba el profesor al hilo de las quejas de algún alumno sobre la necesidad de comprarse una cámara, quejas que consideraban infundadas).

Formación y Orientación Laboral (96 horas): es una asignatura común a todos los estudios de formación profesional. Se les explican cosas como nóminas, contratos... se intenta que todos los ejemplos prácticos que salen en la asignatura tengan que ver con la rama profesional que se está estudiando. También se da una parte de riesgos laborales, en combinación con la asignatura de IME, que también tiene contenido de riesgos laborales... se ven normas de seguridad en salas, control de cargas, tema eléctrico, primeros auxilios...

Hasta aquí las asignaturas del primer curso, seguimos luego comentando las asignaturas del segundo curso, que no comenzará por primera vez hasta septiembre de 2013:

Control, Edición y Mezcla de Sonido (192 horas): es donde ya van a empezar a hacer cosas de verdad. Todavía no lo hemos decidido, pero harán cosas o bien con Live o con Cubase... y que tomen fluidez no solo con la edición si no también con el procesamiento... lo que podríamos llamar “preproducción”, ya que nosotros no entramos en composición musical, aunque intentamos darle hilos artísticos.

Animación Musical en Vivo (198 horas): es toda la parte meramente de DJ... se contratará a un profesor especialista, que será un discjockey profesional apoyado durante unas horas por alguno de nosotros. Enseñará las técnicas básicas de utilización de todos los aparatos y las técnicas de mezcla de música en vivo de diversos estilos.

Animación Visual en Vivo (198 horas): igual que AMV pero centrada en el tema de video. También se tratan temas de iluminación.

Empresa e iniciativa emprendedora (66 horas): es otra asignatura común a todos los ciclos, mientras que en FOL se tratan cuestiones más a nivel del trabajador, en esta se tratan temas relativos a la creación empresarial.

Tanto en primer curso como en segundo, existe el Horario Reservado para el Módulo Impartido en Inglés, con 64 horas por año. Existen dos opciones para esas horas, una es que un profesor del ciclo con capacitación de inglés (nivel B2 de la Escuela Oficial de Idiomas) imparta su asignatura en este idioma, añadiendo esas horas a la asignatura de ese profesor, la otra opción es que si ningún profesor tiene la capcitación, durante esas horas un profesor del departamento de inglés del instituto imparta clases normales de inglés.

Formación en Centros de Trabajo (380 horas): conocidas comunmente como “prácticas”. Hemos estado hablando ya con algunas empresas... y vamos a tener un problema serio, son muchas horas, hay que hacerlas en tres meses... y ¿qué discjockey trabaja todos los días de la semana? Nos tenemos que ir a salas muy grandes, que hagan mantenimiento entre semana... o hablar con salas que tengan estudio de producción.

Otro de los temas tratados fue el de la formación de los profesores, algo con lo que algunos medios habían bromeado. Me explicaron que hay dos tipos de profesores, los de Secundaria y los Técnicos, los primeros deben ser licenciados y los segundos deben ser al menos diplomados o ingenieros técnicos. Los profesores son de toda la familia de Imagen y Sonido, no exclusivamente del ciclo, entre los profesores me explicaron que había licenciados en periodismo, comunicación audiovisual, ingenieros técnicos de electrónica, ingenieros técnicos de imagen y sonido, físicos... Después hablamos de la figura del “profesor especialista”, que es quien el segundo año debe impartir las asignaturas de Animación Visual Vivo y Animación Musical en Vivo. Me explicaron que ese tipo de profesor está pensado por el Ministerio para impartir materias que o bien sólo se pueden aprender mediante la actividad profesional o bien son materias que evolucionan tan rápido en el tiempo que una persona dedicada exclusivamente a la docencia no podría estar correctamente actualizada. Los aspirantes a esos puestos no tienen por qué ser titulados universitarios, deben llevar su vida laboral y currículum (hay un requisito de 3 años de experiencia) y el centro de estudios realiza las entrevistas o pruebas que estime oportuno para seleccionar a los profesores adecuados. La contratación la realiza directamente el centro de estudios.

Y ya que hablábamos de profesionales en activo, otro tema de nuestra charla fue el de que profesionales sin titulación pudieran convalidar su experiencia profesional con este título. Me explicaron que estaba contemplado, pero que lo iban a tener francamente complicado. Si alguien puede acreditar oficialmente experiencia en un determinado puesto de trabajo, se le puede convalidar la formación de ese “trozo” del ciclo, como ejemplo me ponían que si un DJ acreditaba que había estado trabajando como tal en una determinada sala durante un tiempo, se le podía convalidar la asignatura de Animación Musical en Vivo, pero no el resto de asignaturas. Según me explicaban, el problema surge en que hay trabajos en los que es más fácil acreditar la experiencia y otros en los que es realmente complicado, especialmente por cómo funciona todavía el mundillo, seguramente un puesto de operador de cámara será fácil de acreditar, pero muchos DJs que hayan trabajado durante años en pubs no podrán acreditar nada por la falta de papeles (contratos, facturas, etc.). Incluso los autónomos lo pueden tener complicado, ya que su epígrafe muchas veces está compartido por varias profesiones.

Pregunté a los profesores acerca de la marcha y la adaptación de los alumnos en este primer curso: “Al haber tanta afluencia de solicitudes pensaba que el nivel académico sería alto, pero al final ha sido el reflejo de cualquier Grado Medio. El Grado Medio esté al final de la ESO y justo antes del Bachiller, entonces mucha de la gente que viene aquí, no toda, llega con una ESO muy raspada y por eso no accede al Bachiller, o directamente no ha sacado la ESO y ha hecho una prueba de acceso para poder entrar. Entonces claro, ni el hábito de estudio, ni la capacidad de asimilación de conceptos están los suficientemente desarrollados como para cumplir el currículo de la titulación, que es muy ambicioso para el tiempo que hay. La impresión primera es que esto hay que tomárselo de otra forma, los alumnos necesitan un ritmo bastante más pausado del que en un principio por el Ministerio está previsto... al final se van enganchando, no hay falta de interés, hay gente que realmente quiere”, comentaba Víctor. Javi continuaba, “yo lo que veo son niveles muy distintos, el primer curso es complicado para nosotros, pero más todavía para ellos porque deben adaptarse como clase. Hay gente que viene de la ESO, pero alguno viene de otra titulación de imagen y sonido, otro tiene una titulación universitaria pero se ha apuntado porque le gustaba esto... entonces aunar todos esos niveles es complicado.”

Para acabar estuvimos hablando de escuelas privadas. En España siempre ha habido escuelas privadas de sonido que ofrecen titulación no oficial por cursos de precios bastante elevados, tanto en cursos para DJs como para técnicos de sonido de todos los niveles. Les pregunté su opinión sobre esas escuelas: “Creo que no deberíamos ser considerados rivales, deberíamos ser complementarios”, comentaban, “pueden servir de especialización“.”El precio puede estar justificado si los grupos de alumnos son pequeños y el equipamiento con el que cuentan es de calidad”, concluyeron.

En general me he llevado muy buenas impresiones de lo que ofrecen los estudios de Técnico de Video Discjockey y Sonido, por lo menos tal y como se plantea en el instituto La Marxadella de Torrent. A pesar del poco tiempo que pasó desde su aprobación a su implantación, los problemas iniciales con el equipamiento y lo heterogéneos que son los grupos de estudiantes, los resultados pueden llegar a ser buenos gracias al esfuerzo de los profesores. Me pareció increíble que tengan que encargarse de preparar ellos mismos todo el material escrito con el que cuentan los estudiantes para trabajar, es algo digno de elogio. Es una lástima que el primer año los alumnos tengan una enorme carga de materia teórica y que las asignaturas más “divertidas” queden para el segundo curso, algo que probablemente aumente un poco los niveles de abandono. Los profesores me explicaron que esto se tuvo en cuenta, y que a petición del Ministerio, realizaron una revisión de los contenidos del curso y propusieron pasar algunos contenidos de segundo a primero para mejorar ese aspecto, pero el al final el Ministerio no hizo caso de sus recomendaciones, y el programa quedó tal y como está ahora. Por lo menos lo intentaron.

El equipamiento con el que cuentan para realizar el segundo curso y que los alumnos estaban deseando comenzar a usar me pareció de lo más apropiado, quizá todo muy centrado alrededor de Pioneer, pero a fin de cuentas es lo que se van a encontrar si consiguen trabajo. Desde aquí a los alumnos les deseo toda la suerte en sus exámenes finales y mucha suerte y paciencia también cuando decidan entrar al mercado laboral. La van a necesitar. Quiero también expresar mi más profundo agradecimiento a los profesores por facilitarme tanto mi trabajo. Ojalá sigáis muchos años con ganas de enseñar. Os dejo con una foto de los alumnos (no muy buena, seguro que ellos ya saben más de fotos que yo), miradlos bien, quizá alguno sea el que os haga saltar en la pista de baile dentro de muy poco.