Ahá, estás ahí!!!!!!!!! me dije al descubrirlo. Por lo tanto empecé a descargar una rápida y furiosa andanada de trompadas y patadas, hasta que en medio de esa acción desperté: le estaba pegando a mi mujer !!!!
Por suerte ella lo tomó a risa y no tuvo consecuencias serias. Me quise morir, hasta ahora no sé cómo disculparme... Le quedarán algunos moretones.
Es la 2da vez en 5 años que le pego estando durmiendo. En la anterior fueron más bien palmadas fuertes e insistentes en las nalgas. Ella gritó, y medio dormido le pregunté qué hacía ahí, para volver a dormirme instantáneamente.
-----------------------------
Ahora que recuerdo, en una ocasión, le pegué en los testículos a un tipo que no conocía. Viajaba en un ómnibus y dormia. Soñé que estaba donde en realidad estaba, pero que del portaequipajes se caía una caja inmensa y que parecía pesada. Qué susto!!! Abrí los brazos violentamente para atajarla y en ese movimiento desesperado fue que se produjo esa involuntaria agresión. Por suerte pareció que el tipo, que viajaba sentado a mi lado me creyó. Qué situación tan rara...
-----------------------------
Alguien más tiene alguna anécdota de esta clase?