#240 la RAE son los padres
Jon manteca una curiosidad no seras frances?
#242
Sillones de ventaja.
#244 No hijo no,yo soy de la vieja españa. Aqui deberia haber pasado lo mismo que en francia.
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A mí los gitanos nunca me han gustado. No es una cuestión personal sino quizás conceptual. Nací en el 79 y la percepción sobre los gitanos con la que crecí fue la que tocaba en aquella época: marginación, drogas y delitos. Quizás si hubiese nacido hoy me criaría con otro concepto sobre ellos, pero ya no se puede arreglar. También digo que no seré yo quien vaya a tirarles piedras, pero tampoco quien les apoye en sus reivindicaciones. Sin duda existe un choque cultural dificil de esquivar.
Pero claro, hay que asumir algo que ya no se puede esconder: han avanzado muchísimo en cosa de quince años. Aunque su integración es algo casi imposible (por culpa de ambas partes), se han pegado un lavado de imagen de tres pares de cojones. Eso sí, por casualidad. Y esa casualidad se llama inmigración, fenómeno sociocultural en el que han quedado completamente diluídos, para bien y para mal. Nos quejábamos de lo malos que eran los gitanos y de los problemas que ocasionaban, hasta que empezamos a ver que nuestros nuevos hamijos podían llegar a ser bastante peores. De la noche a la mañana en la calle se pasó de temer a los gitanos, a temer a otras etnias mucho más conflictivas. Es una realidad que muchas personas no quieren admitir cegadas por un fanatismo buenrollista sin sentido, pero en España hemos pasado de cruzarnos de acera cuando veíamos a dos gitanos, a cruzarnos ahora con ellos con total normalidad. Con indiferencia y cierto recelo aún, pero con normalidad.
Al final el éxito de la integración de cualquier minoría depende más de ellos mismos que de las mayorías predominantes del país que corresponda. Les deseo suerte.
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Efectivamente, yo como mayoría no tengo ninguna necesidad de integrar a nadie con los míos. El problema lo tiene el que quiere integrarse. Exactamente lo mismo le pasa al español que se está yendo a trabajar al extranjero sin tener ni puta idea del idioma ni las costumbres, y no te digo nada si cae en un país en el que además predomina otra etnia y religión. O agacha la cabeza, o le irá mal. Y el que no lo entienda las va a pasar muuuuuuuuuy putas en este mundo. Pero mucho.
Que cada perro se lama su rabo.