¿Has soñado con Jean-Michel Jarre alguna vez?
El arquetípico sueño que muchos hemos tenido con toda seguridad que es ir a un concierto que se celebra en nuestra propia ciudad (ése hay unos pocos privilegiados que han podido hacerlo realidad..jajaja) o incluso en nuestro barrio, o que le hemos recibidido de incógnito en casa, como un primo lejano que viene a visitarnos por primera vez y a conocernos, o que le hemos tenido de copas por una noche como si de un colega de toda la vida se tratara...
Me refiero a otros más variopintos, que representen la base de un relato como una pequeña historia o cuento (Fan fiction).
No hace falta que sea exactamente como lo soñaste. Se pueden (se deben, hasta cierto punto) añadir detalles explicatorios cuando la simbología aparecida en el sueño asi lo requiera, pero bueno, tampoco pasa nada si se trata de una cuestión freudiana, se deja así y ya está, a la libre interpretación...jajaja.
También se pueden restar detalles que por su naturaleza raruna entorpezcan la asimilación de la historia o el significado o mensaje ímplicito que ésta pueda albergar. Así se le aporta más fluidez al relato. Se aceptan las propias interpretaciones que el narrador del sueño considere. Pero bueno, aunque éso ya es algo muy íntimo, si alguien se atreve...
Por ejemplo no es lo mismo describir un sueño donde estás de vacaciones en un hotel de lujo y te encuentras de casualidad en la piscina con Jarre vistiendo albornoz blanco y sandalias, que el que ha soñado que estaba en una playa desierta y se encontró con Jarre pero iba con un tanga de leopardo a lo Rappel... es decir, tiene su encanto el relato, pero quien así lo estime está en derecho de poder variar ciertos detalles para hacerlo más asimilable o digerible.
Sirva como ejemplo, y con ánimo de romper el hielo, pongo este vídeo de Iker Jiménez, donde nos relata las sensaciones de su encuentro con Jean Michel y un sueño de su infancia que le marcó para el resto de su vida al descubrir el origen del que provenía.
El arquetípico sueño que muchos hemos tenido con toda seguridad que es ir a un concierto que se celebra en nuestra propia ciudad (ése hay unos pocos privilegiados que han podido hacerlo realidad..jajaja) o incluso en nuestro barrio, o que le hemos recibidido de incógnito en casa, como un primo lejano que viene a visitarnos por primera vez y a conocernos, o que le hemos tenido de copas por una noche como si de un colega de toda la vida se tratara...
Me refiero a otros más variopintos, que representen la base de un relato como una pequeña historia o cuento (Fan fiction).
No hace falta que sea exactamente como lo soñaste. Se pueden (se deben, hasta cierto punto) añadir detalles explicatorios cuando la simbología aparecida en el sueño asi lo requiera, pero bueno, tampoco pasa nada si se trata de una cuestión freudiana, se deja así y ya está, a la libre interpretación...jajaja.
También se pueden restar detalles que por su naturaleza raruna entorpezcan la asimilación de la historia o el significado o mensaje ímplicito que ésta pueda albergar. Así se le aporta más fluidez al relato. Se aceptan las propias interpretaciones que el narrador del sueño considere. Pero bueno, aunque éso ya es algo muy íntimo, si alguien se atreve...
Por ejemplo no es lo mismo describir un sueño donde estás de vacaciones en un hotel de lujo y te encuentras de casualidad en la piscina con Jarre vistiendo albornoz blanco y sandalias, que el que ha soñado que estaba en una playa desierta y se encontró con Jarre pero iba con un tanga de leopardo a lo Rappel... es decir, tiene su encanto el relato, pero quien así lo estime está en derecho de poder variar ciertos detalles para hacerlo más asimilable o digerible.
Sirva como ejemplo, y con ánimo de romper el hielo, pongo este vídeo de Iker Jiménez, donde nos relata las sensaciones de su encuentro con Jean Michel y un sueño de su infancia que le marcó para el resto de su vida al descubrir el origen del que provenía.