#870 Pues por eso digo, qué hacéis entonces dando quejas de la corrupción política y demás, si los políticos están haciendo lo propio y lo que debemos hacer todos: ir a lo nuestro. Nos compramos cada uno una pistola y actuamos según la ley del oeste, a tiro limpio. La ley del más fuerte y ya está .
Respecto a los pasquines que van soltando esos grupos de ultraderecha y que tanto os gustan, decir que siempre ha sido una estrategia de estos grupos en tiempos de crisis y que les funciona muy bien a nivel de marketing. Podéis creer en lo que queráis, pero no me fío de esta gente un pelo. Por ahí empiezan, que si echando a los inmigrantes y luego seguimos echando a la gente pobre,al que no tenga trabajo, al que estorbe y de paso si hacemos una limpieza étnica por aquí y otra por allá pues estupendo, así hacemos un país como a nosotros nos gusta. En fin, que ni un extremo ni el otro. Yo no pude ver el programa de Ana Pastor, pero me creo lo de que a esta periodista se le vea el plumero en ocasiones. Pero si tengo que elegir entre una política destroyer de capitalismo voraz y ley de la jungla en plan sálvese el que pueda, y una política solidaria donde se ayude al que más lo necesita, me quedo con la segunda opción aunque peque de ingenuo a veces y haya quien se aproveche de ello. Quizás mi defecto sea el no poder evitar sentir empatía por quien lo pasa mal. Pienso que hasta que no cambiemos de mentalidad los de "abajo", no lo harán los de "arriba" porque éstos no son ni más ni menos que un reflejo de la sociedad.
Respecto a los pasquines que van soltando esos grupos de ultraderecha y que tanto os gustan, decir que siempre ha sido una estrategia de estos grupos en tiempos de crisis y que les funciona muy bien a nivel de marketing. Podéis creer en lo que queráis, pero no me fío de esta gente un pelo. Por ahí empiezan, que si echando a los inmigrantes y luego seguimos echando a la gente pobre,al que no tenga trabajo, al que estorbe y de paso si hacemos una limpieza étnica por aquí y otra por allá pues estupendo, así hacemos un país como a nosotros nos gusta. En fin, que ni un extremo ni el otro. Yo no pude ver el programa de Ana Pastor, pero me creo lo de que a esta periodista se le vea el plumero en ocasiones. Pero si tengo que elegir entre una política destroyer de capitalismo voraz y ley de la jungla en plan sálvese el que pueda, y una política solidaria donde se ayude al que más lo necesita, me quedo con la segunda opción aunque peque de ingenuo a veces y haya quien se aproveche de ello. Quizás mi defecto sea el no poder evitar sentir empatía por quien lo pasa mal. Pienso que hasta que no cambiemos de mentalidad los de "abajo", no lo harán los de "arriba" porque éstos no son ni más ni menos que un reflejo de la sociedad.