Los fragmentos de glaciares que antes flotaban en el agua quedaron apoyados en terreno seco.
La inexplicable situación fue detectada por guardaparques de la Corporación Forestal Nacional de Chile (Conaf), quienes mensualmente monitorean la zona como parte del programa de control de la conservación de huemules que se mantiene en la región.
El lago tenía una superficie aproximada de alrededor de 10 hectáreas, y profundidades que van desde los cinco hasta los 25 metros.
http://www.lanacion.com.ar/Archivo/nota ... _id=919446