srdelosanillos escribió:
Hola tengo una duda a la hora de acualizar mi mesa con altavoces pasivos
Utilices cajas activas, pasivas, de coche o auriculares la metología para ajustar la ganancia de la mesa es idéntica. O dicho de otro modo: no cambia qué equipo tengas detrás de la mesa, para nada. Destruye esta premisa.
srdelosanillos escribió:
siempre hay que ecualizar con los faders y el master a cero
De hecho nunca. Antes de empezar a tocar ningún canal ya deberías saber qué nivel de presión sonora tienes a diferentes niveles de "volumen" en el master general (aunque para hacer esto seguramente utilizarás una fuente musical -CD, reproductor de audio portátil, etc.) y ya tendrías que haber realizado un par de ajustes de ganancia (fuente musical suele ser estéreo, eso son dos canales). Pero en cualquier caso, si hay algo que vas a ajustar y es la ganancia, lo mejor es justamente lo contrario: mutear el canal y empezar el ajuste utilizando el picómetro o vúmetro de tu la mesa gracias al PFL o CUE.
Aún así, supongo que lo que quieres decir es que una vez ajustada mínimamente la ganancia (no sea que esté a +20 dB para un micrófono de condensador de gran diafragma y se acople el sistema de manera sistemática y brutal), lo suyo es trabajar con los niveles de fader de canal y master en su "posición de inicio". Eso estaría bien para el máster del equipo, pero igualmente te recomiendo que, tras ajustar la ganancia (luego veremos cómo), subas poco a poco el canal, ya sea hasta el nivel de 0 dB ya sea hasta el nivel que creas oportuno (puesto que no es norma que los fáders deban estar trabajando sólo y únicamente a 0 dB).
El ajuste de ganancia "teórico" indica que el nivel de captación esté cerca de los 0 dB. Eso te permitirá certificar, por así decirlo, que todo lo que captas y el posterior trabajo eléctrico o digital se hará dentro de los parámetros establecidos y de mejor rendimiento. Esto puede ser válido para muchos canales, pero también es verdad que hay micrófonos donde nos interesará que el nivel de ganancia sea menor (OHs) o incluso superior (percusión, guitarras, incluso voces). Para muchos es conocido, por ejemplo, la curiosa distorsión -agradable- que se consigue excitando sensiblemente por encima de los 0 dB en los previos MIDAS. Sólo tu experiencia y oído te ayudarán a saber ya de antemano qué nivel de ganancia es el mejor para cada canal (teniendo en cuenta, incluso, la combinación entre micrófono y tipo de fuente). En cualquier caso, en mi manera de trabajar (que sin duda no es la única, puede haber mil millones de versiones más), siempre realizo el ajuste de ganancia con el canal como mínimo muteado (no sea que se esté enviando señal por error ya a un monitor), mirando los sistemas de ayuda que tenemos al alcance (picómetro, vúmetro) y, una vez conseguido según mi intuición (porque todavía no he escuchado nada), antes incluso de subir el fader incluso aplico ya de manera casi sistemática el HPF o filtro pasa altos. Luego subo poco a poco el fáder del canal a la par que "observo" (de hecho escucho) lo que estoy captando. El subir el fader poco a poco me permitirá saber hasta qué nivel tengo -o no- problemas de acople, la reacción del equipo, etc., a la par que evito que, de golpe, suene un bombo y ensordezca a los que están ahí trabajando.
srdelosanillos escribió:
como han de estar los efectos cerrados o abiertos
Si hay algo que aplico (y creo que puedo generalizar) lo más tarde posible son, justamente, los efectos (aunque eso no quiera decir que los tenga en mente en cada uno de los pasos que voy realizando en el ajuste del canal). Después de la ganancia y el (re)ajuste del HPF suelo trabajar la compresión y luego las puertas de sonido (aunque no les presto demasiada atención, pues su trabajo, en mi caso, depende más del resto de micrófonos que no del propio protagonista). Lo de la compresión sólo tendrá sentido si es pre-ecualización, en caso contrario, debería empezar por esa ecualización (aunque, la verdad, suelo utilizar otros compresores post-canal, que, evidentemente, dejo para procesos posteriores). Una vez ajustada la dinámica, salto a la ecualización. En todos los pasos recuerdo que estoy trabajando en "cadena" y que lo que haga en un punto no sólo afecta lo que vendrá si no también lo que ya ha habido. Un ajuste de un compresor para un bombo dependerá a su vez de la ecualización, aunque la compresión sea pre-Eq (sobretodo, en este ejemplo, en la reproducción de las bajas frecuencias). Si ese canal en concreto tendrá un efecto determinado (la caja de la batería con su plate, hall o lo que haya decidido) suelo aplicársela cuando tengo una ecualización más o menos decente. ¿Por qué? Por lo mismo de antes: la aplicación de la reverb "coloreará" el resto del micrófono (de hecho, muchas veces termino este proceso ecualizando y realizando la dinámica de los efectos).
Si ya tenemos un par de micros ajustados, todo lo anterior debe sumarse a eso. Es decir: es fácil ajustar la caja de una bateria (SM57), pero esto se complica cuando ajustas los OH (ambientales). O las puertas de los toms, o la de bajo caja, dependerás de cómo toca el batería... Es un proceso que va creciendo poco a poco, más si realizas compresiones paralelas, en grupo, etc. Incluso en según qué grupos, pido que una vez ajustada tooooda la batería, el músico se quede ahí, puesto que después de trabajar el bajista pediré que ellos dos toquen a la vez: quizá el precioso bombo que he conseguido choca con el magnífico bajo eléctrico que me ofrecen desde escenario.
Ala, creo que te he comentado algún par de cosas más.
Un saludo
R. Sendra