Se mete las manos en los bolsillos y no se le escapa detalle alguno tras las gafas de sol que le regalo una ex ,paseando un dia laborable por las calles como si fuese un domingo de ramos. No deja escapar ni un solo recado de los programados,y si va bien de tiempo,se toma otro cafelito en un bar donde trabaja la rubia mas lista y guapa de la ciudad,se le queda mirando mientras despacha las comandas de las mesas con una gracia y salero que mas de una vez le an dado ganas de levantarse y gritarle delante de toda la clientela pija,como quien elogia la mejor faena de paquirri despues de matar al toro. Guapaaaaaa !!
Lo cierto es que cuando eya se percata de que esta hay,se lo queda mirando como quien ve un trozo de prado desde los barrotes de una carcel,pero es hay cuando el se corta y mira para otro lado como si hubiese algo mas interesante que ver.
Un tipo de lo mas normal,pero con una cierta flojera a la hora de ponerle un toque de gracia a cualquier situacion embarazosa,como la ocurrida hace unos instantes.
Llaman al timbre,y despues de dudar si merece la pena habrir la puerta,pregunta quien es con una voz dulce de adolescente voz.
Hola ,soy la vecina,habre un momento por favor y te cuento. Resulta que a la vecina,una mujer cuarentona,y dejada en su aspecto fisico,quizas por las llegadas de su marido a largas horas de la noche haciendo malabarismos por las escaleras y el olor a osborne que desprende la desdentada boca cuando saluda .
Esta pobre mujer,no a venido mas que a pedirme unas enormes bragas que le habia caido en mi tendedero,yo para no parecer desconfiado y fisgon,la he pedido que pasase y que cojiese ella las bragas para que no le diese apuros la siutacion,indicandole donde estaba el tendedero.
Cuando la he invitado a pasar del pasillo de la escalera,donde estaba a oscuras y no habian mas que sombras por la luz que desprendia mi casa,no me podia creer lo que estaba biendo. Tenia un enorme moco en la nariz,he aguantado la risa con todas mis fuerzas y pensando en una catastrofe en milesimas de segundos. Ni con esas he podido aguantar el descojono que retumbaba por las paredes del piso y como si mi estomago bombease aire hueco.
La señora a cojido las bragas y se a ido con un gracias y adios como si se despidiese de un trozo de trapo colgado de un retrete.
Ahora pienso que se habra percatado o no del mocarro en su casa o que pensara que era por las bragas. No tener el suficiente control para aguantar la risa en momentos como este es un problema serio,tener que sacar el mobil por la calle cuando te acuerdas de algo gracioso por la calle,reirte cuando alguien se pone isterico contigo por una tonteria,y miles de siutaciones asi,es casi una enfermedad.
Un tipo normal