tricky2k escribió:
hasta un cierto nivel, entenderías que se aplicara alguna regulación al bebercio en la calle.
Claro, sin duda, la gentuza ( y qué gentuza, en su mayoría niñatos exuniversiarios que no han acabado, tunos - sin duda lo peor-, jóvenes viejunos y rancios de polo Lacoste, novatos de provincias hijos de sueños de tiendas de trofeos de caza, horrores así) que la monta abajo lo hace porque los cabestros de los dos bares de enfrente ( uno de ellos parece salido del cuadro
el íncubo y la doncella de Füsli) les dejan beber en la calle, o no se oponen lo suficiente y fomentan un consumo de un público cabestro cerrando bastante más tarde de la hora a la que deben, saliéndose del formato de bar de barrio y ocupando este todavía por definir; pero que cabe con justicia en esta descripción: Bar de
pijoputas y de chusma
viejojoven, una característica de mi calle ( porque son dos o tres calles en torno al final de Reina Victoria, en el bulebar, nunca mejor dicho), dada la proximidad de esta zona a los colegios mayores para que se atrevan los niñatos y niñatas bisoños ( es que no es lo mismo) el primer año y luego atraer una clientela de otros colegios mayores y de chulitos en general de pisos de estudiantes y madrileños también, todos en búsqueda de carne fresca.
Parecido a los bares que sirven alcohol a los europeos de coma etílico
low cost de dos días; pero más perverso.
Ciertamente, estoy, no en desacuerdo, en contra de ese tipo de locales, clientes y prácticas; no porque me parezcan mal o bien, es que en mi caso y mi barrio vamos salir a tiros, cada dos por tres hay una trifulca porque no sabemos quién les tira huevos ( y parece que últimamente botellas) y nos acusan a los de nuestra casa, que una de las manos de cada piso da a esa calle; pero pueden ser los de al lado, no me gusta esta situación porque se está criminalizando la convivencia y, aprobar, no apruebo que se tiren botellas; pero huevos...
Y no me había molestado; pero aclaro, y no me parece que se pueda hablar de gilipollas; que los hay, tontito;, lo que hay es hijosdeputa.
España y su sociedad o sociedades iba dándose cuenta que en poco tiempo ya no va a haber qué exportar (con excepción de titulados de mediana formación a muy bajo precio e ideólogos orientalistas de la Facultad de Políticas), así que teníamos dos alternativas, a parte de bajar el precio de la vivienda para jubilados deseosos de sol a tiro de infarto de su tumba:
O convertir el país en próstibulo, o en un parque temático de borracheras y drogas y, ante la desigualdad territorial que iba a generar la primera posibilidad; se optará por la segunda, que se da muy bien en todas partes, hasta en el interior y puede haber un turismo con encanto o rural con Cazalla, anís de la Castellana o sidra, de esto no nos salva nadie:
Venga a España y salga a gatas y de esto no se libra nadie por mucho fuero que tenga.
Euskadi, descúbrela, también pedo.
Estos prohibicionismos no pueden llegar a ningún sitio, los concejales ibicencos que se hayan enperrado con este edicto o lo que sea serán apartados y esto será una anécdota más de lo que se puede legislar o disponer o lo que sea en las corporaciones locales.
Lo malo es que uno de cuarenta años de la misma Ibiza con un golpe de calor que beba agua va a poder ser multado, luego le perdonarán y tal, que es cuando el Consistorio se renueve de figuras. El caso es que esta gente pueda legislar, tendrían que encargar las leyes locales, ellos a sus constructoras o su magisterio ( ahora que están los de podemos y similares), pero que no legislar, además va dar igual, una marea de europeos, rusos o incluso chinos, van a potar en España.
Vamos, que era por debatir un poco al margen de pronunciamientos e hilos corales.