Nebulosa de Crema (Capitán Kokorikó)

EL VALOR DE LAS COSAS

Mariano trabaja de peón de obra, en la construcción. Hace de todo, aunque su especialidad es la taladradora.
Ahora, mientras destroza el viejo pavimento con la muela de metal, deja volar su imaginación y piensa en todas las cosas que compraría si tuviera dinero. Coches, casas, mujeres, juergas, negocios, viajes.
Quiere vivir como un rico y ni siquiera sabe el precio de las cosas que desea, tan sólo que no puede comprarlas.
¿Puede costar un reloj de pulsera más de, no sé..., mil euros, diez mil? Por una cosa que da la hora. Aunque sea de oro, joer.
A Mariano le cuesta mucho poner precio a las cosas, a las que no puede comprar y a las que no sabe valorar.
Como esos trozos de cerámica que acaba de destrozar, recién arrancados del subsuelo.
Son únicos en el mundo, y calcular su verdadero valor ya da igual.