TALLAS
Subido por Miguel Ángel el 01/03/2010
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Descripción
Balada pop-rock con la que intento reflejar uno de los temas que más me inquietan. Me refiero al hecho de que algunas personas tengan el serio y triste problema de distorsionar la realidad cada vez que se ponen delante de un espejo, aquellas personas que tienen una lucha diaria con la comida y que dejan de lado su vida social para sumirse en un mundo donde la única meta es bajar de peso o una talla más, en fin... quiero dedicar este tema a todas las personas que se hayan planteado algo similar en su vida y espero que se entienda el mensaje (por si le puedira servir a alguien).
Equipo utilizado
Portátil samsung N40. Cubase Sx. Ezdrummer (Nashville), amplitube 2 y guitar Rig 4 para las guitarras, guitarra Fender Strat, Bajo Warwick, teclado maestro M-Audio Oxigen 61,Izotope Ozone, microfono Akg, Sampletron, philarmonik orchresta (miroslav), silla, libreta, papel y muchos quebraderos de cabeza [...]
Letra
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TALLAS
Frente al espejo te consigues engañar
en el intento de engordar la realidad.
Tus huesos me cuentan la verdad.
Odias la mesa donde fingías comer,
Odias el vaso y los cuadros del mantel.
Y cierras tu puerta para ver
que la báscula no miente
y si te arrepientes algún día,
conozco los ingredientes
que te ayudarían a ganar
la batalla de las tallas.
Sube pronto esa muralla
que no te deja ver.
Ese vestido no te lo puedes poner.
Parece más grande de lo que fue ayer,
y tú te alegras
y sin querer dejas
tu vida.
Cierras la puerta y te vuelves a encontrar
con el espejo que te ha vuelto a engañar.
Tú te ves el doble pero en realidad
eres la mitad.
En el silencio has logrado recordar
que hace algún tiempo, cuando todo era normal,
salías de casa a pasear.
Hasta que un día en la revista apareció
la imagen sexy que tu vida destrozó.
Querías ser, de pronto, tan mayor...
Frente al espejo te consigues engañar
en el intento de engordar la realidad.
Tus huesos me cuentan la verdad.
Odias la mesa donde fingías comer,
Odias el vaso y los cuadros del mantel.
Y cierras tu puerta para ver
que la báscula no miente
y si te arrepientes algún día,
conozco los ingredientes
que te ayudarían a ganar
la batalla de las tallas.
Sube pronto esa muralla
que no te deja ver.
Ese vestido no te lo puedes poner.
Parece más grande de lo que fue ayer,
y tú te alegras
y sin querer dejas
tu vida.
Cierras la puerta y te vuelves a encontrar
con el espejo que te ha vuelto a engañar.
Tú te ves el doble pero en realidad
eres la mitad.
En el silencio has logrado recordar
que hace algún tiempo, cuando todo era normal,
salías de casa a pasear.
Hasta que un día en la revista apareció
la imagen sexy que tu vida destrozó.
Querías ser, de pronto, tan mayor...
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