La industria discográfica estadounidense no tiene planes de reanudar las demandas a los individuos que compartan archivos mediante programas P2P o descarguen música protegida por derechos de autor, según informa musicindustryreport.org.
La decisión, que fue tomada en Diciembre, fue ratificada estos días al Financial Times por Jonathan Lamy, portavoz de la RIAA (Recording Industry Association of America)
La noticia cobra trascendencia porque hace pocos días un jurado federal de los Estados Unidos halló culpable a Jammie Thomas-Rasset de violar la propiedad intelectual de la música que descargó y puso a compartir, y la condenó a pagar a la RIAA la suma de 1,92 millones de dólares por las 24 canciones que descargó y compartió con Kazaa, exactamente 80 mil dólares por canción (unos 57.700 euros).
Thomas-Rasset, de 32 años, quien vive con sus cuatro hijos en Brainerd, ciudad del centro de Minnesota, aclaró que "no hay manera en que vayan a recibir eso alguna vez. Soy una madre de recursos limitados, por lo cual no me voy a preocupar por ahora".
Preocupada por la publicidad negativa, la RIAA ha dado ha entender que no buscará obtener el total del monto de $1,92 millones. “Desde el primer día, hemos estado dispuestos a acordar por el caso, y nos mantenemos dispuestos a hacerlo”.
Los juicios buscan difundir que el intercambio de archivos es contrario a la ley, y parece que tuvieron éxito: el año pasado en Estados Unidos, según el investigador de mercado NPD Group, la proporción de usuarios de Internet que descarga música legítimamente por primera vez superó al porcentaje de internautas que descarga a través de redes de intercambio de archivos.
El conductor de ese cambio, afirman, ha sido la más amplia concesión de licencias, especialmente a la tienda iTunes de Apple. Ocho de los doce miembros del jurado en el caso de Thomas-Rasset dijo a los abogados que utilizan iTunes, lo que hacía poco probable que estén de acuerdo con que la gente todavía recurre a la piratería porque no pueden encontrar lo que buscan en los canales autorizados.
La RIAA dijo que está a punto de acordar con algunos proveedores de servicios (ISP) para hacer que se adopten medidas contra los infractores frecuentes. Pero el grupo dijo lo mismo en Diciembre, y esos planes no se han concretado.