En medio del debate sobre el poco dinero que reportan a los artistas los servicios de streaming, el grupo norteamericano Vulfpeck llevó a cabo un golpe maestro hace aproximadamente hace un mes. Los californianos editaron un álbum en formato digital en el que no suena absolutamente nada. Lo titularon “Sleepify” y en su lanzamiento pidieron a los fans que lo reprodujeran durante toda la noche en Spotify. El objetivo era conseguir el suficiente dinero con los royalties para realizar una gira de conciertos gratuitos, pasando, en la medida de sus posibilidades, por los lugares en los que el disco más se hubiera reproducido.
Aunque la estrategia de Vulfpeck era en todo momento legal, según la lectura que hacían de las condiciones del servicio sueco, finalmente el álbum ha sido retirado de Spotify. Cuentan en su perfil de Facebook que la empresa les pidió mediante un email que lo retiraran, a lo que ellos accedieron. Se trata de un final que, probablemente, no sea otra cosa que la señal de que su estratagema ha sido un éxito. Los últimos datos que hicieron públicos era que habían superado los 20000 dólares recaudados.
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Me dedico al periodismo, vivo en Galicia y lo que más me interesa es hablar de las nuevas formas de pagar, manipular y relacionarse con la música que han traído Internet y las facilidades para acceder a cierta tecnología.
