Hamid Rahmati
Me gustaría escribir sobre algo que siempre me ha hecho pensar. ¿Cómo llegan a tener éxito las bandas de países que no hablan inglés? ¿Deben simplemente imitar a las bandas británicas o americanas? Por ejemplo, he oído canciones de bandas iraníes muy similares a las de Deep Purple o Dire Straits. ¿Es necesario que una banda repita lo que otra banda ya hizo hace treinta años? No es un asunto sólo de las bandas iraníes o del este. Incluso en EEUU o en el Reino Unido, las nuevas bandas imitan lo que hacían las viejas bandas.
La identidad es la clave. Es un tema importante y complicado, pero quiero hablar de parte del mismo, y es sobre la identidad geográfica. Muchos piensan que el arte no tiene fronteras y yo también lo creo. Pero no tenemos que olvidar que las influencias continentales hacen que nuestro trabajo sea distinto al de los demás. Por ejemplo, en el Reino Unido y en los Estados Unidos tienen el mismo idioma, las mismas raíces y culturas cercanas. Pero la diferencia entre las bandas británicas y las americanas es obvia. Sólo hablo de bandas y músicos de rock. Iron Maiden son británicos. Metallica son americanos. Radiohead, Porcupine Tree o Pink Floyd son británicos, y The Doors, Frank Zappa o Dream Theater son americanos. Los estilos de estas bandas son diversos, pero hay una alma americana y una alma británica en su trabajo. Si las bandas de esos dos países son distintas entre sí, qué esperar de bandas de Japón, Irán o Turquía. No digo que una banda iraní deba tocar sólo Homayoun —una escala iraní— con la guitarra eléctrica. Digo que el alma iraní debería estar en su música, aunque sea rock.
Realmente el uso del propio folklore, la cultura nativa o las teorías domésticas, enriquece tu música, pero eso no es suficiente.
Durante más de cien años compositores como Bartok, Takemitsu, Khachaturian, Mashayekhi y muchos otros han escrito música basada en la de su tierra. El asunto es importante y serio en la música clásica, donde es fácil distinguir de oído el trabajo de un compositor húngaro del de uno alemán. Pero creo que la Identidad en la música y en otras artes es más complicada que esto. Si vemos la identidad desde otro punto de vista, encontramos que la inspiración de la música local del país de un música no es suficiente, no le va a dar a una obra una identidad especial aparte de otros conceptos. Por ejemplo, Stravinsky o Rachmaninov, los dos rusos, músicos de los siglos XIX y XX, tienen elementos rusos evidentes en su música, pero cada uno de ellos tiene su propia especialidad y su propia identidad. La Identidad en el arte es tan escurridiza que puede que sólo los musicólogos o los filósofos del arte puedan explicárnosla.
Visto en el blog de Hamid Rahmati. Foto de samuelviani.