Esta noticia, que he leído hoy, me ha hecho mucha gracia... lleva por titulo "
El coche eléctrico que fundió 17 millones de fondos públicos"
EN la foto
Jose Manuel Durão Barroso (izquierda) y el empresario Jesús Echave, en la presentación del coche eléctrico vasco en Bruselas en 2012
Un pequeño grupo de técnicos había conseguido, a la desesperada, cuatro o cinco secadores de pelo. Con ellos, trataban de secar, a eso de las cuatro de la madrugada en la puerta de la sede de la Comisión Europea, la parte electrónica de un pequeño cochecito. No hubo manera; se trataba de un prototipo de laboratorio que no estaba preparado para las bajas temperaturas y la humedad de Bruselas lo había fundido. Así que el Hiriko, el coche eléctrico vasco, no pudo arrancar unas horas después, durante su fastuosa presentación el 24 de enero de 2012. Y el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso, posó para la prensa dentro de un gracioso y modernísimo cascarón inerte
Debía ser una repuesta a la crisis (
"revitalizar sectores industriales hacia nuevos retos, como la movilidad urbana”)... pero el pobre cochecito, Hiriko, no arrancó ni entonces ni ahora ( Con ese nombre, actualmente, solo se me ocurre que sirva para una serie de dibus: "Las historias de Hiriko", y comics infantiles: "Hiriko en el parque" "Hiriko quiere irse de viaje", " el gran día de Hiriko")...
Este gran proyecto nacido originalmente en el MIT abarcaba todo un gran concepto empresarial y movilidad urbana:
..pequeños vehículos eléctricos de alquiler público (como las bicicletas) que reducirían el tráfico y la contaminación de las ciudades; con un sistema de distribución modular, en el que las distintas piezas las fabricarían empresas vascas y las mandarían a franquicias locales para el ensamblaje final. Después de Vitoria y Bilbao, el proyecto inicial mencionaba Londres, Berlín, Lisboa, Barcelona, Boston, San Francisco, Singapur, Rio de Janeiro... Se calculaban unas ventas de 24.000 a 60.000 coches al año que reportarían hasta 720 millones de euros y crearían “6.000 nuevos puestos de trabajo en Euskadi
Y hasta aquí el lado cómico de la noticia (Imaginarse con que boato se hizo la presentación de un coche que no anda ni
pa' lante ni pa' tras es digno de comedia
berlanguiana, "La escopeta nacional 3" ), pero la realidad de la gran proyecto (empresarial privada) de Hiriko que fue costeado con dinero público
17,4 millones de euros en subvenciones del Gobierno central (14,7) y del vasco (2,7), es la de un fraude que actualmente está en manos de la justicia,
..En el escrito de acusación, que admitió a trámite el mes pasado un juzgado de Vitoria, el fiscal describe un complejo (y presunto) entramado de sociedades diseñadas de tal modo que “todos los beneficios revertirían en los querellados” si el proyecto iba bien, pero si fracasaba, las Administraciones no podrían “recuperar los fondos invertidos”. Pone ejemplos de supuestas irregularidades: subcontratación de servicios a empresas del entramado sin trabajadores; pagos duplicados; la compra de un prototipo de coche de carreras que nada tenía que ver con el proyecto; o la ubicación de la sede de la compañía en un edificio propiedad de uno de los promotores, en el que se hizo una gran obra a cargo de Hiriko y donde se pagaba un alquiler bastante por encima del precio de mercado...
Pero bueno, yo me quedo en el día de aquella gloriosa presentación por todo el mundo
"... lo sacaron en Discovery Channel, The New York Times, The Guardian... Se montaron en él (y se tomaron fotos) Durão Barroso, el ministro José Manuel Soria, el alcalde de Vitoria, Javier Maroto... Salió en tantos sitios y con tanta gente que, si el pequeño Nicolás fuera un coche (como en aquel programa de los noventa de Raffaella Carrá), sería el Hiriko." y en aquellos técnicos con sus secadores.
¡Qué grandes momentos de la historia!
http://economia.elpais.com/economia/2015/04/04/actualidad/1428165339_667322.html