1. De nada sirve ir de impecable negro si el resto menos tu madre y alguno más va como si estuviera en Benidorm. Sacad ya la camisa hawaiana, hombre.
2. Las empresas funerarias se ocupan ya absolutamente DE TODO y ya ni te molestas en intentar participar...
3. Madre mía, qué mogollón de gente conocía éste hombre... ¿Iban a comprobar si estaba bien muerto? No lo descartemos...
4. Ya que no se podía hacer más, al menos me alegro porque su mujer al fin podrá descansar.
5. Hacía un calor de la hostia (obsérvese que lo del color negro así jode más).
6. No es fácil el saludo selectivo con gente que no te ve nunca.
7. No es fácil la despedida selectiva con gente que no te ve nunca. Afortunadamente conducía mi padre y pude aplaudir su salida a lo atracador de bancos...
8. La tierra estaba más seca que en un western de Sergio Leone...
9. Sí, fuí un hortera haciendo llamadas de móvil mientras esperábamos la llegada del cuerpo...
10. El salón del tanatorio guardaba gran paralelismo con el vestíbulo del hotel de El Resplandor...
Conclusión: todos los entierros deberían ser como la película de Tony Richardson...