He estado pensando largo y tendido si entrar en este debate, hace tiempo que no participio en hispa más que para compartir 3 ó 4 palabras, pero este tema que se trata aquí es algo que sigo de cerca de manera asidua.
Desde el 2008 que empecé a establecer relaciones comerciales con Oriente Medio mis inquietudes acerca de ese pedazo de tierra que comprende varios países y que acapara la atención del mundo entero no han hecho más que crecer. He leído bastante información, desde la muy recomendable publicación del Sr. Asher Susser “The Emergence of Modern Middle East”, pasando por “El choque de civilizaciones” de Samuel P. Huntington, “El Palestino” de Antonio Salas, la tesis de Frank Paya “Historia Moderna de Israel” –en el que se trata el Nacionalismo Árabe y la situación de Oriente Medio en la I Guerra Mundial– ”La última Religión Divina, ISLAM” del Dr. Murat Kaya, “Los Talibán” del periodista pakistaní Ahmed Rashid y otros tantos libros y publicaciones.
Además de todo esto, 8 años de relaciones comerciales con países de Oriente Medio han hecho que entable relaciones cordiales con países que se consideran enemigos entre ellos: como pueden ser Irán o Israel, pasado por Pakistán, Egipto, Qatar, Arabia Saudí o Kuwait, entre otros. Países con los que prácticamente hablo todas las semanas y que con el pasar de los años las frías conversaciones comerciales han dado paso a confidencias personales y humanas.
Por otro lado, donde vivo he conocido de primera mano el caso de un matrimonio que huyó de Siria “con lo puesto” hace 5 años, él ingeniero de caminos canales y puertos y ella arquitecto (si no recuerdo mal).
Algo que hay que tener en cuenta, al menos desde mi perspectiva, es que el nivel cultural e intelectual en todo este asunto tiene un peso específico importante. La ignorancia es la fuerza en la que se apoyan todos estos grupos fundamentalistas religiosos y a mayor ignorancia exista en esos países más fácil será formar a soldados suicidas. Si, digo soldados, porque nosotros los llamamos terroristas pero ellos son soldados, así se ven ellos.
Quizá no tendrán el potencial militar de poder invadir algún país europeo, desplegar paracaidistas y establecer bases militares tal y como hacen otros países occidentales en Oriente Medio, pero sí que tienen la capacidad de formar y entrenar a perfectos soldados para que acaten ordenes y lleven a cabo misiones militares.
En Europa la clase política no se atreve a usar la palabra guerra, porque ello nos retrotrae a las visiones de la de la II GM, mejor llamarlo conflicto armado o acciones terroristas, semánticamente queda algo más alejado que la palabra guerra y nos transmite que es algo puntual, pero no…estamos en guerra, ellos lo saben y nosotros queremos pensar que no es así. Es una guerra abierta entre dos formas diferentes de ver y comprender el mundo, la visión de un mundo Occidental y tolerante frente a la visión de un mundo intolerante apoyado por un fundamentalismo religioso propio del Medievo.
Occidente casi siempre ha hecho lo que le ha dado la gana en Oriente Medio, ha sido su patio trasero.
1. Desde mi punto de vista la semilla precursora de esta arbusto de espinos que nos sangra día tras día es el archiconocido tratado se Sykes-Picot de 1916, por el cual UK y Francia se repartieron los pedazos de lo que fue el antiguo Imperio Otomano. Un tratado urdido a escondidas y que fue un engaño cojonudo a lo que iba a ser una gran nación árabe tras la liberación del Imperio Otomano.
De aquellos barros, estos lodos. Una de las mayores reivindicaciones de ISIS, si no la mayor, es eliminar del mapa lo que supuso aquel tratado: la creación de fronteras anteriormente inexistentes, creando así países de la noche a la mañana en función de intereses mercantilistas y poniendo en el poder de esos países a personas afines que velen por la voluntad e interés de Occidente.
2. Inglaterra, de nuevo, la lió pero bien gorda tras largarse de Palestina de la noche a la mañana –literalmente hablando– tras la 2ª Guerra Mundial, dejando aquella situación sin resolver. Con dos pueblos dispuestos a matarse los unos a los otros…y lo que pasó es que estalló una guerra que arrastra sus consecuencias hasta día de hoy…y así seguirá mientras el mundo exista.
3. Durante el periodo de la Guerra Fría había que enfrentarse al comunismo, allá donde fuese necesario, aunque para ello se tuviese que dar adiestramiento y armas a grupos con ideas fundamentalistas o retrógradas propias de un juzgado de la inquisición española. Así pues USA armó, adiestró y dio golpecitos en el hombro a los Talibán y los encumbraba en la cima de los luchadores por la libertad frente a la potencia extranjera opresora –los rusos–
4. Luego llegamos a la guerra de Irak, en la que 3 presidentes cowboys la lían parda en busca de unas armas de destrucción masiva que nunca existieron y desestabilizan un país y generan una cantidad de mierda imposible de barrer. Saddam Hussein sería un dictador, pero no permitía los fundamentalismos religiosos y aplacaba el terrorismo con puño de hierro. Si, vale, a los kurdos no les tenía afecto alguno, no es justo…pero no había atentados constantemente en suelo europeo. ¿Es un punto de vista hipócrita y egoísta? Totalmente.
5. Y con Siria más o menos igual. Occidente ha vuelto a azuzar el avispero con un palo demasiado corto.
Es comprensible que si una persona mama día tras día violencia, sangre, muerte, destrucción y observe que gran parte de los problemas vienen por potencias extranjeras, se radicalice y decida matar infieles como el que más.
No defiendo la postura de los fundamentalistas religiosos, pero comprendo que esto suceda, no es más que una acción-reacción. Es más, mi actitud no es perro flautista amigo de las flores amante de los arco iris. No soy pro pena de muerte, pero con estos desechos humanos hago una excepción y por mí que los eliminen del mundo a sangre y fuego si es necesario.
Son un cáncer para Oriente Medio y el cáncer no se soluciona con buenas palabras, flores, cariño y amor, se extirpa o se aplica quimioterapia para erradicarlo…de lo contrario el paciente muere.
Durante años nos hemos acostumbrado a que hubiesen atentados todas las semanas en países de Oriente Medio, o simplemente que hubiesen decenas o centenares de muertos colaterales por bombardeos de países Occidentales tratando de eliminar células terroristas. Es lógico que no sintiésemos por ellos la misma empatía que sentimos cuando muere un francés o un europeo cualquiera…aquello no pasaba en casa, esto sí. Además culturalmente hablando somos occidentales y estamos más alejados de aquello que dista de la mentalidad de Occidente.
Ya para acabar, simplemente imaginad que España estuviese tomada por un ejército extranjero, el que sea. Ese ejército tiene la potestad de secuestrarte, llevarte a miles de km, encerrarte y juzgarte acorde a unas leyes que no son tuyas y que carezcas de defensa alguna. Pues es básicamente lo que hace USA en Guantánamo…y todos aquellos países que son aliados de los USA, son en parte culpables de ello a ojos de los pueblos que sufren esa clase de opresión.
El terrorismo islámico se ha propuesto reproducir los horrores que han vivido sus respectivos países pero en suelo europeo. Nos vamos a tener que acostumbrar a tener un atentado cada X tiempo de manera más o menor regular.
De nuevo, mi escrito no es pro tal o cual cosa, ni contra tal o cual otra, simplemente procuro tomar algo de distancia y observar las cosas tal como son. De donde viene y hacia dónde va…reconozco que no puedo ser imparcial, precisamente por esa afinidad cultural que siento hacia los que considero “mi pueblo”, aún así soy un ser humano y por ello incapaz de mantenerme ajeno al sufrimiento de una persona que no deja de ser víctima de un conflicto en el que no tiene nada que ver.
Un saludo.