Las putas rebajas
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Es un gen, tío. Las mujeres tienen gen que se activa cuando hay rebajas. Da igual cuando sea la fecha de las rebajas, el gen se activa igualmente, volviéndolas más fuertes, más rápidas, más listas, con ansias de empujar por un trapito con etiqueta X% de descuento, su agilidad se multiplica por dos, sus venas bombean más sangre y su sexo se seca, no tienen ganas de sexo durante las temporada de rebajas.
Así es señores, como actúa este malévolo gen. No tiene cura, no hay mutaciones posibles. Hasta las más pequeñas acompañas a sus mamás para aprender las técnicas de combate. Lidian con tenderos acojonados, vigilantes de seguridad, otros especímenes igualmente sedientos de ropa y descuentos.
Los hombres cabreados, haciendo largas colas para entrar aparcar al centro comercial, dando vueltas y vueltas en busca de una madriguera en la que meter su coche, o esperando en la puerta de la tienda, o lo que es peor, esperando en una cola que dos vueltas por dentro de la tienda mientras su pareja de apareamiento está en busca de más alimento textil. El hombre será devorado por la hembra si no saca la tarjeta de crédito, si rechista, o si le da la razón a la dependienta en vez de a ella. Será devorado por no haber sido rápido al coger la última prenda que ella quería, por dejársela levantar por otra hembra de otra manada.
Así es esta especie que aterroriza a otras especies y a la suya propia.
Así es señores, como actúa este malévolo gen. No tiene cura, no hay mutaciones posibles. Hasta las más pequeñas acompañas a sus mamás para aprender las técnicas de combate. Lidian con tenderos acojonados, vigilantes de seguridad, otros especímenes igualmente sedientos de ropa y descuentos.
Los hombres cabreados, haciendo largas colas para entrar aparcar al centro comercial, dando vueltas y vueltas en busca de una madriguera en la que meter su coche, o esperando en la puerta de la tienda, o lo que es peor, esperando en una cola que dos vueltas por dentro de la tienda mientras su pareja de apareamiento está en busca de más alimento textil. El hombre será devorado por la hembra si no saca la tarjeta de crédito, si rechista, o si le da la razón a la dependienta en vez de a ella. Será devorado por no haber sido rápido al coger la última prenda que ella quería, por dejársela levantar por otra hembra de otra manada.
Así es esta especie que aterroriza a otras especies y a la suya propia.
Jim Beam escribió:Un año más la televisión muestra la jauría de hienas de dos patas en avalancha a la caza y captura del trapo barato. Se abren las puertas de El Corte Inglés y el zoológico nacional corre ansioso a comprar todo lo que no necesita. Es casi un rito, una religión. Compren por cojones, que estamos que lo tiramos, oiga!!! Sólo el patético espectáculo de la alegría colectiva que muestran en nuestras pantallas los apremiados por el sorteo de navidad o "El niño", ataviados con chándales, bebiendo champán a morro en la calle, dando voces a lo San Fermín Style y mostrando el careto para que todo el mundo se entere de que son nuevos ricos supera este penoso espectáculo. Ni crisis ni hostias, el episodio se lleva repitiendo toda la puta vida. Prefiero pagar el doble y no tener que andar a zarpazos con zorras y gorilas sedientos de no llegar a fin de mes.
Tengo que reconocer que me ha encantado el párrafo, y recuerdo haber estado muy en desacuerdo con alguna de tus opiniones alguna que otra vez. Por cierto, no eres Perez Reverte verdad?
Jim Beam escribió:Un año más la televisión muestra la jauría de hienas de dos patas en avalancha a la caza y captura del trapo barato. Se abren las puertas de El Corte Inglés y el zoológico nacional corre ansioso a comprar todo lo que no necesita. Es casi un rito, una religión. Compren por cojones, que estamos que lo tiramos, oiga!!! Sólo el patético espectáculo de la alegría colectiva que muestran en nuestras pantallas los apremiados por el sorteo de navidad o "El niño", ataviados con chándales, bebiendo champán a morro en la calle, dando voces a lo San Fermín Style y mostrando el careto para que todo el mundo se entere de que son nuevos ricos supera este penoso espectáculo. Ni crisis ni hostias, el episodio se lleva repitiendo toda la puta vida. Prefiero pagar el doble y no tener que andar a zarpazos con zorras y gorilas sedientos de no llegar a fin de mes.
Por una vez y sin que sirva de precedente, estoy de acuerdo contigo
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