#30 hostia las cartas esas, yo tenía las de turismos
#33
Jajaja las recuerdas, eh? Yo tenía las de formula uno, las de turismos, las de coches de rally y las de ciclistas. Y no sé si también unas de jugadores de la NBA.
Sí, confirmado, las de NBA también.
hablando de cartas, ¿qué me decís de los cromos?
este lo recuerdo con mucho cariño, había otro de coches y otro de marcas de ropa deportiva
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#35 y los cromos que se jugaba dándole con la palma y había que darles la vuelta?
Recuerdo unos con purpurina y estar jugando en el portal de casa y que ponían Falcon Crest
De hecho, las cartas de Heraclio Fournier fueron las que me produjeron mi amor al motor... de tanques, de camiones... y los cromos adhesivos del Camel Trophy y de LPs que al acabarlo, en el kiosko te regalaban esto:
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#36 Mítico y los cascos con radio que ha puesto pasota también, recuerdo que me dolían las orejas de lo que apretaban y no soy cabezón.
#42
A nosotros nos prohibieron jugar a la correa y al gitano (conocido como el calentón), a mosca sobre ser más peligroso no.
La correa: esconder un cinturón de cuero en el patio del colegio y el que la encuentre liarse a correazos a todo Dios hasta llegar a una zona de marro o mare o como se diga en cada pueblo.
El gitano o calentón: robar del gimnasio un balón de balomnano (robar los medicinales eran el premio gordo) y liarse a trallazos entre nosotros a ver quien es capaz de regatear más veces y meterle a los demás más cañonazos.
Mosca: hacer un paseillo de dos filas enfrentados y elegir un mártir que empezara el juego, el que hacía el paseíllo por medio iba recibiendo collejones y si veía reirse a alguno, le tocaba suplirlo, si el que hacía el paseíllo enseñaba los dientes o no decía mosca antes de cada paseo de collejas, volvía a hacerlo de nuevo pero en vez de mosca, era diciendo moscardón, que basicamente era liarte a hostias con el que pasaba por medio... algunas veces saliamos a lágrima viva jajaja.
Los niños son crueles.