Lo comentamos el pasado mes de diciembre. La gran apuesta de Beatport en 2015 era convertirse en un sitio de streaming y adaptarse a las nuevas formas de consumo de contenidos, que también están cambiando hábitos en el mundo de la música de baile. Para desarrollar su estrategia rediseñó su web y lanzó una nueva aplicación móvil en marzo.
Pero sus movimientos no han acabado ahí. Hace un par de días se anunció que ahora su reproductor permite incrustar canciones en cualquier página web o red social, como sucede en plataformas como SoundCloud, Bandcamp o aquí en Hispasonic, por ejemplo.
Lo más importante desde la óptica de los artistas es que los creadores serán compensados económicamente por las reproducciones que se realicen mediante esa forma. Un plan con el que entran a competir directamente con SoundCloud, que curiosamente parece que está perdiendo cierta sensibilidad hacia los usuarios y hacia los músicos en su afán por convertirse en un servicio más cercano a lo que es Spotify.
Clark Warner, de la empresa estadounidense, ha dicho que “apoyar a los artistas ha sido algo importante en Beatport desde el primer día”. De ahí que hayan pensado en un servicio que, además de ayudar a la promoción, tenga funcionalidades que genere ingresos adicionales. Ahora habrá que ver si lo que pagan por reproducción entra dentro de lo razonable o en realidad todo esto es una medida estética.
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