Chasis eurorack en pedalera con Pittsburgh Modular Patch Box
El entorno de los sintes modulares está demostrando ser muy activo. El formato Eurorack ha supuesto una importante popularización y con el revival analógico han aflorado por doquier fabricantes en ese formato y también en los 'grandes'. Desde Pittsburgh Modular han decidido crear un chasis sumamente peculiar, pensado para llevar módulos Eurorack en una pedalera.
Aunque de primeras se hace extraño, si pensamos en la cantidad de engendros curiosos que están apareciendo en formato modular y que son realmente procesadores de audio, puede tener sentido. Esos módulos procesadores incluyen por supuesto toda clase de filtros típicos (y otro no tanto) en síntesis, pero también phasers, delays, distorsionadores y deformadores de señal de toda clase. Y es ahí donde quizá estemos pudiendo enfocar un nuevo ámbito de uso de los conceptos modulares.
Para mi gusto más valdría tener los módulos en un formato tradicional 'de mueble' y acompañados por algún pedal de control en el suelo, pero hay muchas razones para que pueda optarse por este formato en pedalera. La estética y la costumbre, porqué no, parte de ellas. Aún así, someter a un pisotón unos módulos no pensados para esa ubicación tan expuesta, o el posible derrame de líquidos (alcohólicos o no, igualmente dañinos en este caso) son riesgos que hay que valorar antes de decidirse.
Pero quizá la idea de establecer un formato modular en el mundo de las pedaleras que pueda ir más allá de esas infinitas colecciones de pedales individuales que actualmente se estilan, pueda ser acertada. Especialmente si llegan a concebirse módulos más resitentes y pensados de partida para ser usados desde el suelo.
Hoy por hoy, sólo un adelanto de imágenes con las que ir calentando el ambiente ante la llegada de la feria. Por lo que se ve en ellas cuenta con entrada y salida audio puramente pasivas aunque con sendos pots de nivel, algunos switches, y dos entradas traseras para pedales de expresión, acompañados de un múltiple de 3 vías. La alimentación externa, mediante un adaptador. Cabe esperar (aunque no se aprecia en las imágenes) la existencia de un bus eurorack para distribución interna de las señales de alimentación (aunque sea en su mínima expresión de un cable plano con conectores directos a cada módulo).
Toda una idea curiosa cuya recepción final supongo es tanta incertidumbre para la propia Pittsburgh Modular como sin duda lo es para mí.