Windows 10 y sus mejoras en el audio

A finales de septiembre del año pasado, Microsoft sorprendía con el anuncio de una nueva versión de Windows que estaría encaminada a toda una renovación de su ecosistema de aplicaciones, saltándose incluso la versión 9 para llegar directamente a Windows 10, la cual fue lanzada al público el día de ayer, de forma gratuita para usuarios de Windows 7 y 8, en un total de 190 países.

Esta generación de Windows es quizás de las más importantes desde su lanzamiento hace 30 años; renovación en cierta medida iniciada con Windows 7 tras el penoso Vista, y que desde entonces ha mostrado a Microsoft en una crítica necesidad de reivindicarse con Windows en muchos aspectos. Sin embargo, la llegada de las tablets, el furor de los smartphones y el avance de sistemas de dispositivos multi-touch como Android o iOS llevó en su momento a Microsoft a replantearse no solo su Windows Mobile, sino también su sistema de escritorio.

Y así llegó Windows Phone, Windows 8 y con este último la tan debatida interfaz Metro que permite diseñar aplicaciones dedicadas para pantallas táctiles, pero se convirtió inevitablemente en un dolor de cabeza para muchos usuarios dado que generaba una confusión no sólo en la forma de utilizar las aplicaciones en sí, sino en la dinámica y el flujo de trabajo del sistema operativo como tal.

Esto, sin embargo, no debe juzgarse de una forma tan drástica, ni mucho menos entrar a compararse radicalmente con otros ecosistemas como iOS/OSX, y esto es porque a diferencia de Apple, Microsoft no ha querido separar radicalmente la experiencia de escritorio de la experiencia multi-touch, para lo cual Windows 10 es un ejemplo fidedigno. Además la impresionante variedad de hardware que se tiene para Windows en términos de periféricos y de unidades de procesamiento, es muchísimo mayor que la de Apple, quien al controlar el hardware y cerrar su sistema a sus propias máquinas, establece una relación diferente con el sistema operativo.

Sin detenernos en ese tipo de comparaciones –que hoy en día se hacen cada vez menos relevantes–, lo importante es reconocer que Windows es un sistema cuya actualización afecta una notable cantidad de dispositivos y aplicaciones, lo cual esto implica un enfoque particular en el sistema, que quizás uno de los puntos más importantes de Windows 10, como veremos más adelante.

Podríamos pensar Windows 8 como el intento de un sistema operativo multi-touch por parte de Microsoft, el cual además implicó cierto abandono del flujo de trabajo tradicional que terminó por empañar grandes esfuerzos de los de Redmond. Y eso de "intento" es porque, siendo sinceros, algunos de los experimentos no funcionaron y es apenas ahora, con Windows 10 donde se puede hablar de una madurez en el sistema operativo, que permanece híbrido para ofrecer mayor fluidez entre lo táctil y lo tradicional. Sin lugar a dudas, Microsoft se ha puesto al día con muchas de las tareas que desde hace rato tenía a sus espaldas y ha creado el que quizás sea su mejor trabajo hasta la fecha. Veamos por qué.

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Windows 10 es de entrada un sistema que se propone no solo como la culminación de una etapa del sistema operativo, sino también como el comienzo de toda una revolución en el ecosistema Windows.

Quizás esto se sustenta en la que podría ser la novedad principal de Windows 10, o al menos su eje central: la universalización del ecosistema mismo, que si bien permanece en cierta fragmentación –al menos en las versiones que se incluyen en diferentes dispositivos–, ofrece desde sus APIs y posibilidades de programación herramientas unificadas que permiten crear aplicaciones universales y generar mayor compatibilidad entre las aplicaciones, los métodos de control y los diferentes dispositivos.

Esta búsqueda universal se refleja en muchas de las novedades principales, incluyendo drivers, librerías de recursos, posibilidades de integración en hardware y software y claro está, en la reciprocidad entre el flujo de trabajo del sistema de escritorio con el multi-touch, ahora incluido como un "modo" dentro de Windows.

Tal implementación en la plataforma general afecta radicalmente el flujo de trabajo, el rendimiento y la manera como funciona el entorno propiamente dicho, haciendo de la décima versión una de las más esperadas en años, no sólo porque represente un importante avance con respecto a las anteriores versiones, sino porque el panorama actual exige nuevas capacidades, interacciones, posibilidades, etc. Recorramos rápidamente las novedades más importantes:

• Retorno al menú de inicio clásico, ahora mejorado con diferentes características que se toman de Windows 7 y 8, ofreciendo un menú más coherente que la interfaz Metro
• Mejor integración software en tanto las aplicaciones de escritorio tradicionales se ubican junto a las dedicadas para aplicaciones “modernas” de la tienda
• Importantes mejoras de rendimiento, rapidéz en las aplicaciones y en labores de alta exigencia, incluyendo una optimización de gráficos y mejor manejo de Direct X
• Mejor integración entre lo multi-touch y la experiencia de ventanas tradicional, logrando ahora utilizar aplicaciones ideadas para pantalla táctil bajo ventanas en el escritorio
• Integración del asistente Cortana, el primero de este tipo en implementarse en ordenadores
• Nuevas notificaciones interactivas y centro de acciones, inspirado en el de Windows Phone y similar a la implementación que hizo Apple con las notificaciones de OSX basadas en iOS
• Creado para una amplia variedad de dispositivos: desde un Raspberry Pi hasta tablets u ordenadores de escritorio, pasando por máquinas de usos específicos, etc
• Desarrollo de una única plataforma para todas las implementaciones y usos, con APIs universales para compatibilidad con hasta 1 billón de dispositivos (meta propuesta a años). Esto permite también desarrollar aplicaciones universales que permitan, desde una misma lógica de desarrollo, funcionar en cualquier tipo de dispositivos
• Nueva política de actualizaciones con mejoras que se prometen más regularmente y sin necesidad de reinstalar o formatear el sistema para obtener novedades importantes
• Posibilidad de utilizar varios escritorios virtuales y además enlazar teléfonos y PCs de una forma nunca antes vista
• Mejoras importantes de seguridad

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Ahora bien, ¿qué hay de la música? Según comentaba Pete Brown de Microsoft durante la pasada conferencia de la empresa durante el reciente NAMM Show de verano, el equipo de Windows ha estado trabajando en diversas novedades dedicadas al sector del audio profesional, desarrollando nuevas APIs universales que le brindan a los desarrolladores nuevas funciones para audio y MIDI, posibilidades de compatibilidad, versiones especiales de Windows para máquinas musicales y claro está, una serie de integraciones multi-touch.

Windows 10 se presenta también como un sistema con importantes mejoras en la velocidad, el flujo de trabajo y el rendimiento del sistema en sí, lo cual ha de reflejarse notablemente en los procesos de producción de música y sonido. Sin embargo, hay una serie de mejoras específicas que vale la pena resaltar. Vamos a ello:

• Nueva API para MIDI igual para todos los tipos de dispositivos (e incluyendo aplicaciones de escritorio y de la tienda), con soporte multi-cliente (que permite por ejemplo integrar varias aplicaciones en torno a una misma interfaz) y mejoras importantes en términos de jitter y algunos errores menores. Esta nueva API permitirá además implementar directamente otras funciones a futuro, como por ejemplo Bluetooth MIDI
• Mejoras en el rendimiento de la pila/señal de audio tratada por el sistema en general, prometiendo latencias más bajas resultado de alterar los buffers, reduciendo hasta 15ms de latencia en todos los dispositivos con drivers WDM nativos, que además ofrecen buffers más pequeños (de hasta 1 de latencia) para los desarrolladores. Según explican en Microsoft, esto se reflejará radicalmente en los dispositivos móviles.
• Nueva función “audio core isolation” que permite a desarrolladores tanto de software como de hardware “aislar” un núcleo del procesador de la CPU para dedicarlo únicamente al procesamiento de audio, lo cual mejora el rendimiento de aplicaciones de producción sonora. Esta función sin embargo, es experimental y se propone como una prueba que estarán mejorando conforme los desarrolladores la implementen en sus aplicaciones.
• Mejoras notables en WASAPI, con nuevo IAudioClient3 que se reflejan en mejor latencia, mayor posibilidad de control, etc
• Nueva API/entorno AudioGraph creada para creación de audio y basada en WASAPI pero destinada a un uso más fácil y práctico. Programable en varios lenguajes y con una amplia variedad de funciones para la reproducción de samples, la visualización gráfica de material de audio o incluso labores como bouncing y monitoreo de la señal
• Nuevos codecs para soporte nativo de FLAC y ALAC, pudiendo exportar e importar material en estos formatos
• Nuevo protocolo Web Audio incluido en el nuevo navegador Microsoft Edge, que promete la posibilidad de crear aplicaciones que integren funciones de audio, incluyendo secuenciadores, apps de mezcla, etc, similar a como ocurre con Chrome.

Y eso no es todo. En la mencionada conferencia, Microsoft dio un adelanto de lo que viene a futuro para Windows 10 en términos de audio y conectividad:

• USB-C, USB 3/3.1 y USB Audio 2 Class
• Thunderbolt 3
• Latencias aún más bajas
• Bluetooth MIDI y ruteo MIDI dedicado
• Agregado y ruteo MIDI

Además de ello, también se ha hablado de nuevas implementaciones de la versión Embedded, la cual permite quitar componentes, bloquear el sistema y limitarlo a ciertas funciones. Esto permite que Windows sea ejecutado de una forma invisible como cerebro de determinadas máquinas, como una nueva MPC que, según comenta el mismo Brown, está siendo preparada por Akai para ser anunciada a finales de este año y tendrá al parecer intergado un motor basado en Windows.

En general encontramos un sistema bastante llamativo y cargado de importantes novedades, muchas de las cuales se verán realmente en acción conforme los desarrolladores comiencen a adaptar sus aplicaciones al nuevo sistema de Microsoft, el cual en términos de opciones dedicadas a exprimir las capacidades multi-touch en torno al trabajo con la música y el audio, aún queda pobre. Hace poco veíamos la interesante propuesta de Bitwig y se sabe de otros como SONAR y FL Studio que desde hace un tiempo vienen trabajando en optimizar sus herramientas para lo multi-touch. Habrá que estar atento a ello.

Windows 10 tiene la ventaja de tener los mismos requerimentos técnicos de su predecesor, por lo que cualquier máquina corriendo una versión moderna de Windows, en teoría soporta sin problema alguno la décima versión.

Ahora bien, como es costumbre con el lanzamiento de un nuevo sistema operativo, recomentamos no actualizar de inmediato hasta comprobar que haya soporte oficial por parte de los desarrolladores, dado que es muy probable que algunas cosas no funcionen como deberían, aún más si tenemos en cuenta que Windows 10 implica una serie de asuntos que tocan tanto el hardware como el software.

Según PC Audio Labs, SONAR Platinum, Pro Tools 12, Cubase 8, Studio One 3, Ableton Live 9 y Reaper están capacitados para funcionar en Windows 10 sin problema alguno. Sin embargo, es altamente recomendable esperar al informe oficial de cada desarrollador. Por ello para culminar, os dejamos una lista (que estaremos actualizando) con los comunicados de diferentes empresas de hardware y software musical al respecto de su compatibilidad con Windows 10:

• Avid alerta a sus usuarios: no hay soporte oficial de Windows 10 para ninguno de sus productos, incluyendo Pro Tools, Sibelius, Media Composer sus interfaces de audio, el protocolo Eucon e ISIS
• PreSonus informa que todos sus productos hardware y software son compatibles con Windows 10 a 64 y 32-Bit.
• En Steinberg comentan que algunos productos como WaveLab, instrumentos VST e interfaces de audio han sido probados de forma satisfactoria en Windows 10, sin embargo aún se presentan problemas en otros productos importantes como Cubase y Nuendo, para los cuales recomiendan no actualizar aún dado que puede incrementar problemas en audio y MIDI, además de incompatibilidad de productos con los nuevos protocolos de drivers WMD.
• Cakewalk confirma compatibilidad completa de SONAR, aunque alerta de tener presente también la compatibilidad de todo el sistema, como la interfaz de audio, plugins, etc.

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