Para eso, hay que tener una tarjeta SCSI conectada a la placa madre, normalmente en un slot PCI. Para comprobar si el sistema operativo reconoce la tarjeta se puede probar el comando lspci, que nos devuelve una lista de los dispositivos hardware conectados al PCI.
Si el sistema operativo no la reconoce, hay que cargar un módulo durante el arranque para que haga las funciones de driver. La lista de módulos que se cargan en la fase de arranque está en el fichero /etc/modules. Para comprobar el contenido actual de ese fichero se puede ejecutar el comando cat /etc/modules. Para saber qué modulo es, puede ayudar bastante consultar en google. Si el módulo no estuviera disponible en el sistema, habría que compilarlo e instalarlo. Si esto no fuera posible, habría que recompilar el kernel, que es una práctica que entraña algún riesgo.
Una vez que el sistema operativo haya reconocido el hardware, habría que montarlo de forma adecuada para que el script funcione satisfactoriamente.
Si se consiguiera la comunicación directa, sería muy ventajoso porque se podría prescindir del soporte intermedio.