Yo estuve trabajando con Logic varios años, era profesor de Cubase y me lo sabía al dedillo, pero prefería Logic. También me conocía ProTools de trabajar en ESCAC y había trabajado mucho con Jeskola Buzz y algunos Trackers que no tienen nada que ver. Allá por el 2006 me empecé a hartar de Logic Audio para PC y me planteé hacer el salto a Mac, pero no me hacía gracia cambiar de plataforma. Fuí probando todo lo posible en aquél tiempo, tanto en Mac como en PC. Logic se me antojó incómodo tras probar Reaper y algún otro secuenciador que manejaban el audio y los plugins con mucha más flexibilidad, de modo que al probar Logic 7 durante unas mezclas que duraron una semana me acabó poniendo de muy mal humor lo incómodo que se había vuelto Logic con sólo dos versiones, ya le tenía hecha la cruz.
Cubase, ni me lo planteaba, lo conocía muy bien y sabía todo lo que no me gustaba, probé Samplitude, un motor que sonaba tremendo, pero que era farragoso para el manejo de plugins y midi. Probé ProTools 7... (y más tarde probaría el 8 ), que se me antojaba un elefante en una cacharrería a pesar de que al dominar los atajos de teclado, la edición de audio seguía siendo muy flexible y potente.
Hablé con los chicos de Krystal Audio, me dijeron que aún no tenían la versión lista, pero que ya tenían algo gracias a que una empresa americana les había "comprado" el proyecto... que iban a hacer algo que aprovechase todas las tecnologías existentes aunque manteniendo el flujo de trabajo rápido y simple.
Ableton, buff... lo había usado cientos de veces en estudios de amigos, iban por el 6? o era ya la 7? El caso es que la parte MIDI/VSTi se me antojaba al flujo de tabajo de ACID, otro que tampoco me cuadraba por la manera de manejar los objetos en la ventana de arreglos, y eso que mi editor de vídeo siempre ha sido Vegas Pro y llevaba usando Sound Forge desde la versión 4.5 y sin ratón, no lo necesitaba.
Reaper estaba arrancando también, un proyecto tras otro me volvía a encontrar lo de siempre, quiero secuenciar instrumentos virtuales, MIDI y audio, y no quiero la ventana de Arreglos llena de pistas que no necesito, no quiero que los objetos se muevan de manera poco precisa, no quiero que... nada se salga de mi flujo de trabajo (que será mío y nadie tiene porqué compartirlo).
Performer pasó por delante mía. Sonaba muy bien, pero nuevamente el mismo procedimiento de creación de instrumento, las automatizaciones, etc... Otra vez ese feeling de Cubase. Los plugins, soberbios, todo muy claro, pero me sentía incómodo.
Todos los DAW de la época pasaron por mis manos del 2006 al 2009: Pyramid, Sequoia, Samplitude, ProTools, Cubase SX, Nuendo, Reaper, Logic, Performer, Tracktion, Sonar, Acid, nTrack, SAWstudio, QuartzAudio, Fruity Loops, EnergyXT, Temper, MuLab, Podium, Live, Sonar, Cubasis, Music Maker, Reason, Orion, etc...
En marzo del 2009 me llegó la respuesta a mi petición de entrar en el betatesting de la V2 de Krystal. Ahora se llamaba Studio One.
Aún después de haber elegido finalmente Studio One como centro del estudio e incluso haber decidido no actualizar ni a la V3 ni a la v4 porque me siento más comodo con la V2, he probado muchos otros DAW siguiendo el procedimiento de entonces, crear varios arreglos simples que no lleven a nada y más tarde intentar crear 3 o 4 temas. Demasiado tiempo perdido ya me hacen ir bastante rápido con un nuevo DAW. Al final, siempre gana el hecho de haber decidido cual es el que mejor se adapta a mí, pero lo tengo claro, cuando algún otro me facilite la tarea, Studio One quedará en la lista de mis Ex-DAW, y si necesito un año, un año estaré para cambiar.
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