El Fili Returns escribió:
Esa dualidad es peligrosa,muy peligrosa pues nos encaminamos hacia una nueva edad media encerrados en castillos.
Aunque yo no creo en la circularidad de la historia (ni siquiera en un movimiento espiral), es cierto que, en muchos aspectos nos encaminamos hacia un mundo feudal, con los poderosos con ejércitos privados (seguridad privada), la sanidad y la educación privadas, etc. Un mundo de amos y de siervos en el que parece que las ideas de la Ilustración, de ciudadanía, de igualdad y solidaridad, se han olvidado. Siempre nos queda la esperanza, al recordar que después del feudalismo y el despotismo ilustrado llegó la Ilustración y la Revolución.
Por otro lado, si vemos la Historia como lineal, el avance del individualismo y la libertad entendida como reducción paulatina del Estado (liberalismo económico y moral) puede conducir a una forma de anarquismo (llamémosle anarquismo de derechas, si se quiere) que puede dejar a mucha gente tirada en el camino (ya está pasando, por ejemplo en España, donde una ingente cantidad de jóvenes no tienen ni tendrán trabajo nunca). La "intromisión" del Estado, denostado como impedimento hacia el avance de las personas y las sociedades, tiene la importante función de controlar los desequilibrios y arbitrar el juego social, aunque parece que, como ya ha ocurrido en el pasado, los estados tienen que someterse a las directrices de los imperios ( a la hegemonía del "zar" Putin y su idea imperial de una Gran Rusia, como la de Catalina la Grande, al Imperio de mandarines chinos, totalitarismo en lo político, capitalismo salvaje en lo económico, al Imperio "de la Libertad" de EEUU y su rol de gendarme, su tecnología bélica). En teoría los experimentos del socialismo real deben dar el paso hacia la emacipación de la Humanidad (hasta Lenin decía que ellos, los comunistas, perseguían los mismos fines que los anarquistas, pero con otros "medios", es decir, con la fórmula del
estado transitorio marxista). La lucha por la hegemonía de los imperios ya no puede contenerse sólo con la válvula de escape del comercio, del beneficio, el consumo y demás técnicas de alienación sociales...Y además, las reglas de juego capitalistas, como decía, dejan a mucha gente tirada por el camino. El problema para el poder es lo que se podría denominar "conciencia global" que escapa de los medios de idiotización de masas; que la gente encuentre la manera de gestionar cada vez más de forma autónoma el trabajo, las ideas, el ocio, la cultura.
Tanto si la historia es circular o espiral (Dios no lo quiera, el siglo XX ha sido el siglo de los totalitarismos, de la nueva barbarie ) como si es lineal, la conclusión es, necesariamente, pesimista. En realidad, este pesimismo es sobre la naturaleza humana. Ojalá me equivoque.