Puede tener su lógica.
Aquí la otra alternativa es escuchar a mierdones de esos como el sueño de morfeo o no sé qué submarina. Ante ese panorama, hasta el Return to ommadawn es bueno XDDDDD
#858
La verdad es que creo que Jarre en Francia, más allá de la masa enardecida en sus macroconciertos, el resto ni fu ni fa, cuando directamente no les parece cutre.
Recuerdo en 1997 que estuve conviviendo en París durante una breve temporada con una familia de allá y cuando les decía que me gustaba Jarre, me miraban como un extraterrestre de los verdes con antenas.
#859
¿Se cumplirá también en este caso eso de que nadie es profeta en su tierra?
Pensé que Jarre era bastante conocido y querido en su país, en líneas generales.
Aunque habrá de todo, puede ser que a ningún miembro de esa familia en concreto le fuese mucho ese tipo de música.
Pero al menos de sus conciertos de París de los años 1979 y 1990 deberían haberse enterado casi todos los franceses, ya que en su día tuvo que hablarse mucho de ello en la radio y en la TV.
#860
Pues sí, pero lo que pasa con esos macroconciertos es que son engañosos; por un lado, los fans de todo el país van todos (están todos los que son). Por otro lado, mucha gente va por la curiosidad y la expectación, o bien simplemente porque les han contado que hay un show visual nunca visto.
En el caso del concierto de 1979 fue aún más curioso: la mayoría de gente asistente no sabía qué o quién era exactamente Jean-Michel Jarre, pero conocían la melodía Oxygene 4 que sonaba por doquier y resultaba un misterio; no se sabía exactamente quién la interpretaba, cómo ni de dónde salían esos sonidos marcianos. Se corrió la voz de que iba a tocar en directo "el músico de la melodía de Oxygene" y fueron miles de personas para ver su aspecto por primera vez (había salido en medios de comunicación e incluso había algún clip, pero estaba muy lejos de ser un personaje público).
Temas como Magnetics Fields Pt. 2 o Souvenir of China sonaban en los 40 Principales continuamente, yo he visto en aquella época carpetas de colegialas con la foto de JMJ, no digo más...
#864
En mi colegio solo nos gustaba a unos cuantos chicos (siempre varones, nunca féminas) y ya por entonces éramos "marcianos" en comparación con el resto.
Curiosamente, la mayoría de fans de Jarre lo éramos también de Oldfield, Vangelis, los juegos de rol, la ciencia-ficción y toda una serie de cosas que encontrábamos inspiradoras y que excitaban nuestra imaginación y creatividad.
El resto de la gente solo parecía tener interés en babosadas como Duncan Dhu, El último de la Fila o Los Secretos (música que a mí me inspira el deseo inmediato de ahorcarme).
Muchos años después tuve una novia a la que Jarre le resultó interesante porque... decía que era muy guapo... pero jamás llegó a escuchar un solo disco suyo.
#866
Como ya comenté por aquí en alguna ocasión, conocí a Jarre en mi época del instituto, cuando un profesor tuvo la feliz idea de ponernos el concierto de Houston en vídeo. Aunque anteriormente ya había escuchado algo de Oxygene a finales de los 70 (un primo mío tenía el single, con la parte 1 en la cara A y la parte 4 en la B, creo) y me había gustado.
Uno de los primeros discos que compré fue Equinoxe y lo grabé en casete para poder llevarlo en el walkman. Dejé la cinta a mas de un compañero de clase y todos me dijeron que no les había gustado, que les aburría o les daba sueño.
Otra vez dejé un maxi-single de Rendez-Vous a un amigo y me dijo que solamente le había gustado "la canción esa de la NASA" en referencia a Rendez-Vous 4, lo demás nada.
Así que estaba bastante solo escuchando ese tipo de música también. Efectivamente, éramos "marcianos". Pero el caso es que Jarre vendía muchos discos de aquella, supongo que la mayor parte a un público de mas edad que nosotros.
Se me ha quedado grabada desde entonces la imagen de un matrimonio (de unos 30-35 años por entonces) con el que coincidí frente a una tienda de discos en 1988, cuando él le estaba diciendo a ella que "la música que hace este tío está muy bien" mientras señalaba el disco de Revolutions que estaba en el escaparate.
Claro que ahí Jarre todavía no había empezado su "metamorfosis".
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