Nel-Ectron escribió:
un sabio es aquél que ha recogido suficientes experiencias en la vida como para responder con excelente eficiencia una cuestión.
Pues será un sabio en exactamente todo lo que rodea a su experiencia. Que puede ser muy diferente a la experiencia de otro en justamente en el mismo terreno. Y, desde luego, será un ignorante en todo aquello que hay un centímetro más allá de lo experimentado. Además de que puede que lleve toda una vida tomando la misma errónea decisión que, para él, es la adecuada.
Permíteme un chiste/cuento. Una mujer, joven, tiene una hija de unos 12 años. Y le quiere enseñar a hacer una receta de pollo transmitida de madres a hijas en su familia desde hace generaciones. Y en eso se pone, mostrándole cómo preparar el pollo, y le dice que el secreto de la receta familiar está en, antes de meter el pollo en el horno, cortarle la punta, sólo la punta, de las patas. Es justamente lo que sobra, pues lo que corta quita sabor al asado, mientras que el resto de la pata aporta un magnífico valor añadido.
Un día viene la abuela de la niña, y ésta le pregunta por la receta familiar del pollo. Y la abuela le cuenta que es una receta ancestral que ya ella aprendió de su madre (que aun vive y con buena salud), y ésta de la suya. Nadie fuera de la familia la conoce.
En Navidad se junta la familia y la niña le pregunta a la bisabuela por la receta, y la bisabuela le cuenta exactamente lo mismo. Cuando la niña quiere saber por qué lo que cortas de las patas es el quid de la receta, la bisabuela le contesta:
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¿El quid de la receta? El secreto del buen sabor es la proporción de comino y clavo. Las patas las cortaba porque el pollo no cabía en el horno.
Luego está el famoso experimento de los monos, los plátanos y la escalera.
https://psicologiaymente.com/social/experimento-monos-platanos-escalera
¿La experiencia? No sé.... no sé....