Es un tema más bien simplón, lleno de tópicos, y muy pegadizo. Podría ser un plagio involuntario, porque en cuestiones de música, a veces es difícil distinguir la imaginación del recuerdo. Al fin y al cabo, a ninguna discográfica le hace la más mínima gracia tener que renunciar a la inversión que han hecho en un lanzamiento, porque el autor se ha inspirado un poco demasiado y sin queriendo en el trabajo de otro.
De lo que no cabe duda es de que se trata del mismo tema musical, cambiando una percusión tópica por otra no más imaginativa y a velocidad diferente.
Espero que Fumero recupere con creces (y en euros) sus derechos sobre el tema.