Eso que se sale es i manera de espresarlo,me a salio asi.
http://salud.discapnet.es/Castellano/Salud/Prevencion_Riesgos/Enfermedades/Paginas/E_L_enfermedad_3.aspx
La exposición repetida y prolongada en el trabajo a ciertas substancias puede provocar un conjunto de enfermedades pulmonares cuyos efectos permanecen incluso después de que esa exposición termine. Algunos trabajos debido a los materiales que se manejan, al tipo de trabajo o al ambiente en que se desarrollan, suponen un mayor riesgo para las enfermedades profesionales pulmonares que otras. Los mineros de carbón son el caso más conocido de este tipo de enfermedades, pero no son los únicos. Por ejemplo, trabajar en un garaje o en una fábrica textil expone a la persona a productos químicos peligrosos, polvos y fibras que pueden provocar problemas pulmonares de por vida si no se diagnostican y tratan correctamente. Las diferentes sustancias que pueden afectar a los pulmones en un ambiente laboral se clasifican según su origen en polvos orgánicos e inorgánicos.
Son una causa muy importante de incapacidad laboral transitoria y permanente, y de enfermedades incapacitantes a largo plazo, suponiendo una grave alteración de la calidad de vida de estas personas y un coste elevado para los sistemas de salud de todos los países del mundo, tratándose paradójicamente de un grupo de enfermedades que suele estar unido al desarrollo industrial de una región.
De acuerdo con la Asociación Americana del Pulmón (American Lung Association):
Las enfermedades profesionales pulmonares son la causa principal de enfermedades relacionadas con el trabajo.
La mayoría de las enfermedades profesionales pulmonares son debidas a la exposición repetida y prolongada, pero incluso una única exposición severa a un agente peligroso puede dañar los pulmones.
Las enfermedades profesionales pulmonares se pueden evitar.
Fumar puede aumentar tanto la gravedad de una enfermedad laboral pulmonar como el riesgo de desarrollar cáncer de pulmón.
En un ambiente mal ventilado, las partículas suspendidas en el aire se acumulan en las vías respiratorias pudiendo causar problemas pulmonares. Estas partículas pueden estar formadas por una combinación de: polvo, pólenes, mohos, suciedad, minerales, cenizas y hollín.
Las partículas de materia del aire provienen de diversas fuentes, como fábricas, chimeneas, tubos de escape, incendios, minas, obras de construcción y también de la agricultura. Cuanto más finas son las partículas más fácilmente pueden dañar a los pulmones, debido a que son inhaladas con mayor facilidad profundamente en los pulmones, desde donde además pueden ser absorbidas al resto del cuerpo.
Inorgánico hace referencia a cualquier sustancia que no contenga carbono, excepto ciertos óxidos de carbono simples, como el monóxido de carbono y el dióxido de carbono. Orgánico hace referencia a cualquier sustancia que contenga carbono, excepto los óxidos de carbono simples, los sulfuros y los carbonatos metálicos.
Ejemplos de enfermedades por polvos inorgánicos
Asbestosis: La asbestosis es causada por la inhalación de fibras microscópicas de asbesto. Estas se hayan en las cañerías y otros materiales de la construcción, y en los forros de los frenos y los embragues, afectando pues esta enfermedad a obreros de la construcción y a mecánicos de coches
Neumoconiosis de los trabajadores del carbón.
Silicosis: Es una enfermedad de los pulmones causada por la inhalación de cristales de sílice que se encuentran en el aire de las minas, fundiciones y de manejo de explosivos, así como en las fábricas de piedra, arcilla y vidrio.
Ejemplos de enfermedades por polvos orgánicos
Bisinosis: La bisinosis es causada por polvo que se produce al procesar el algodón, pudiéndose producir una enfermedad similar en la manipulación de otras fibras textiles como el lino o el cáñamo.
Neumonitis por hipersensibilidad (alérgica):es una enfermedad de los pulmones debida a la inhalación de esporas de hongos procedentes de heno mohoso, excrementos de pájaros y otros desechos orgánicos. Es conocida como pulmón del granjero.
Asma ocupacional o asma laboral: es debida a la inhalación de ciertos irritantes en el lugar de trabajo, tales como polvo, gases, humos y vapores, que aparece en el medio laboral
Las enfermedades profesionales por exposición a sustancias dañinas para los pulmones producen diferentes cuadros según la sustancia en cuestión, el tiempo y la intensidad de la exposición. Sin embargo, los síntomas suelen ser muy parecidos en todas ellas, siendo muy similares a los que sufren los fumadores.
Tos.
Expectoración.
Dificultad para respirar.
Dolor en el pecho.
Opresión en el pecho.
Ritmo de respiración anormal.
Los síntomas de las enfermedades profesionales pulmonares pueden parecerse a los de otras condiciones o problemas médicos. Suelen terminar en diferentes rangos y tipos de fibrosis pulmonar, dando según la sustancia patrones pulmonares restrictivos (que impiden la correcta expansión de los pulmones) u obstructivos (impiden el paso del aire por los bronquios) Siempre consulte a su médico para el diagnóstico.
Existen para alguna de estas sustancias una forma de presentación aguda o subaguda que puede cursar de forma más rápida con fiebre y dificultad respiratoria, llevando en los casos más graves a la muerte en un breve periodo de tiempo.
Por otro lado, no debemos olvidar la relevancia de estas enfermedades como causas predisponentes a diferentes tipos de cáncer pulmonar y de la pleura, de manera independiente y sinérgica a otros cancerígenos como el tabaco.
Las enfermedades profesionales de los pulmones, requieren en un inicio una correcta historia clínica en la que queden claros los factores predisponentes, tales como el grado de exposición laboral a ciertas sustancias, la duración de la misma, y la correcta correlación de los síntomas y su tiempo de aparición con la exposición. La realización de rayos X del pecho es la primera prueba que se debe realizar para el diagnóstico, siempre teniendo en cuenta que esta puede sobre o infraestimar la afectación pulmonar. Por todo esto, deben realizarse varios exámenes para completar el estudio y determinar el tipo y la gravedad de enfermedad pulmonar. Entre ellas se incluyen las siguientes:
Exámenes de la función del pulmón - exámenes de diagnóstico que sirven para medir la habilidad de los pulmones para realizar correctamente el intercambio de oxígeno y de dióxido de carbono. Estos exámenes se suelen hacer con aparatos especiales en los que la persona debe respirar.
Biopsia pulmonar, con examen al microscopio de tejidos, células y líquidos de los pulmones.
Estudios bioquímicos y de las células de los líquidos de los pulmones.
Examen de la reactividad de los bronquios o las vías respiratorias.
Otras pruebas de imagen, como la Tomografía Axial Computerizada (TAC).
El seguimiento y tratamiento de las enfermedades pulmonares profesionales y ambientales es un problema sobreañadido por su complejidad, ya que en el momento del diagnóstico suelen ser enfermedades no reversibles, para las que tan solo es posible un tratamiento sintomático no curativo. Resulta pues fundamental la prevención, que puede fortalecerse mediante la labor del médico de atención primaria, del médico de empresa y con las medidas legales de prevención de riesgos laborales en las empresas en las que son frecuentes estas neumopatías
La mejor prevención contra las enfermedades profesionales de los pulmones consiste en evitar inhalar las sustancias que la producen, ya sea logrando disminuir la emisión de dichas sustancias o bien evitando el contacto con las vías respiratorias mediante el uso de mascarillas u otros métodos de protección. Otras medidas preventivas pueden ser:
No fumar. Fumar puede aumentar el riesgo de padecer una enfermedad laboral pulmonar.
Utilizar los dispositivos de protección adecuados, como por ejemplo mascarillas, cuando en el aire haya irritantes y polvo. En este punto es importante que no todas las mascarillas son válidas para evitar la inhalación de todas las partículas, siendo pues necesario el uso de una que se adecue a los riesgos particulares de cada exposición.
Evaluar la función del pulmón mediante una espirometría (una evaluación de la función del pulmón que se realiza en el consultorio del médico) con la frecuencia que su médico le aconseje para familiarizarse con la función de su pulmón.
Educar a los trabajadores sobre los riesgos de enfermedad del pulmón.
Contratar a un experto en salud laboral para que investigue el ambiente en el lugar de trabajo en busca de riesgos de enfermedad laboral de los pulmones.