Hey:
Se puede descargar de aquí...
Acabo de escucharlo y, bueno, supone la definitiva decadencia artística de esta mujer.
Es un disco que llega 10-15 años tarde, parece más un disco hecho de descartes de la época del Orinoco Flow que un nuevo trabajo. Es un disco rancio, mediocre, mortecino, con una Enya en más baja forma que núnca, aburrida y cansada de hacer lo mismo pero a la vez sin fuerzas para intentar evolucionar.
Volvemos a lo de siempre, tiene que seguir un estilo, sería absurdo hacer ahora rock, pero llega un punto en que forzosamente tienes que evolucionar, no ya innovar sino evolucionar, y Enya está tan estancada y alejada de la realidad musical actual como Mike Oldfield (por citar otro icono de la new age).
Este disco significa la muerte final de la llamada New Age. ha llegado el momento de erradicar ese género, un género que dió sus magníficos frutos, pero hace años que no aporta nada al mundo musical, y Enya, siento mucho decirlo, se ha convertido en un títere de su propia fama y de su propio género.
Una pena porque los temas que hizo para la BSO de The Lord Of The Rings fueron excelentes y presagiaban una nueva vida artística y comercial. pero este disco es un burdo regalo a sus fans menos exigentes.
nota: *
saludos
Se puede descargar de aquí...
Acabo de escucharlo y, bueno, supone la definitiva decadencia artística de esta mujer.
Es un disco que llega 10-15 años tarde, parece más un disco hecho de descartes de la época del Orinoco Flow que un nuevo trabajo. Es un disco rancio, mediocre, mortecino, con una Enya en más baja forma que núnca, aburrida y cansada de hacer lo mismo pero a la vez sin fuerzas para intentar evolucionar.
Volvemos a lo de siempre, tiene que seguir un estilo, sería absurdo hacer ahora rock, pero llega un punto en que forzosamente tienes que evolucionar, no ya innovar sino evolucionar, y Enya está tan estancada y alejada de la realidad musical actual como Mike Oldfield (por citar otro icono de la new age).
Este disco significa la muerte final de la llamada New Age. ha llegado el momento de erradicar ese género, un género que dió sus magníficos frutos, pero hace años que no aporta nada al mundo musical, y Enya, siento mucho decirlo, se ha convertido en un títere de su propia fama y de su propio género.
Una pena porque los temas que hizo para la BSO de The Lord Of The Rings fueron excelentes y presagiaban una nueva vida artística y comercial. pero este disco es un burdo regalo a sus fans menos exigentes.
nota: *
saludos