Hasta el propio David Bowie reconoció que la adaptación —la letra tiene algunas variaciones— que el comandante Chris Hadfield grabó de "Space Oddity" era la más conmovedora jamás realizada. Y no era para menos, ya que fue grabada por el propio Hadfield desde el interior de la ISS mientras orbitaba alrededor de la tierra, y a la que posteriormente Emm Gryner, antigua colaboradora de Bowie, añadió partes de piano. Pero algo tan hermoso a la par que curioso, se topó con lo de siempre: los derechos de autor.
Más de uno pensará, ¿los derechos de autor afectan a algo realizado fuera de nuestros planeta? Desde luego que sí, y especialmente en la ISS. Los astronautas que allí viajan no suelen componer música como Hadfield —que además de la versión de "Space Oddity", trabajó en dos temas más—, pero sí realizan experimentos e investigaciones de todo tipo que están sujetas a propiedad intelectual. La nación que gestiona los derechos de cada trabajo depende de la nacionalidad del módulo de la ISS en la que se realiza el trabajo, ya que la ISS es el resultado de ensamblar diversos módulos creados por diferentes naciones.
Por lo que se ve en el vídeo, la grabación de la versión del popular tema del artista británico se realizó en tres módulos diferentes: uno que pertenece a EEUU, otro a Japón y otro a la Unión Europea, aunque este último fue transferido a la NASA posteriormente. La grabación realizada en la ISS fue transmitida a la Agencia Espacial Canadiense a través de los satélites y las estaciones de comunicación diseminadas por todo el mundo, y posteriormente montada y publicada en Youtube, esa "tierra de nadie". Semejante follón de derechos hizo que el vídeo sólo contara con permiso para estar online durante un año, en el que obtuvo más de 22 millones de reproducciones, y luego tuvo que ser retirado. Aunque en el fondo, eso era algo que probablemente nadie quería.
Por suerte, gracias a la generosidad de David Bowie, su equipo legal ha trabajado con la Agencia Espacial Canadiense para lograr dos años más de permanencia del vídeo en la red. Algo que celebramos los amantes de la buena música, especialmente si además estamos locos por la ciencia y trastornados por el espacio.
He trabajado como productor musical y discjockey. Desde hace años investigo y analizo la tecnología musical aplicada al DJ, buscando siempre las herramientas más innovadoras y observando su impacto en la industria musical.
