esos link llevan torres con varias grabadoras, o con robot, etc, pero siguen usando los CD.R, los discos comerciales se realizan de otro forma ...
El proceso de estampación de un CD-ROM requiere de una tecnología compleja y cara, pues se trata de una autentica cadena robotizada en la que todo se realiza de forma automática, siendo diversos brazos mecánicos los encargados de hacer avanzar los discos de una fase a la siguiente. Además, algunos pasos de este proceso se realizan en salas limpias, pues se debe evitar la contaminación con cualquier partícula. El primer paso a dar es la creación de un master en CD-R, paso que se puede dar con cualquier grabadora convencional como las analizadas en nuestro articulo. A continuación hay que crear el molde con el que se crearán los CD-ROM en serie. Este molde se hace sobre un cristal muy pulido y cubierto de una laca azul. Para grabar los pits que darán lugar a la información se utiliza un láser azul, es decir de mucha mas energía que los láser rojos o infrarrojos de las grabadoras de CD-R. El siguiente paso es recubrir el cristal con una fina capa de plata del 99,999% de pureza, que se vaporiza a 1.200 ºC en una campana de vacío. En ese momento se dispone de un disco con las marcas grabadas igual que en los discos finales. Como la producción en serie se realiza por estampación es necesario obtener un negativo en níquel, en el cual los pits estarán en relieve, más elevados que el resto de la superficie. Este paso se da mediante galvanoplastia, motivo por el cual es necesario recubrir de plata el disco de vidrio, pues es necesario que sea conductor de la electricidad. El disco de níquel obtenido es de mayor tamaño que los CD-ROM, por lo que ahora se debe recortar por troquelado, eliminando el circulo central y el aro sobrante exterior. Al dar este paso es necesario realizar un centrado de gran precisión (1 micra). Llegados a este punto ya se dispone del disco estampador. Un disco de níquel con el negativo del CD-ROM. El CD-ROM se crea en policarbonato transparente de calidad óptica, que se funde a 300ºC. Cuando tiene grabados los pits por estampación, se enfría rápidamente para evitar deformaciones. Sobre el policarbonato se deposita una capa de aluminio que será la encargada de reflejar el rayo láser. Este aluminio se pulveriza al vacío y tiene una pureza del 99,999%. Como el aluminio se oxidaría al contacto con el ambiente, se aplica una capa de laca acrílica liquida, que se reparte uniformemente en un proceso de centrifugado y se endurece por la acción de luz ultravioleta. El CD-ROM ya esta listo para poder ser usado. Sólo quedan los detalles que mejorarán su aspecto, como la serigrafía, que se realiza en un máximo de seis colores o el empaquetado en cajas o fundas de plástico o cartón. Al proceso anterior, puramente productivo, hay que añadir los controles de calidad tanto ópticos como digitales que garantizan que los discos funcionaran correctamente. Como comprenderá, por la complejidad del proceso no es algo en lo que se pueda hablar de "distribuidores", pues para hacer discos por estampación hay que crear una fabrica completa en las que intervienen muchos equipos de trabajo. En cuanto a las duplicadoras se trata simplemente de varias grabadoras de CD-R que se conectan a un pequeño ordenador dedicado exclusivamente a grabar, y se integra todo en una caja compacta. Oscar G. Peinado
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