vagar escribió:
No creas que eso no repatea a una parte importante de un público bastante tradicional y concienciado, el "por qué será" puede que no tenga los efectos que los promotores intentan producir.
Hombre, tampoco es que sea necesario que los intérpretes aparezcan en bolas... pero lo cierto es que la Caballé daba poco la imagen de Mimí en La Boheme, se supone que es una jovencita bohemia, malnutrida y tuberculosa... lo mismo aplica a los tenores. Y ahí tienes a Juan Diego Flórez o a Kauffman que son bien guapos... aunque eso no detrae nada de su calidad técnica.
Como tú mismo dices la ópera es un arte escénico y quizás no se trata de que sean guapos si no más bien que destilen cierto carisma que hace más fácil al público identificarse con el personaje, tal cual ocurre en el teatro o mucho más en cine y televisión.
Qué decir entonces del pop. ¿Acaso no fueron las estrellas de la ópera tan idolatradas como estrellas del pop?.
vagar escribió:
Me pasó con Diana Krall, en cuanto empezó a salir despechugada en las portadas de los discos me dio la impresión de que iba a dirigir su carrera en una dirección que seguramente no me iba a interesar y dejé de prestarle atención.
Yo diría que la Krall es tanto más interesante con menos ropa
pero bromas aparte, puede no interesarte la incursión de la Krall musicalidades más "cabareteras", pero yo diría que la polémica portada tenía bastante relación con la temática del álbum.
La Krall es estupenda como pianista, como cantante y además es una mujer bella y carismática... por eso es una estrella.
Si alguien prefiere escuchar discos de señores bajitos y panzudos o sopranos gordas... bueno cada cual tiene sus gustos.
Yo quería ir más lejos y creo que alguna vez lo he comentado, en el pop actual el actor es el personaje, es indistinguible. Para ser una estrella hay que convertirse en un personaje público, saber que perderás tu vida privada o que al menos influirá enormemente en tu carrera profesional y saber también que la voracidad del público se extiende mucho más allá de tu voz o tu talento con un instrumento. Y que si no estás dispuesto a poner todo en el asador, a dar todo, simplemente no te harán caso.
Y si no eres bello o no tienes carisma, invéntalo. O pon un equipo a trabajar en ello. Un peinado más imposible, un vestuario más escandaloso, inventa una historia que de un trasfondo a lo que haces. Se habla mucho de storytelling, tenemos que contar historias y siendo un artista multimedia debes hacerlo en todos los media a la vez y esa historia ha de ser consistente y llamar la atención del
Hace muchos años que una estrella del pop no es alguien que canta más o menos bien o toca más o menos bien un instrumento, o baila... de esos hay muchísimos. Y ya no me refiero a las boybands más o menos manufacturadas o a las princesitas del pop, eso es exactamente lo que hacen gente como Springsteen, o U2, o REM.
Lo de la MTV quizás sea el momento en el que todo cambió o al menos en el que podemos situar el punto de inflexión (el cambio venía de lejos), es el paso del cine mudo al sonoro que se llevó por delante a tantas estrellas del cine. Que se lo digan a Christopher Cross que pasó en 2 años de dominar las listas de éxitos a simplemente desaparecer.