![TAL-Sampler, la vuelta a los orígenes](https://files.soniccdn.com/images/articles/345/40790.jpg)
TAL-Sampler aspira a rememorar el sonido imperfecto de los protosamplers de los primeros 80s (Ensoniq, Akai, Emu...) imitando sus limitados sistemas de codificación/conversión. Si quieres un sampler de alta calidad no mires aquí.
TAL-Sampler aspira a rememorar el sonido imperfecto de los protosamplers de los primeros 80s (Ensoniq, Akai, Emu...) imitando sus limitados sistemas de codificación/conversión. Si quieres un sampler de alta calidad no mires aquí.
19 Recordings, sello que tiene vínculos con el programa de televisión American Idol, considera que la multinacional acordó un pago de regalías bajo a cambio de recibir un porcentaje en el accionariado de la empresa sueca.
Acaba de anunciar que ahora su reproductor se puede embeber en cualquier web o red social y, lo más importante, que los artistas serán compensados económicamente por las reproducciones que se produzcan de esa forma.
La medida llega después de las protestas de diferentes organismos que agrupan a sellos independientes y de una carta abierta de Taylor Swift, en la que mostraba su disgusto ante la política de pagos del nuevo servicio de streaming.
Los sitios web y aplicaciones que utilizan su API para ofrecer música tendrán un límite de 15000 reproducciones cada 24 horas. El anunció se ha hecho a través del blog que la compañía berlinesa mantiene para ayudar a desarrolladores.
Los suscriptores de pago de la radio especializada en música de baile podrán acceder a un catálogo de alrededor de 400.000 canciones. Comenzará a rodar en Estados Unidos, pero su objetivo es llegar lo antes posible a más países.
Robert Kodrk, uno de los responsables de contenidos de la compañía de Cupertino, afirma que van a pagar aproximadamente un 1,5% más que su principal competidor y que en algunos casos puede llegar al 3%.
La iniciativa, bautizada como New Music Fridays, tiene una página web donde se explica en diez idiomas el proyecto y además se resuelven posibles dudas.
Estos dos servicios han aterrizado en las últimas semanas en el país para conseguir algo que hasta ahora ha sido imposible: hacer que el aficionado japonés a la música la consuma en streaming.
Un contrato difundido por la web Digital Music News hace unas horas indica que la compañía de la manzana reparte entre los propietarios de los derechos de las canciones un 58% de lo que los usuarios pagan mediante su suscripción.