Finalmente apareció un Deepmind 12D de "B-Stock" en Thomann, que es lo que estaba esperando, y me he podido hacer con él. Después de haber estado trasteando con él un par de días, tal como señalan otros usuarios, creo que es injusto ese Sanbenito que le han colgado de clon del Juno 106. Este sintetizador tiene su propia personalidad y es inacabable.
Tiene sus limitaciones, por supuesto, principalmente derivadas de su sencilla configuración de osciladores. No, no puedo conseguir los sonidos que saca mi Korg KingKorg (que es lo más parecido que tengo a un analógico "real"), esos pads densos basados en múltiples dientes de sierra. Pero, por contra, la matriz de modulación y la unidad de efectos hacen que suene muy, muy bien. Para mi gusto, donde más brilla es en los arpegios, donde se consiguen rápidamente sonidos realmente bonitos. Todo ello junto hace que el Deepmind pueda llegar a ser imprevisible y eso es muy divertido.
En definitiva, ni mejor ni peor que otros buenos sintetizadores. Simplemente, una máquina con su propio carácter (que ya es muchísimo) y, eso sí, con una relación precio/calidad/prestaciones insuperable. La gente que tenga sus dudas sobre Behringer que se olvide: una calidad de construcción que no tiene nada que envidiar a otros sintetizadores desktop de miles de euros (del teclado, lógicamente, no puedo opinar) y un sonido muy bueno. Si siguen en esta línea de precios y sacan un polifónico más en la línea de sonido de Oberheim / Dave Smith, etc. la pueden liar muy gorda.
Tiene sus limitaciones, por supuesto, principalmente derivadas de su sencilla configuración de osciladores. No, no puedo conseguir los sonidos que saca mi Korg KingKorg (que es lo más parecido que tengo a un analógico "real"), esos pads densos basados en múltiples dientes de sierra. Pero, por contra, la matriz de modulación y la unidad de efectos hacen que suene muy, muy bien. Para mi gusto, donde más brilla es en los arpegios, donde se consiguen rápidamente sonidos realmente bonitos. Todo ello junto hace que el Deepmind pueda llegar a ser imprevisible y eso es muy divertido.
En definitiva, ni mejor ni peor que otros buenos sintetizadores. Simplemente, una máquina con su propio carácter (que ya es muchísimo) y, eso sí, con una relación precio/calidad/prestaciones insuperable. La gente que tenga sus dudas sobre Behringer que se olvide: una calidad de construcción que no tiene nada que envidiar a otros sintetizadores desktop de miles de euros (del teclado, lógicamente, no puedo opinar) y un sonido muy bueno. Si siguen en esta línea de precios y sacan un polifónico más en la línea de sonido de Oberheim / Dave Smith, etc. la pueden liar muy gorda.